El movimiento libre en bebés: beneficios de aplicar el método Pikler

Los bebés, entre sus principales necesidades, precisan comprensión de sus padres, tanto desde lo emocional como desde lo corporal. Por lo tanto es esencial destinar momentos para observarlos y entender en qué periodo de su desarrollo se encuentran, así como comprender sus grandes capacidades naturales, sin interferir en ellas y cuáles son sus necesidades en cada etapa del crecimiento. El método Pikler, entre sus principales beneficios, permite el movimiento libre en los bebés.

Observar a un bebé implica predisposición y atención para poder percibir todo lo que es capaz de hacer por sí solo. De permitir esto se trata el movimiento libre. La forma en la que los padres o tutores acompañen, cuiden y cómo se comuniquen con el lactante, sin duda, será de gran influencia para su desarrollo.

De lo que no se trata el movimiento libre es de forjar, apurar o presionar al niño a realizar movimientos o posturas que aún no es capaz de realizar por sí solo. Esto, muchas veces, tiene que ver con ansiedades de los adultos, que no permiten al pequeño expresar libremente su potencial.

El movimiento libre en bebés

Permitirle al bebé moverse libremente, sin apresurar el orden natural de su crecimiento, es una muestra de confianza de los padres hacia sus hijos. Esto implica también que el adulto brinde al bebé un entorno seguro y adaptado para que pueda moverse, explorar y jugar, sin restricciones.

Sumarle a la libertad de movimiento la observación consciente del pequeño, ayuda a los padres y madres a conocer mejor a su hijo, a comprender y respetar su personalidad, su carácter, así como también su humor y sus gustos. Por lo tanto, fortalece el vínculo entre ambos, mejorando la respuesta de los adultos a las necesidades del bebé.

¿Qué es el método Pikler?

La pediatra húngara Emmi Pikler (1902-1984) creó un método enfocado en el respeto por el movimiento libre del niño, en el que el adulto no intervenga. Orientada a la primera infancia (de 0 a 3 años) describe que cada bebé sabe cómo adaptarse al espacio.

Defendió que los niños se desarrollen de acuerdo a su propia capacidad, siempre y cuando cuenten con un entorno seguro, con ropa cómoda. Así como de parte de los adultos que lo acompañen, que sea con respeto, paciencia y comprensión.

Pikler realizó numerosas investigaciones en las que comprobó que los niños que tienen libertad en sus actividades tienen mayor seguridad en sus aprendizajes y exploraciones. Tienen mas confianza en sí mismos y, por lo tanto, sufren menos accidentes.

¿Cómo aplicar el método Pikler para promover el movimiento libre en bebés?

Para aplicar el método Pikler, es fundamental que los adultos tengan noción de las etapas de desarrollo del pequeño. Esto les brindará herramientas para acompañar y favorecer a su felicidad. Se deben respetar los movimientos voluntarios que realice. Estos son expresiones de su desarrollo muscular, que favorecerá a su esquema corporal. Por lo tanto, implica reconocer y valorar al niño como persona, promoviendo su evolución como un individuo libre.

Además, es importante brindarle a diario espacios, tanto en el hogar como en instituciones escolares, que cuenten con elementos o instrumentos que lo familiaricen con la vida cotidiana, como puede ser la cocina, donde juegue y disfrute.

Los juguetes que se le ofrezcan al niño deben ser específicos, aquellos que les permitan usarlos de varias maneras para ampliar su creatividad. Además, existen el en mercado elementos concretos para emplear el método, válidos para el hogar como para las instituciones educativas. Los siguientes son algunos de los muebles Pikler:

• Túnel.
• Cubo.
• Rampa.
• Triángulo.
• Tarima.
• Arco escalera.

Beneficios del método Pikler

Una de las principales ventajas del método Pikler es que puede ser aplicado tanto por los padres o tutores como por sus educadores, así como también por los médicos, psicólogos, fisioterapeutas o cualquier otro agente sanitario que realice el seguimiento de salud del pequeño. Sin duda, será más provechoso para él si todos los adultos que interactúan con el bebé aplicaran el método.

En este sentido, se ha estudiado que a los niños les brinda los siguientes beneficios:

• Facilita la evolución autónoma de las posturas.
• Mejora desarrollo en los desplazamientos.
• Ayuda a la percepción y el manejo del propio cuerpo.
• Favorece el equilibrio.
• Influye positivamente en la relación afectiva con sus padres o tutores.
• Aumenta la conciencia del entorno que lo rodea.
• Contribuye a un mejor desarrollo integral.

En definitiva, el adulto debe involucrarse estando presente, con consciencia y constancia y, de esta forma, brindarle seguridad al niño. Es el pequeño el que emite las señales para que el cuidador lo guíe de manera oportuna.

Es importante que mantenga una buena comunicación, clara y sencilla, sin interferir en la actividad. El adulto debe mantener una actitud calma y pacífica. Por lo tanto, este método, dispone una gran herramienta para la crianza en los primeros años del niño.