Los tres estilos de crianza de Ann Roe

La vida de nuestros niños es la base de sus decisiones adultas. ¿Quieres saber por qué es tan importante el estilo de crianza que adoptamos?

El entorno familiar, especialmente la relación con los padres, es uno de los grandes determinantes de las elecciones futuras de los niños. En esto se basó la teoría de los tres estilos de crianza de Ann Roe.

Anne Roe (1904-1991) fue una psicóloga que se dedicó a estudiar la vida de artistas y científicos para teorizar sobre la relación entre la crianza y las orientaciones ocupacionales. Este trabajo dio lugar a su libro Making a Scientist (1953), en donde Roe expuso todos los resultados de su investigación.

Si quieres conocer su teoría, ¡no dejes de leer este artículo!

Las relaciones entre padres e hijos, como base de las decisiones adultas

Según la teoría de Anne Roe, existen tres estilos de crianza bien definidos y que dan lugar a perfiles vocacionales distintos.

Para comprender mejor de qué se trata, es necesario conocer los conceptos derivados de la pirámide de Maslow, que es un modelo estandarizado sobre las necesidades de las personas.

En la base de esta estructura, se encuentran las necesidades primarias o aquellas más importantes para cada individuo. A continuación, te las enumeramos desde la más básica hasta la más compleja:

• Fisiológicas o de orden biológico: son las esenciales para vivir, como alimentarse, hidratarse o mantener el calor corporal.
• Protección y seguridad: tener empleo, una casa y no estar expuesto a la violencia.
• Afiliación: participar en actividades sociales, deportivas o comunitarias.
• Reconocimiento o estima: conocer cómo nos ve la sociedad y cómo nos percibimos nosotros mismos.
• Autorrealización: son particulares de cada individuo y dependen de sus elecciones. Se relacionan con el mundo espiritual, la moral y los proyectos de vida.

La satisfacción de las necesidades y los tres estilos de crianza de Ann Roe

Teniendo en cuenta lo expuesto, Roe clasificó las relaciones entre padres e hijos de la manera que expondremos a continuación.

1. Concentración emocional

Esta denominación es la que se usa para definir a los padres sobreprotectores, los cuales siempre satisfacen las necesidades de sus hijos y no les permiten explorar ni tomar sus propias decisiones.

En general, son progenitores cariñosos e indulgentes, que generan una relación de pertenencia y un nivel de dependencia que impide la autorrealización de los niños. El reconocimiento y la estima dentro del hogar son casi inexistentes.

Según Roe, en esta calificación también entran los padres demasiado exigentes o perfeccionistas, cuya principal satisfacción es que los niños les obedezcan y tengan éxito en base a sus elecciones (las de los padres).

2. Alejamiento del niño

En algunos estilos de crianza se atienden bien las necesidades más básicas de los niños (seguridad, alimentación, vestido), pero se descuidan aquellas de tipo emocional de manera intencional.

Suelen ser padres fríos u hostiles, que no asumen su rol parental, rechazan a sus propios niños e incluso, pueden construir entornos familiares de violencia física y psicológica.

3. Aceptación del niño

En este tipo de crianza se da el equilibrio entre los dos estilos anteriores. Son los padres que tratan bien a sus hijos, sin descuidos ni excesos en la satisfacción de todas sus necesidades.

Dentro de este clima familiar armónico los niños se sienten seguros y valorados. Gracias a esto, se transita toda la pirámide hasta el nivel de autorrealización, lo que favorece el desarrollo de una personalidad propia, independiente y autónoma.

Consideraciones actuales sobre la teoría de Anne Roe

De acuerdo a la teoría de los tres estilos de crianza de Ann Roe, cada uno de ellos determina una tendencia a la hora de elegir determinadas carreras. En otras palabras, el grado de satisfacción o insatisfacción de las necesidades durante la infancia serían los principales motivadores para elegir la profesión.

Sin embargo, cabe destacar que esta teoría fue elaborada en la década del 50 y luego, puesta en tela de juicio por otros psicólogos. El motivo fue la inconsistencia a la hora de obtener las conclusiones, ya que no se tomaron en cuenta otros factores determinantes para satisfacer las necesidades de los hijos, como el nivel socioeconómico familiar.

Tu niño, tu estilo de crianza

Si bien resulta interesante conocer este tipo de teorías, lo más importante es que cada familia desarrolle un estilo de crianza cuyo objetivo sea el bienestar integral del niño.

Esto incluye, además de la satisfacción de sus necesidades, la habilidad de alcanzar un punto de equilibrio saludable para toda la familia.

El amor, la confianza, la libertad y el apoyo son condiciones ineludibles y debemos fomentar su crecimiento personal para que puedan concretar todos sus sueños.