¿Cómo evitar la irritación de la piel en los bebés?
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La irritación de la piel de los bebés es una afección bastante común debido a las características diferentes respecto de la de los adultos. Por ende, las lesiones e irritaciones se presentan con bastante facilidad durante esta etapa de la vida. Sin embargo, su superficie cutánea tiene la capacidad de recuperarse rápido por medio de algunas medidas para implementar.
La piel de los bebés
La barrera cutánea de los bebés es competente al momento del nacimiento. Luego, a medida que la piel madura durante los primeros años de vida, es esencial que los productos para su cuidado sean los correctos. Además de ser una barrera física, algunas de las funciones importantes de la superficie cutánea de los pequeños incluyen las siguientes:
- Termorregulación.
- Mantenimiento de una hidratación adecuada.
- Intercambio de gases.
- Función inmune y protección contra patógenos.
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Estos son los tipos de irritación más frecuentes en la piel de los bebés
La piel del recién nacido es más susceptible a sufrir irritaciones o dermatitis. Esto se debe a que la barrera cutánea aún no completa su desarrollo.
Dermatitis atópica
La enfermedad atópica es una forma específica de eccema que se caracteriza por una inflamación crónica de la piel. La misma se presenta con comezón, piel seca, lesiones eccematosas y, en ocasiones, liquenificación. En el 60 % de los casos, se presenta a partir del año de vida y las localizaciones más frecuentes son las mejillas, la frente y las extremidades.
Irritación en la piel del bebé por el sudor
Los bebés tienden a sudar más de lo común, debido a su respuesta acentuada a las alteraciones de la temperatura. Por lo tanto, estas gotas irritan los poros de la piel y desarrollan un sarpullido superficial. La sudamina se caracteriza por granos diminutos en las regiones del cuerpo donde existe alta temperatura. También, aparece en la espalda, la parte superior del tronco o en los pliegues de los codos.
Dermatitis del pañal
La dermatitis del pañal es la afección de la piel más frecuente entre los bebés. Esta se caracteriza por una piel irritada con signos de eritema o mínimo enrojecimiento en las zonas del cuerpo cubierto por el pañal.
Se presenta con mayor prevalencia en los niños menores de 12 meses. A su vez, sus cuadros más graves pueden incluir focos escamosos o hasta un leve sangrado. Por lo tanto, se recomienda el uso de emolientes y pañales que no mantengan la humedad en la zona, de acuerdo con una publicación de Pediatric Dermatology.
Recomendaciones para evitar la irritación de la piel en los bebés
La piel de los bebés es mucho más delicada y frágil respecto de la de los adultos, lo que requiere de mayores cuidados y protección para evitar irritaciones. Por esto, los consejos básicos y simples se basan en mantener la piel del pequeño higienizada y seca.
Elegir correctamente los productos de higiene
Lo ideal es elegir productos para utilizar en los bebés que no alteren el pH de la superficie cutánea ni interfieran con la barrera protectora. Por ejemplo, se aconseja el uso de jabones suaves, sin químicos ni agregados. De hecho, mantener la barrera cutánea es fundamental para la supervivencia, ya que la piel de los bebés es más susceptible a sufrir infecciones.
Realizar una buena rutina de cambio de pañal
Cambiar de forma rutinaria el pañal mantiene en óptimas condiciones la piel de la zona. Además, evita que la orina, la materia fecal o el sudor permanezcan demasiado tiempo en contacto con la piel. Además, secar correctamente toda el área luego de cada cambio y utilizar los productos específicos también es una buena indicación.
Tomar medidas de cuidado al momento del baño
Al momento de bañar al bebé, se recomienda el uso de jabones suaves con tensioactivos que no sean irritantes y cercanos al pH de la piel. Incluso, hay que utilizar agua tibia y su duración debe ser breve para prevenir la sequedad e irritación. Al concluir, se aconseja secar con toques suaves la piel y no frotar ni generar fricción.
Humectar la piel en forma constante y diaria
La humectación contribuye a mantener la barrera cutánea indemne, funcional y saludable. Por eso, se recomienda aplicar emoliente en todo el cuerpo después del baño. En caso de requerirlo, se puede aplicar nuevamente en el transcurso del día en aquellas zonas que se encuentren descamadas o deshidratadas.
Elegir la ropa adecuada
El exceso de abrigos en el bebé puede favorecer el desarrollo de irritaciones por todo el cuerpo. Asimismo, se aconseja elegir prendas de vestir de materiales transpirables y naturales, como el algodón o el lino. Además, el lavado de las prendas debe ser con un enjuague suave y evitar el cloro, la lejía y detergentes fuertes.
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La irritación de la piel en los bebés y su evolución
En la mayoría de las ocasiones, la irritación de la piel en los bebés se cursa sin fiebre. No obstante, cuando se acompaña de diferentes signos y síntomas, se debe recurrir al pediatra. Incluso, en aquellos casos de dermatitis en los que no se observe mejoría o el cuadro no remita con las medidas implementadas, también debe acudir al especialista.