¿Os imagináis que los alumnos pudiesen conocer y comunicar cómo y de qué forma les es más fácil aprender rápido y mejor, y lo útil que podría ser esto para los educadores? Pues un instrumento como los estilos de aprendizaje VARK (visual, read/write, aural, kinesthetic) tiene precisamente este objetivo, determinar la manera preferida de cada estudiante para captar, recordar, procesar y aprender un contenido o información.
¿En qué consisten los estilos de aprendizaje VARK?
Neil Fleming y Collen Mills, profesores de la Universidad de Lincoln en Nueva Zelanda desarrollaron una propuesta para determinar las predilecciones de modalidad sensorial de las personas a la hora de aprender.
Los creadores partían de la base de que, cuando una persona recibe información, lo hace a través de los sentidos, de manera que el cerebro puede seleccionar, procesar, retener, ignorar o eliminar dicha información.
Así, la denominación VARK se compone de la primera letra de cada una de las cuatro modalidades sensoriales para captar la información. En concreto, la vista (visual), la lectura y escritura (read/write), lo auditivo (aural) y el uso del cuerpo en general (kinesthetic).
- Visual (visual): preferencia por las formas gráficas y simbólicas como modo de representar los contenidos.
- Auditivo (aural): la escucha es el canal mejor considerado para captar y aprender una información.
- Lectura y escritura (read/write): se considera prioritaria la información impresa, en forma de palabras y frases.
- Kinestésico (kinesthetic): lo perceptual queda condicionado al uso de la experiencia y la práctica, real o simulada, como forma de comprensión de los contenidos.
Preferencias de aprendizaje de los estudiantes según su estilo
Entonces, el instrumento VARK permite clasificar a los alumnos según su estilo de aprendizaje, según cómo captan y procesan la información, y analizar cómo aprenden más rápido y en qué condiciones. Y lo hace teniendo en cuenta cuál es el canal perceptual más utilizado por cada estudiante para apropiarse de la información.
Así, el modelo establece, según cada modalidad sensorial, las distintas preferencias de los estudiantes:
- Visuales: alumnos que comprenden mejor con cuadros, diagramas, esquemas, gráficos, dibujos, proyecciones, mapas conceptuales, vídeos e imágenes.
- Lectores y escritores: estudiantes que priorizan para su estudio libros, textos, resúmenes escritos, ensayos, notas y bibliografía.
- Auditivos: alumnos que se decantan por la información en forma de audios, debates, discusiones, conversaciones, seminarios y resúmenes en voz alta.
- Kinestésicos: estudiantes que comprenden mejor los conceptos teóricos a partir de la praxis, como la actividad física y el deporte, los juegos de rol, las dramatizaciones y las teatralizaciones. O los laboratorios y las demostraciones.
Ventajas de determinar los estilos de aprendizaje según la modalidad VARK
VARK, al determinar los estilos de aprendizaje de los alumnos, permite mejorar los procesos formativos en todos los niveles de educación. Principalmente, porque ayuda a personalizar las propuestas de enseñanza, y considera las preferencias en las modalidades sensoriales como necesidades concretas de aprendizaje.
Con lo cual, el instrumento VARK tiene ventajas y beneficios tanto para quien que aprende, como para quien enseña:
- Para el alumno, porque le permite identificar su propio estilo de aprendizaje, en función de sus preferencias y facilidades sensoriales para interiorizar los contenidos.
- Para el docente, porque puede adecuar las propuestas de enseñanza al estilo de aprendizaje de cada alumno y conseguir, así, optimizar la enseñanza y lograr aprendizajes más significativos.
Acerca de la aplicación del instrumento VARK, para conocer cómo aprenden los alumnos
Es necesario remarcar que no todos los alumnos aprenden utilizando un único sistema de representación sensorial, sino que, en la mayoría de los casos, los estudiantes hacen uso de una combinación de modalidades sensoriales.
Por lo tanto, es importante que los profesores sean capaces de combinar distintas estrategias metodológicas coherentes con todos los estilos de aprendizaje. Es decir, que intenten satisfacer la diversidad de formas de aprender de sus alumnos, en cuanto al canal perceptual de acceso a los contenidos académicos.
Y, así, los educadores podrían mejorar el rendimiento académico de sus estudiantes, al aumentar la motivación, la participación y el compromiso de sus alumnos con sus propios procesos y estilos de aprendizaje.
Bibliografía
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