Los 6 tratamientos de odontología más comunes en niños

Muchos de los tratamientos de odontología más frecuentes en los niños se realizan para evitar enfermedades. Otras veces, son una solución necesaria para revertir procesos patológicos. Te lo contamos.
Los 6 tratamientos de odontología más comunes en niños
Vanesa Evangelina Buffa

Escrito y verificado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa.

Última actualización: 01 abril, 2023

El odontopediatra cumple un rol fundamental a la hora de mantener la salud bucal de los más pequeños. Hay algunos tratamientos de odontología que se realizan con más frecuencia en los niños y aquí te los contamos.

La odontopediatría es la rama de la odontología que se encarga del cuidado y la atención bucodental de los menores, desde que son bebés hasta la adolescencia. En este lapso, hay algunas prácticas y procedimientos que se realizan de manera habitual, ya sea para recuperar la salud o para prevenir enfermedades.

Para que los más pequeños puedan disfrutar de una boca y unos dientes sanos, es importante cuidarlos desde las etapas más tempranas del crecimiento. Descubre los 6 tratamientos de odontología más comunes en los niños.

Conoce los tratamientos de odontología más frecuentes en los niños

Las consultas de odontopediatría son diferentes a las de los adultos. En la atención de los niños, los tiempos son más lentos y la paciencia y el respeto son fundamentales para lograr una relación afectiva y de confianza entre el pequeño y el profesional. Según la Asociación Dental Americana (ADA), las revisiones en los menores deben comenzar antes de que cumplan su primer año de vida. Luego, deben hacerse controles cada 4 o 6 meses, según lo indique el profesional.

En las consultas de odontopediatría, el dentista revisa la boca de los pequeños, controla la erupción dentaria y evalúa el crecimiento de los maxilares. Si detecta alguna alteración o un factor que ponga en riesgo la salud de la boca, tomará las medidas pertinentes. La mayoría de los tratamientos buscan prevenir afecciones como las caries y las maloclusiones.

Como complemento a los procedimientos, una de las principales funciones del odontopediatra es educar a los padres y a los niños sobre el cuidado de la boca. Según una búsqueda bibliográfica publicada en el boletín de la Sociedad Catalana de Pediatría, los buenos hábitos orales desde edades tempranas ayudan a prevenir las patologías prevalentes de la boca. A continuación, te contamos cuáles son los tratamientos más frecuentes.

A través de los sellantes se obtiene una superficie dentaria más fácil de higienizar y que retiene menos placa bacteriana. Es un tratamiento indoloro y cómodo, por lo que es bien aceptado por los niños.

1. Sellantes de fosas, surcos y fisuras

La evidencia demuestra que los sellantes de fisuras son uno de los tratamientos más comunes en los niños. Con este procedimiento es posible prevenir las caries en las piezas permanentes apenas erupcionan. De todos modos, también se los puede aplicar en elementos temporarios de niños con alto riesgo de padecer la enfermedad. Los sellantes consisten en rellenar las irregularidades de las caras oclusales de las muelas con un material especial.

2. Aplicación de flúor

El uso de flúor en el consultorio dental es una de las medidas preventivas contra las caries más usadas en la odontología infantil. La aplicación de este mineral permite fortalecer el esmalte y hacerlo más resistente a la acción de los ácidos que producen las bacterias orales. Además, se ha demostrado que el flúor es capaz de remineralizar el esmalte y revertir los estadios iniciales de las caries.

La aplicación de flúor en el consultorio es sencilla, indolora y cómoda para el paciente. Existen diferentes presentaciones, tales como geles, barnices, lacas y líquidos, como los enjuagues o el fluoruro diamino de plata.

3. Profilaxis dental

La profilaxis o limpieza dental profesional es un tratamiento que realiza el odontopediatra para eliminar la acumulación de placa bacteriana, sarro y manchas de las superficies dentarias. Con este procedimiento es posible quitar los residuos de la boca que el cepillado y el hilo dental no logran descartar.

En general, la profilaxis dental en los niños se realiza con ultrasonido, brochas y pastas abrasivas especiales. Aunque en casos puntuales, también se puede recurrir a curetas que raspan la superficie dental y despegan el sarro de manera manual. Así, se logran superficies dentarias lisas, brillantes y agradables al tacto.

4. Empastes

Los empastes se utilizan principalmente para tratar las caries. Aunque también pueden solucionar la pérdida de tejido dentario ocasionado por una fractura dental o por anomalías como las hipoplasias. Existen diferentes materiales para realizarlos: resinas compuestas, ionómeros vítreos y amalgamas, aunque estas últimas han caído en desuso por contener mercurio en su composición.

Cuando los dientes están muy destruidos y los empastes no son suficientes para restaurarlos, las coronas dentales son una excelente alternativa. Con estas fundas se recubre la porción visible de los dientes para que recuperen su apariencia y su función.

Las endodoncias infantiles permiten resolver patologías y conservar los dientes. Existen diferentes tipos de procedimientos: protecciones pulpares, pulpotomías, pulpectomías, apicoformaciones o endodoncias convencionales.

5. Endodoncias infantiles

Las endodoncias son otro de los tratamientos de odontología que con frecuencia se realiza en los niños. Esta terapéutica permite resolver patologías de la pulpa dental. De esta manera, es posible conservar los dientes en la boca y evitar su extracción.

La pulpa es el tejido blando que se encuentra en la parte más interna de las piezas dentarias. Contiene vasos sanguíneos, terminaciones nerviosas y células especializadas. Según un estudio observacional publicado por la Universidad Cooperativa de Colombia, esta zona del diente puede resultar afectada por caries muy profundas, traumatismos o como consecuencia de algunos tratamientos dentales.

6. Ortodoncia infantil

La colocación de aparatos de ortodoncia en los niños ayuda a corregir los defectos en el desarrollo de los maxilares y el posicionamiento inadecuado de los dientes. Estos permiten tratar alteraciones de la oclusión como mordidas abiertas, cruzadas, sobremordidas, paladares estrechos, afecciones en la alineación, apiñamientos y diastemas. También, sirven para corregir hábitos disfuncionales como la respiración oral, la succión de dedo o la deglución atípica.

Actuar apenas comienza el problema, evita que las maloclusiones avancen y se compliquen. De esta manera, los tratamientos son más rápidos, eficientes, cómodos y económicos. Por esta razón, es fundamental llevar a los niños a sus revisiones con regularidad y comenzar los controles con el ortodoncista a partir de los 6 años. En términos generales, se pueden distinguir dos tipos principales de tratamientos según el momento de la niñez:

  1. Ortodoncia interceptiva: se utiliza en edades tempranas, antes de los 12 años. Sirve para solucionar las alteraciones en los maxilares cuando aún están en crecimiento.
  2. Ortodoncia correctiva: se realiza cuando finaliza el recambio dental, alrededor de los 12 años. Con estos tratamientos se guía a los dientes a su posición adecuada. Este tipo de abordaje incluye a los clásicos aparatos fijos con brackets y también a los novedosos sistemas de alineadores invisibles, como el Invisalign.

Preferir los tratamientos de odontología preventiva para los niños

De los tratamientos de odontología para niños que te contamos, los que se aplican para prevenir enfermedades son más sencillos, cómodos y económicos. Además, permiten mantener la boca saludable y evitar complicaciones y dolor en tu pequeño.

Las revisiones regulares son una gran oportunidad para que el odontopediatra las realice cuando son necesarias. Además, son fundamentales para sostener el estado de salud bucal logrado con tratamientos anteriores. No postergues la atención dental de tus pequeños y llévalos al odontólogo de manera frecuente.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.