Las manos agrietadas son una manifestación bastante frecuente en los niños y la mayoría de las veces, están relacionadas con la dermatitis atópica.
Afortunadamente, existen ciertos recaudos que se pueden tomar para prevenir y manejar esta condición, los cuales son bastante sencillos y prácticos. ¡No te los pierdas!
Causas de las manos agrietadas en los niños
Las consultas por la piel seca de los niños abundan durante todo el año. De hecho, la causa más frecuente de esta condición es la enfermedad atópica, aunque no es infrecuente encontrar casos de dermatitis de contacto de tipo alérgica.
La piel seca y las manos agrietadas suelen aparecer como consecuencia de la exposición a los ambientes cálidos, ventosos o fríos con bajo nivel de humedad. Por ejemplo, cuando se pasa mucho tiempo expuesto al aire acondicionado o cerca una fuente de calor, como un calefactor o una chimenea.
Finalmente, algunas prácticas de higiene excesivas también pueden producir esta condición. El lavado frecuente de manos o el uso de jabones inadecuados favorece a la resequedad y al desarrollo de fisuras en la piel.
Consejos para cuidar la piel agrietada en los niños
La piel de los niños es más sensible y delicada que la de los adultos. Por lo tanto, requiere de mayores cuidados para mantenerla sana. Existen algunas recomendaciones específicas para prevenir o tratar las manos agrietadas en los niños y te las contaremos a continuación.
1. Mantener un control dermatológico anual
Si bien lo más común es recurrir a la consulta con el dermatólogo pediátrico cuando aparecen lesiones en la piel, se aconseja realizar un control de rutina todos los años.
Entre muchas cuestiones, el especialista revisa los nevos y las lesiones cutáneas para descartar enfermedades de manera oportuna. Incluso, indica las medidas de cuidado más apropiadas para mantener la piel saludable y funcional.
2. Humectar la piel todos los días
La humectación regular de la piel es esencial para mantenerla funcional y sana, especialmente en los niños con antecedentes de dermatitis atópica. Uno de los momentos ideales para la aplicación de aceites o cremas hidratantes es después del baño, cuando el tejido está más receptivo.
Se recomienda elegir productos con emolientes y con alta concentración de vitamina a, vitamina e, karité y alantoína.
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3. Elegir siempre productos hipoalergénicos
La superficie cutánea de los niños es mucho más sensible que la de los adultos. Además, es mucho más delgada y permeable a los productos que se le aplican.
De acuerdo a las indicaciones de la American Academy of Dermatology Asocciation, los cosméticos con perfumes pueden empeorar la piel seca y agrietada. Por ende, es necesario optar por productos hipoalergénicos, libres de fragancias, químicos y otros agregados.
4. Mantener buenos hábitos al momento del baño
El baño es uno de los momentos ideales para ocuparse de la dermis de los niños. En el caso de las pieles más sensibles, se aconseja realizar baños cortos, con agua tibia y con los productos correctos.
Debido a la poca concentración de sebo en la superficie cutánea de los infantes, los productos de higiene no necesitan contar con una potente acción detergente.
5. No enjuagar la piel con frecuencia
Si bien la higiene es muy importante, el enjuague frecuente y el uso de productos de desinfección inadecuados pueden agredir aún más la delicada piel de los niños.
Por lo tanto, se aconseja que los pequeños se enjuaguen las manos solo cuando sea necesario. Es decir, luego de ir al baño, antes de comer, luego de tocar a los animales, estornudar y toser, entre otros momentos.
6. Usar cremas con corticoides para las manos agrietadas de los niños
La piel escamosa, seca y enrojecida requiere de cuidados con cremas a base de corticoides de baja potencia. Se deben evitar las pomadas a base de urea, debido a que podrían provocar quemazón en la delicada dermis de los niños.
No obstante, el uso de corticoides tópicos debe reservarse para las lesiones activas y agudas y no debe usarse de forma rutinaria o desmesurada. El uso indebido o prolongado puede provocar las siguientes manifestaciones:
- Atrofia de la piel (adelgazamiento).
- Estrías.
- Acné.
- Dermatitis de rebote.
- Telangiectasia.
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7. Realizar baños de avena coloidal
Algunas de las propiedades beneficiosas de la avena incluyen la hidratación y el alivio de la inflamación de la piel. Por este motivo, se la recomienda para reducir la picazón de la piel agrietada, seca o sensible.
Algunas de las propiedades beneficiosas de la avena se describen a continuación:
- Hidratante.
- Emoliente.
- Purificante.
- Antiinflamatoria.
8. Optar por jabones syndet
El contacto habitual con detergentes, agua y desinfectantes es un gran problema para la piel de las manos de los niños. Por eso, se recomienda utilizar agua y un jabón de pH neutro, sin fragancias y de producción certificada.
Los jabones syndet son los mas apropiados para los niños, ya que mantienen a la barrera cutánea en las mejores condiciones.
9. Aplicar vaselina
La vaselina actúa en las fisuras de la piel para sellar, proteger y mejorar la capacidad de retener la humedad y así, sanarla. Siempre que se vaya a utilizar este tipo de producto, es importante leer la etiqueta para corroborar que no contenga nada a lo que el niño pueda ser alérgico.
10. Acudir al médico especialista
Si bien los casos leves de piel agrietada pueden ser tratados en el hogar, ante la falta de mejoría luego de 2 semanas de tratamiento se recomienda consultar al médico. Incluso, cuando la piel agrietada presente sangrados, eliminación de pus, prurito intenso o el niño manifieste fiebre.
La importancia de mantener la barrera cutánea sana
En conclusión, la piel agrietada aparece cuando la barrera cutánea está comprometida. Por lo tanto, el enjuague y la humectación de forma rutinaria son uno de los pilares para mantenerla saludable y funcional.
Si bien el tejido cutáneo está en constante recambio y regeneración, lo ideal es optar por productos que posean un pH correcto, que humecten, que no provoquen irritación y que cumplan con sus funciones de forma eficaz.
Bibliografía
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