12 frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos

Hay frases que utilizamos los padres que pueden hacer mucho daño en el desarrollo y crecimiento de nuestro hijo. Por esta razón, es importante que nos controlemos y evitemos decirlas.

Hay frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos porque pueden resultar muy negativas para su crecimiento, desarrollo y autoestima. El lenguaje que utilizamos con ellos es importante, no debemos olvidar que los pequeños creen en lo que les decimos y, si esto es negativo, ellos lo toman como una realidad.

La palabra tiene el poder de construir o destruir. En este sentido, está en nuestra mano que las frases que utilizamos ayuden a nuestro niño a crecer, a desarrollarse y a tener una buena autoestima. En este artículo, vamos a ver algunas de las frases que deberíamos borrar de nuestro vocabulario y nunca decir a nuestros hijos.

Frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos sobre las comparaciones

Las comparaciones deberían desaparecer de nuestro vocabulario, porque con ellas hacemos sentir a los pequeños inferiores y dañamos su autoestima. Algunas de estas frases, te las contamos a continuación.

1. «Podrías parecerte un poco más a tu hermano»

Con esta frase dañamos la autoestima de nuestro hijo y, además, lo hacemos sentir en inferioridad. Así, pensará que todos son mejores que él, cuando en realidad cada uno es como es, por lo que no debemos comparar nunca.

2. «Cuando yo tenía tu edad era responsable de todas mis cosas»

No debemos compararnos con nuestros hijos cuando teníamos su edad. Nosotros éramos nosotros, ellos son ellos y no tenemos por qué ser iguales. Si tiene dificultades para responsabilizarse, ayúdalo con pequeñas tareas para que poco a poco lo consiga.

3. «¡Eres igual que tu padre!» «¡Eres tan desastre como tu madre!»

Esta frase solemos utilizarla para resaltar alguna conducta negativa de uno de los padres. Sin embargo, debemos tener cuidado con ella, porque el niño puede excusarse y decir que, como su padre o su madre lo hacen, él o ella también puede hacerlo.

En muchas ocasiones, los padres tenemos tendencia a comparar a nuestros hijos con sus hermanos o con otros niños. Pues bien, de ese modo podemos hacer sentir a los pequeños inferiores.

Más frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos

Debemos borrar de nuestro vocabulario todas las frases que arremeten la forma de ser de uno, de forma despectiva. Estas perjudican la formación de la identidad de nuestro hijo, así que a eliminarlas de nuestro lenguaje.

4. «No sabes hacer nada, no te sale nada bien»

Esta es una de las frases que más daño pueden ocasionar en los niños, y que jamás deberíamos decir. Los menores, como todos, harán unas cosas bien y otras no tan bien, así que no debemos generalizar. En lugar de eso, es mejor corregir lo que no hacen bien y guiarles para que consigan aquello en lo que tienen una mayor dificultad.

5. «Creía que eras más inteligente»

Nunca debemos minusvalorar su capacidad intelectual, bajo ningún concepto. Lo que debemos hacer es apoyar y valorar sus decisiones, aunque no nos parezcan bien o quizás nosotros no las tomaríamos.

6. «Pareces tonto. Eres muy pesado»

Nunca debemos insultar o faltar el respeto a nadie, pero mucho menos a nuestros hijos. Los insultos son agresiones verbales que dañan a las personas. En el caso de los niños mucho más, ya que están en pleno desarrollo.

7. «No te soporto»

Puede que alguna vez, ante ciertas conductas de nuestros hijos, hayamos pronunciado esta frase, pero tenemos que armarnos de paciencia. Muchas veces, esas reacciones son derivadas de algún problema que tengamos nosotros más que algo que tenga el niño. Sería bueno reflexionar y ver por qué nos ponemos así.

Frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos porque no dan valor a sus emociones

Si utilizamos ciertas frases, podemos perjudicar la buena construcción de la identidad emocional y el desarrollo de nuestro hijo.

8. «No llores, te pones fea» «No llores, los hombres no lloran»

¿Por qué no pueden llorar los niños o las niñas? Llorar es la expresión de una emoción (tristeza, rabia, sorpresa), al igual que la risa (alegría). Por lo tanto, nunca debemos decir esta frase. Si nuestro niño llora es porque así lo necesita. Entonces, debemos acompañarlo en esa emoción.

Algunas frases que tenemos que eliminar de nuestro vocabulario son aquellas que dañan de forma directa las emociones de nuestros hijos.

9. «Encima de todo, ¿te enfadas?»

Pues claro, todos tenemos derecho a enfadarnos, los niños también. No hay necesidad de que la razón de su enfado coincida con la nuestra.

10. «Callado estás más guapo»

Nunca debemos decir a nuestros hijos que se callen porque, cuando quieran contarnos algo, pensarán que no queremos escucharlos. Tenemos que dejarles que hablen lo que quieran y nosotros hacerles preguntas para que nos cuenten cosas, en lugar de esperar que lo hagan ellos de forma espontánea.

11. «Si te aburres te das con una piedra en la espinilla»

El aburrimiento también es una emoción y, por tanto, es tan necesaria como las demás. Cuando un niño se aburre, saca su creatividad e imaginación para buscar algo con lo que entretenerse. Por esta razón, el aburrimiento es positivo.

12. «Así de enfadado no vienes conmigo»

Esta es otra frase que no deberíamos decir nunca. Cuando un niño se enfada, lo que más necesita es nuestro apoyo, no nuestro rechazo. Con esta frase, le negamos nuestra compañía en esos momentos.

Sobre las frases que no deberíamos decir nunca a nuestros hijos

Seguro que, tras leer este artículo sobre las frases que no deberíamos decir nunca, te has dado cuenta de que algunas de ellas las repetimos en la educación familiar. Así, no nos damos cuenta de que hacemos daño a nuestros hijos y, además, no los ayudamos en su crecimiento y madurez.

Ahora que ya sabes algunas de las frases que no deberíamos decir nunca, evitémoslas a toda costa en la educación de nuestros hijos. Son la salud del menor y su desarrollo las que están en juego.

“La educación no cambia el mundo, cambia a las personas que van a cambiar el mundo”.

– Paulo Freire –

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

Castañeda, L. (1995). Frases Que Cambian Vidas. Panorama Editorial.
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