No es poco frecuente que algunos bebés tengan un bulto en la ingle. Aunque puede deberse a otras causas, las dos más comunes son, o bien que el bulto sea una adenopatía, o bien que sea una hernia inguinal. Aquí te contamos las cosas más importantes que debes saber de cada una de estas patologías.
¿Cuáles son las causas del bulto en la ingle del bebé?
Como ya hemos comentado, es bastante común que los bebés presenten bultos en la ingle. Estos pueden ser uno o más, y de diferente textura y localización. Además, pueden aparecer de repente o ir creciendo de forma paulatina. También es común que, dependiendo de cuál sea la naturaleza de este bulto, se acompañe de algunos otros síntomas.
Entonces, ¿qué debemos hacer? Lo importante es que, siempre que notemos algún bulto en nuestro bebé, consultemos con su pediatra. Este va a ser quien diagnostique correctamente el bulto y defina la actuación a seguir a continuación, dependiendo de cuál sea la causa del bulto.
Aun así, la mayoría de las veces, el bulto en la ingle del bebé se debe a una de estas dos causas que a continuación explicaremos. Esto puede darnos una ligera idea de qué tipo de bulto es el que presenta nuestro bebé, aunque en ningún caso sustituirá la visita al pediatra.
Bulto por adenopatía
Las adenopatías son una inflamación de los ganglios. Los ganglios son parte del tejido linfático de una persona. En este tejido se forman los linfocitos, células que forman parte del sistema inmunitario, encargado de la defensa frente a las infecciones que afecten el organismo.
Todos tenemos alrededor de 500 ganglios. Estos ganglios tiene forma redondeada y están repartidos por el cuerpo. Aun así, hay zonas en las que la densidad de ganglios es mayor, y estas son, por ejemplo, el cuello, las axilas o las ingles.
Los cambios en el tamaño de las adenopatías se producen cuando el sistema inmune se activa frente a una infección, aumentando la producción de células de defensa. Normalmente, cuando un ganglio aumenta de tamaño, solo refleja que el organismo está luchando contra una infección que puede ser más o menos agresiva. Una vez que haya pasado la infección, estos ganglios volverán a su tamaño habitual.
Quizá te interese: 5 alimentos para potenciar el sistema inmunitario
¿Cuándo debo consultar al pediatra?
Aunque lo más normal, como ya hemos comentado, es que aumenten de tamaño ante una infección que habitualmente pasará sin mayores consecuencias para el bebé, o que trataremos de acuerdo a lo que el pediatra recomiende, hay ciertas señales que deben alarmarnos y hacer que volvamos al especialista para que revise el bulto:
- Si el bebé presenta fiebre alta.
- Los bultos están rojos, calientes y son dolorosos al presionarlos.
- El bulto es mayor de 2 cm de tamaño.
- Aumentan de tamaño más allá de dos semanas de su inicio, o no empiezan a disminuir de tamaño pasadas 4 semanas.
- Son muy duros.
- Si, además de los ganglios agrandados, el bebé tiene otros síntomas, como adelgazamiento, cansancio, palidez, hematomas diversos por el cuerpo, sangrado por encías y nariz, o el abdomen hinchado.
Te puede interesar: ¿Qué es la criptorquidia? Causas, consecuencias y tratamientos
Bulto por hernia inguinal
La hernia inguinal se produce ya en el feto. Ocurre porque el conducto peritoneo-vaginal, que está presente tanto en niños como en niñas, no se cierra correctamente. Esto hace que quede un “agujero” que va desde la barriga hasta la ingle.
Una hernia inguinal es, en realidad, un bulto que contiene material que debería estar en la cavidad abdominal, como, por ejemplo, un asa intestinal. Las hernias inguinales son una patología muy común, más en niños que en niñas.
Las hernias pueden ser asintomáticas o provocar distintos síntomas en el bebé, como irritabilidad, dolor, vómitos o hinchazón abdominal. Lo normal es que las hernias se diagnostiquen en las primeras revisiones del bebé, en las que el pediatra inspecciona cuidadosamente estas zonas.
Cuando se presentan estos síntomas, suele ser porque la hernia se ha estrangulado, lo que quiere decir que la parte de intestino que contiene se está quedando sin riego sanguíneo, situación de urgencia médica.
Esta situación se conoce como incarceración. En ella se corre el riesgo de una necrosis del intestino acompañada de fiebre y sangre en las heces. Tiene una incidencia del 12% en pacientes con un promedio de edad de 1 año y 6 meses y la curva se pronuncia en los prematuros.
Normalmente, el pediatra decidirá cómo y cuándo tratar la hernia. Es una operación fácil, rápida y sencilla que no conlleva mayor riesgo para el bebé. La reparación de la hernia inguinal com laparoscopia es técnicamente más fácil y segura.
En cuanto al bulto en la ingle del bebé…
Los bultos en la ingle del bebé pueden tener muchas causas. Las dos más comunes son las adenopatías y la hernia inguinal. Como siempre, lo más importante será acudir al pediatra en caso de detectar cualquier bulto o anomalía para que sea quien confirme el diagnóstico y establezca las medidas a seguir.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Ayala Moreno, I. A. (2017). Tratamiento de elección en pacientes pediátricos con diagnóstico de hernia inguinal. http://repositorio.utmachala.edu.ec/bitstream/48000/11874/1/AYALA%20MORENO%20INGRID%20ARIANA.pdf
- ADENOPATIAS EN PEDIATRIA [Internet]. [cited 2020 Apr 22]. Available from: http://www.scielo.org.bo/scielo.php?pid=S1726-89582007000200009&script=sci_arttext&tlng=en
- Adenopatías en niños: ¿cuándo sospechar en cáncer? | Revista de la Facultad de Medicina Humana [Internet]. [cited 2020 Apr 22]. Available from: http://168.121.49.88/index.php/RFMH/article/view/968
- Mora, L. D. A. (2013). Hernia inguinal: Un tema controversial (patalogía en niños). Revista Médica de Costa Rica y Centroamérica, 70(608), 621-624. https://www.medigraphic.com/pdfs/revmedcoscen/rmc-2013/rmc134l.pdf
- Prato AP, Casaccia G, Arnoldi R. (2017). Sincronización y manejo de la hernia inguinal en el bebé prematuro. Vol. 27, Eur J Pediatr Surg. https://www.siben.net/images/htmleditor/files/4.sincronizaci%c3%b3n_y_manejo_de_la_hernia_inguinal_en_el_beb%c3%a9_prematuro.pdf
- Zambrano KER, Alvarado KGE, Venenaula JKV, Aguilar CMM.(2019). Incidencia de hernia inguinal en pacientes pediátricos. RECIAMUC. 2019 Apr 1;3(2):214–33.