Ibuprofeno en el embarazo: riesgos y alternativas

El consumo de ibuprofeno en el embarazo entraña ciertos riesgos para el desarrollo del futuro bebé. En su lugar, existen otras opciones menos agresivas para el feto.

Tomar ibuprofeno en el embarazo puede provocar problemas en el desarrollo del futuro bebé.

Durante los meses de gestación, se debe tener cuidado con el suministro de medicamentos. Hay medicinas, como el ibuprofeno, que presentan contraindicaciones y son perjudiciales para el bebé. ¿Qué precauciones hay que tener en cuenta? ¿Qué hay que saber sobre el ibuprofeno en el embarazo?

El ibuprofeno es uno de los medicamentos más extendidos y se encuentra en la mayor parte de los hogares. Se trata de un analgésico, antiinflamatorio, indicado para tratar dolores musculares, cefaleas y artritis.                

Descubierto y patentado en 1961, en sus inicios se lanzó para tratar la artritis reumatoide. Actualmente, es un componente que se encuentra en otros medicamentos antiinflamatorios y se emplea para tratar los resfriados.

Ibuprofeno en el embarazo: por qué no tomarlo

Ante cualquier tipo de molestia durante la gestación, el ibuprofeno no será nunca el medicamento indicado para calmarla.

Los médicos no aconsejan el ibuprofeno durante el embarazo por los riesgos que supone para el feto. Además, porque no es aconsejable tapar síntomas que den señales del estado general de salud de la futura madre.

Es recomendable controlar la cantidad de paracetamol ingerido durante el embarazo.

Contraindicaciones para el bebé

Según estudios realizados, el consumo de ibuprofeno en el primer trimestre de embarazo puede acarrear estas consecuencias:

En los primeros dos trimestres de gestación, está contraindicado por los riesgos anteriormente descritos. Sin embargo, ante situaciones de necesidad, el médico puede recetarlo, siempre en su dosis mínima. No obstante, en lo que respecta a la última etapa del embarazo, el ibuprofeno está totalmente contraindicado.

Riesgos en los últimos meses de embarazo

Si la mujer toma ibuprofeno en el último trimestre de embarazo, se pueden presentar consecuencias graves tales como:

  • Disminución del volumen de líquido amniótico. Con ello, un retraso en el parto.
  • Problemas en el desarrollo de los pulmones del bebé.
  • Malformaciones cardíacas. El ibuprofeno puede tapar arterias del corazón que afecten gravemente al feto.

Independientemente de la etapa de gestación, el consumo de ibuprofeno en el embarazo aumenta el riesgo de sufrir abortos naturales. Por lo tanto, es mejor no tomarlo y consultar siempre a nuestro médico de confianza.

Ibuprofeno antes del embarazo

Además de los riesgos que presenta para la salud del bebé, este medicamento puede provocar problemas antes del embarazo.

En este sentido, el ibuprofeno reduce la producción de prostaglandinas, sustancias que resultan fundamentales para el proceso de ovulación. Las prostaglandinas, además, ayudan a que el embrión se fije a las paredes uterinas.

¿Cómo reemplazar el ibuprofeno?

Hay ciertos medicamentos que, indicados por un especialista, pueden reemplazar al ibuprofeno en el embarazo.

  • El paracetamol, en dosis recomendadas, puede administrarse a mujeres en gestación. Se considera el medicamento más seguro para paliar dolores en embarazadas, porque su acción es a nivel local. No obstante, siempre es mejor evitar el consumo de cualquier medicina o hacerlo en casos verdaderamente necesarios.
  • Pastillas para la tos. Si se sufre de dolor o picor en la garganta, estas pastillas pueden ser una alternativa que no ocasiona consecuencias en el feto.
  • Antiácidos. La acidez es una molestia habitual durante el embarazo, por lo que tomar estos medicamentos es normal para su prevención. Deberás consultar previamente con tu médico y asegurarte de que sean derivados del magnesio y el aluminio.

Los remedios naturales son mejores que el consumo de medicamentos sin receta durante el embarazo.

Elegir lo natural

Aunque muchas veces no es habitual recurrir a métodos naturales para calmar dolores, es una excelente opción durante el embarazo.

Infusiones con lima, limón o jengibre son aliadas para disminuir los resfriados, además de la miel, el tomillo y el laurel.

Si se trata de calmar los dolores de espalda, unos masajes con algo de calor en la zona, las bandas de soporte para el vientre o los ejercicios de estiramiento son buenas opciones.

Más consejos

Siempre es mejor evitar cualquier tipo de medicamento durante el embarazo. El ibuprofeno es uno de los que está contraindicado, por los riesgos que supone para la salud del bebé. No obstante, existen medicinas que, recetadas y en su justa medida, pueden tomarse sin mayor riesgo.

Durante la gestación, en el caso de sufrir dolores que requieran tratamiento, lo importante es no automedicarse y recurrir siempre a un especialista. En cualquier caso, hay que leer siempre las indicaciones y no olvidarse nunca de que existen opciones naturales que también aportan seguridad.

Scroll al inicio