La estimulación sensorial para bebés nunca está de más. De hecho, resulta muy favorecedora para su desarrollo y nos permite interactuar de una forma graciosa y amigable con ellos. Esto refuerza el vínculo paternal.
Recordemos que, tanto el cerebro de los bebés como el nuestro, trabaja con la información que le aportan los sentidos más los sistemas vestibular y propioceptivo. De esta manera los niños aprenden a conocer y desenvolverse en el mundo.
Estimulación sensorial para bebés
Son muchos los beneficios que proporciona el desarrollo de capacidades y habilidades, como indeseables los efectos de no participar en un plan amoroso y sistemático de cuidado y estímulo.
Como apunta la investigadora Yacqueline Flores: «una persona que está bien desarrollada fisica, mental, social y emocionalmente producto de la estimulación temprana, tendrá mejores habilidades para enfrentar los desafíos y retos de la vida».
Sentido del tacto
Para estimular el sentido del tacto en tu bebé debes escoger algunas de estas actividades, según su edad. Seguramente ya habrás probado algunas y tendrás otras en mente:
1. Con el cepillo suave que usas para peinarlo, hazle cosquillas al pasarlo por su piel.
2. Ofrécele objetos de distintas texturas. Puedes comprar bolas de anime del tamaño de una bola de béisbol y forrarlas con distintas superficies: algodón, tela, papel burbuja, papel de aluminio, papel celofán. Debes cuidar mucho que los materiales que pegues no se desprendan y pueda meterlos en su boca.
3. Llena algunos baldes con granos de distintos tamaños, una con arroz, otra con garbanzos y otra con canicas por ejemplo. Esconde dentro algunos juguetes para que tenga que meter sus manos y explorar dentro. Vigila que no se lleve nada a la boca.
4. Déjalo explorar, jugar y untarse con la comida. A los bebés les encanta untarse papilla por la cara y los brazos. Es importante que lo dejes intentar comer por sí mismo. Para tu tranquilidad, puedes darle comida de otro plato y así sabrás que se alimentó bien.
5. Déjalo jugar con sustancias viscosas como la gelatina o algunas plastilinas para moldear. Por otra parte, llévalo a la playa y déjalo experimentar con la arena.
Sentido del gusto
Para una manera deliciosa de estimular el sentido del gusto del bebé te recomendamos poner en la punta de su lengua distintos guisos y comidas que estés preparando.
Cuida que no esté caliente o que ofrezca de antemano una sensación desagradable, por picante o salado. Jugar a probar es sabroso y divertido, afina el criterio y hace a todos partícipes, en especial a los niños, de la sazón familiar.
6. Apenas tu pediatra lo permita, introduce en su dieta nuevos alimentos que lo inviten a descubrir nuevas texturas, nuevos sabores y nuevos olores. Al principio se mostrará extrañado. Esto es parte de lo que significa descubrir y despertar los sentidos.
7. Ofrécele también alimentos con distintas temperaturas.
Sentido del olfato
Este sentido, uno de los más sensibles y mejor desarrollados, forma uno con el gusto, pues estimula el apetito y las secreciones digestivas. El olor agradable de un alimento es en muchos casos antesala de su buen sabor.
Debes saber que un bebé reconoce a las personas por los olores y desde la gestación desarrolla el sentido del olfato, a través de la unión hormonal con la madre. Identificar el olor es la forma en que los niños se protegen y reconocen el entorno.
8. Dale a oler frutas y enséñale a disfrutar del olor de ciertos alimentos.
9. Cuando tenga más edad, pueden jugar a vendarse los ojos y adivinar qué huelen.
10. Enséñalo a ser curioso con el olfato. Por ejemplo, permítele oler sus cremas y tu champú de vez en cuando.
Sentido del oído
El niño responde a los sonidos desde la semana 16 de gestación de modo que la estimulación prenatal en torno a este sentido debe iniciar al quinto mes. Por otro lado, y siguiendo la línea del gusto y los olores, una investigación realizada en la Universidad de La Rioja revela que las señales auditivas pueden ser capaces de afectar la percepción y evaluación de los alimentos.
Todo esto aporta algo que no podemos olvidar: los sentidos están integrados y la estimulación es un todo complejo que toca el cuerpo entero y las emociones del pequeño.
11. Háblale a tu bebé. No hay nada que los deleite más que la voz de mamá. Juega y hazle voces distintas con gestos graciosos.
12. ¡Cántale! Atrévete, los niños siempre piensan que su mamá canta bien.
13. Permítele jugar con papeles ruidosos que suenen mucho al estrujarlos, como el papel celofán, o al romper o rasgar trozos de papel periódico.
14. Ofrécele juguetes con sonidos o instrumentos musicales de juguete.
15. Háblale con palabras sencillas y frases cortas. No es necesario que sobregesticules ni que pronuncies de manera exageradamente lenta las palabras.
16. Déjalo jugar con su voz, verás cómo durante una etapa grita y sonríe, esto les encanta.
Sentido de la vista
Un niño ve muy bien desde que nace, distingue objetos y puede detenerse fijo en uno de 4 a 10 segundos. Cuando lo hace, sus pupilas se dilatan y sus ojos se hacen más grandes. Cuando pierde el interés, cierra los ojos y mira de manera indefinida.
La estimulación sensorial acude en este momento para que los bebés observen de manera detenida objetos adecuados, con el fin de prolongar su periodo de fijación, fomentando desde sus primeros meses la capacidad de atención y concentración.
17. Pon a su disposición variedad de móviles. También puedes agregarle y variarle colgantes a los móviles en casa.
18. Llévalo de paseo por el parque o al jardín de algún familiar. Observen las plantas, los pájaros y las nubes en el cielo. Esta es una estimulación sensorial muy positiva.
19. Ofrécele juguetes de colores variados, brillantes, opacos, fosforescentes, pasteles, monocromáticos, con luces, etcétera.
20. Enséñale a seguir juguetes con sus ojos. Muévelos con suavidad delante de él en forma horizontal, de un lado a otro, también de arriba hacia abajo.
21. Muéstrale cuentos con imágenes grandes y coloridas.
Conoce: ¿Qué es la estimulación basal?
Más allá de los cinco sentidos
Las sensaciones son corrientes de estímulos eléctricos que, al igual que los químicos, se traducen en impulsos nerviosos que, de neurona en neurona crean una cadena que llega al cerebro.
Se trata de fragmentos de información que deben integrarse en percepciones organizadas y significativas. Para lograrlo, el cuerpo recurre entre otros mecanismos, a los sistema vestibular y propioceptivo.
Veamos qué hacer para estimular la organización de las percepciones.
Sistema vestibular
Este sistema se encuentra en el oído interno y se encarga del equilibro, la postura, de coordinar los movimientos de la cabeza, del cuerpo y de la orientación de la mirada. Sin duda es la base para la orientación del cuerpo en el espacio circundante.
22. Ponlo a ratos boca arriba y boca abajo.
23. Colócalo sobre una pelota grande, de playa o de hacer ejercicios y balancéalo con suavidad.
24. Mécelo en tus brazos, en la mecedora o en una hamaca para bebés.
25. Baila con él. Sigue el ritmo de la música.
Sistema propioceptivo
Este sistema refiere a la capacidad del cerebro para conocer en cada momento la posición exacta de las partes del cuerpo. Cuando reaccionamos para evitar caídas, hacemos cualquier movimiento o adoptamos una posición, activamos grupos musculares coordinados por el sistema propioceptivo.
Con las siguientes actividades se logra la estimulación sensorial de los bebés en esta área sensoriomotora.
26. Los masajes infantiles son muy buenos para la estimulación sensorial temprana. En ese sentido, apriétale con delicadeza los brazos y las piernas para que sea consciente que allí los tiene.
27. Enrróllalo con una manta como un burrito (de los comestibles) por un par de minutos y luego suéltalo.
La estimulación sensorial para bebés, un momento ideal para compartir
Las experiencias de los primeros años son fundamentales en el proceso madurativo del cerebro de los niños. De ello depende el crecimiento y la evolución del sistema nervioso central.
Sin duda, tu hijo crecerá sano y fuerte, superará desafíos y tendrá buena actitud y resolución para explorar el mundo. Asimismo, nunca olvides que la estimulación más importante y natural la proporciona mamá.
Aprovecha pues, tu rutina diaria para incorporar estas pequeñas actividades de estimulación sensorial. Pero eso sí, no abuses de estas, ya que pueden promover la hiperactividad.
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