Fibromialgia y embarazo

Son muchas las preocupaciones de una mujer embarazada respecto a su salud durante la gestación. La fibromialgia es una patología que implica un reto durante el embarazo. Una buena planificación y cuidados pueden facilitar su tratamiento durante este periodo.
Fibromialgia y embarazo
Ana Couñago

Revisado y aprobado por la psicóloga Ana Couñago.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 21 abril, 2020

La combinación de fibromialgia y embarazo hace dudar a la futura madre acerca de sus capacidades para enfrentar junto a este padecimiento todo lo que el período gravidez implica.

Por lo general, las mujeres sienten una infinita alegría cuando se enteran de que están esperando un bebé, pero las complicaciones en la salud se tornan difíciles en algunas etapas del embarazo.

Los síntomas adheridos a la gravidez, como el insomnio, la repulsión por algunos olores y alimentos, la fatiga y los vómitos matinales, pueden provocar un poco de irritabilidad en la futura madre.

A estos se le pueden añadir los implícitos por la fibromialgia, convirtiendo así los nueve meses de gestación en un verdadero reto.

¿Qué es la fibromialgia?

Este padecimiento no es tan conocido a pesar de que se le adjudican entre 4 y 6 millones de afectados cada año solo en Norteamérica.

Este síndrome es el culpable de provocar un dolor crónico por todo el cuerpo. Además de ello, otros síntomas se unen a sus características, procurando para el paciente cambios en su estilo de vida.

“Las mujeres encabezan las cifras de padecimiento de esta enfermedad con un 80%”

El síndrome de fibromialgia usualmente tiene sus inicios en la primera etapa de la adultez, y sus síntomas pueden disminuir o aumentar en un determinado período de tiempo.

Síntomas de la fibromialgia

La fibromialgia trae consigo mucho dolor y debilidad. Ataca a los músculos, causa movimientos espasmódicos involuntarios y produce de dolor y sensación de quemazón.

En los hombros, la cintura, el área del cuello y brazos son los que se llevan la peor parte. En estas zonas se sienten dolores intensos. Además, en los pies y manos se experimenta sensación de hormigueo.

Sumado a todo lo anterior, se presentan terribles jaquecas, insomnio y fatiga intensa. También es probable que la depresión y la ansiedad hagan su parte con este síndrome.

Por si fuera poco, actualmente no se tiene la cura para la fibromialgia. Solo existen tratamientos paliativos contra el dolor y la ansiedad.

Los síntomas del tercer trimestre de embarazo pueden causar dolores en las futuras madres.

Fibromialgia y embarazo

Cuando la mujer presenta la combinación fibromialgia y embarazo, aumenta la preocupación de un posible incremento en la intensidad de los síntomas.

No obstante, no hay investigaciones que afirmen que durante la gestación los síntomas sufran cambios. Así, puede que para algunas futuras madres se incrementen y para otras disminuyan con notoriedad.

Lo cierto es que durante el embarazo, gracias a la presencia de la placenta, se produce la liberación de relaxina, hormona que contribuye a la relajación de los ligamentos del cuerpo. Además de esta, las hormonas del crecimiento hacen su aparición.

Este tipo de hormonas suelen ser escasas en personas con fibromialgia, por lo que durante la gravidez, estas ayudan a restaurar los daños en tejidos y músculos. A lo antes dicho se le pueden atribuir las posibles mejoras del síndrome durante el embarazo.

Consejos para afrontar la fibromialgia durante el embarazo

No será tarea fácil, pero aquí te ofrecemos algunos consejos para afrontar la fibromialgia durante la gravidez.

Visitar un terapeuta ocupacional

Este tipo de profesionales son los indicados para aportar soluciones acertadas en estos casos.

Sus orientaciones acerca del uso adecuado de la fuerza a la hora de levantar al bebé te ayudarán a evitar forzar más de lo debido los músculos.

Seleccionar con meticulosidad los implementos del bebé

Sustituye los broches por velcro y elije las mejores opciones en el mobiliario (cunas ajustables a diferentes alturas o carritos de poco peso, entre otros) que te faciliten el manejo de las situaciones.

Ir un paso por delante

Prepárate con antelación a la posibilidad de que los síntomas de la fibromialgia empeoren.

Planifica la ayuda adicional con el cuidado del bebé recurriendo al soporte familiar, así mismo, solicita apoyo en las labores cotidianas de la casa.

La combinación fibromialgia y embarazo suele acarrear miedos.

Mantenerse informada

Infórmate sobre esta patología y comparte y conoce las experiencias de otras madres que hayan vivido también la fibromialgia en el embarazo.

Pregunta, investiga y cuenta tu experiencia. Quizás tú también puedas ayudar a otras.

Elegir un buen médico obstetra

Este profesional de la medicina te acompañará durante todo tu embarazo, por lo que será tu gran apoyo. Además, es importante que el obstetra esté disponible para trabajar junto con el reumatólogo que lleva su caso.

Practicar ejercicio

Hacer ejercicio ayuda a disminuir el estrés y aumenta la calidad de vida. En caso de fibromialgia y embarazo, el ejercicio te ayudará a fortalecer los músculos, aumentará tu flexibilidad y mejorará tu estado de ánimo.

Además, al practicar ejercicio se elevan los niveles de serotonina, lo que resulta de gran ayuda para una mujer en gestación, sobre todo si presentan fibromialgia.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.