¿Qué son esas manchitas rojas en la piel del bebé?

A veces, no sabemos a qué se deben esas manchitas rojas en la piel del pequeño de la casa. Te contamos sus posibles causas y te damos algunos consejos.
¿Qué son esas manchitas rojas en la piel del bebé?
Marcela Alejandra Caffulli

Revisado y aprobado por la pediatra Marcela Alejandra Caffulli.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 19 abril, 2023

Los padres pueden llegar a preocuparse mucho cuando observan manchitas rojas en la piel del bebé. Por fortuna, lo cierto es que, en la mayoría de las ocasiones, estas representan una afección benigna y transitoria que no suele requerir tratamiento.

Sin embargo, ante la posibilidad de que se trate de un problema mayor, siempre es importante contar con una evaluación médica. Esto cobra mayor importancia cuando las lesiones se acompañan de otros síntomas como fiebre, irritabilidad, llanto frecuente u otros.

¿Qué son estas manchitas rojas en la piel del bebé? Todo lo que debes saber sobre los exantemas

Las erupciones cutáneas que aparecen en forma de manchitas rojas son llamadas por los médicos como exantemas. El tamaño y la forma de estas es variado, por lo general causan picor y aparecen en zonas distintas del cuerpo. Pueden extenderse por toda la piel o aparecer en lugares específicos.

Sus causas son muy variadas y, como verás a continuación, hay muchas ocasionadas por agentes infecciosos, en especial virus. La lactancia materna permite que las madres transmitan a los bebés anticuerpos capaces de protegerlos contra muchas de estas condiciones, mientras que las vacunas representan una gran ayuda para potenciar su sistema inmunitario y evitar complicaciones en casos específicos.

Principales causas de las manchitas rojas en la piel

Las condiciones mencionadas a continuación tienen una importante incidencia en los bebés. Estas tienen diferentes causas, en especial inflamatorias e infecciosas. Si bien suelen tener un curso benigno, es importante acudir al pediatra para evitar complicaciones.

1. Dermatitis del pañal

Según explican los expertos de la Clínica Mayo, la dermatitis del pañal es una condición de la piel muy común en los bebés. Esta ocurre por dejar de forma prolongada los pañales que están sucios o mojados, en especial cuando existe mucha sensibilidad. También aparece por excesiva fricción o roces, el uso de antibióticos o incluso luego de aplicar productos nuevos en la zona.

Las manchitas que aparecen suelen estar limitadas a los glúteos y los genitales, produciendo picazón, irritabilidad, irritación y piel muy sensible. Para resolver la situación basta con mantener la piel lo más limpia posible con buenas medidas higiénicas, aunque las cremas con esteroides podrían mejorar los síntomas luego de varios días o pocas semanas de tratamiento.

En ocasiones, esta condición puede complicarse con infecciones secundarias, en especial por bacterias u hongos. Por eso es tan importante la evaluación del pediatra, ya que este permitirá establecer un diagnóstico precoz y tratamiento oportuno.



2. Acné neonatal

Las manchitas rojas en la piel del bebé incluyen el acné neonatal
Por fortuna, las lesiones típicas del acné neonatal suelen ser leves y tienden a resolverse sin mayores tratamientos.

En el bebé pueden aparecer lesiones muy similares a las típicas del acné de la adolescencia y adultez temprana. Es el llamado acné neonatal, un problema transitorio que suele aparecer entre la segunda y cuarta semana de vida, tal y como indica una publicación del Boletín Médico del Hospital Infantil de México.

Las lesiones más representativas son comedones (protuberancias pequeñas asociadas a puntos negros o blancos), pápulas (lesiones elevadas, cerradas y con contenido sólido) y pústulas (similares a las pápulas, pero con pus en su interior que puede liberarse a la superficie). En todo caso son lesiones pequeñas y poco extensas, por lo que solo en muy escasas ocasiones evolucionan a nódulos o quistes inflamatorios.

El acné neonatal aparece como consecuencia de un elevado nivel de hormonas andrógenas, por lo que es más común en los varones. Esto provoca el aumento de tamaño de las glándulas sebáceas y la producción de sebo, por lo que al obstruirse los conductos excretores se forman las lesiones típicas. Al ser un problema por lo general leve, el tratamiento es con una adecuada higiene de la piel, reservando los medicamentos para casos graves.

3. Impétigo

El impétigo es una de las enfermedades infectocontagiosas de la piel más importantes a nivel mundial. Un artículo publicado en el Acta Pediátrica Mexicana explica que existen dos tipos:

  • Impétigo no ampolloso: es causado por Streptococcus pyogenes y se caracteriza por vesículas (pequeñas lesiones elevadas con contenido líquido en su interior) que, al romperse, forman costras sobre la piel.
  • Impétigo ampolloso: el agente causal es Staphylococcus aureus y, como su nombre indica, tiende a formar ampollas más o menos extensas. Esta es la forma que predomina en lactantes menores de 1 año.

A pesar de que son lesiones de aspecto diferente, ambas pueden acompañarse de una base enrojecida que son las manchitas rojas en la piel del bebé.

El tratamiento depende de la gravedad de la afección, pero por lo general consiste en una adecuada higiene de la zona con agua y jabón, además de la aplicación de antibióticos tópicos o inclusive sistémicos, si la extensión de la enfermedad así lo requiere. Por lo tanto, es imprescindible la visita al pediatra para saber cómo proceder en estos casos.

4. Dermatitis seborreica

Los bebés pueden presentar cuadros de dermatitis seborreica, una condición inflamatoria de la piel, por lo general limitada al cuero cabelludo, aunque no de forma exclusiva. Los expertos indican que los casos más leves no suelen requerir tratamiento en los bebés, además de tratarse de una condición muy probablemente transitoria.

Las áreas de la piel afectada pueden formar una especie de parche con superficie escamosa y grasosa que tiende a desprenderse y que se conoce como costra láctea. Esta suele aparecer en el cuero cabelludo y asociarse o no a irritación de la piel, es decir, a las manchitas rojas. Con el tiempo, puede extenderse a otras áreas como la cara, el cuello y los pliegues cutáneos.

5. Miliaria

Como consecuencia del calor excesivo y el sudor, pueden aparecer también algunas manchitas rojas en la piel del bebé que producen comezón y ampollas en las zonas del cuello, el abdomen, las axilas y las piernas. En este sentido, la miliaria suele desaparecer de forma natural, pero es siempre recomendable mantener la dermis seca y limpia. Así lo explican los expertos de la Clínica Mayo, quienes también indican que esta condición puede aparecer en adultos.

6. Eritema tóxico neonatal

Una investigación publicada en Acta Médica Grupo Angeles indica que esta condición forma parte de las dermatosis neonatales benignas, teniendo una frecuencia muy amplia (3,7 al 72 % de los recién nacidos). Se caracteriza por pápulas y pústulas de distribución irregular y por tener un curso autolimitado, es decir, que cura de forma espontánea.



Otras causas de manchitas rojas en la piel del bebé

Las manchitas rojas en la piel del bebé tienen varias causas
Si las lesiones de la piel se acompañan de otros síntomas sistémicos, es probable que la gravedad de la afección sea más importante.

Existen otras condiciones que pueden ocasionar manchitas rojas en la piel del bebé, aunque son más típicas de la edad preescolar. De forma excepcional pueden aparecer en lactantes, por lo que si se detecta alguna de ellas es imprescindible acudir al pediatra lo antes posible. Son las siguientes:

  1. Varicela. Se trata de una enfermedad causada por el virus de la varicela-zóster. Un estudio publicado en BMJ Paediatrics Open explica que puede haber una transmisión perinatal en los recién nacidos que se asocia a enfermedad grave, mientras que la infección posnatal en el primer año de vida suele ser leve (por los anticuerpos maternos dados por la lactancia). En este último caso, los síntomas incluyen fiebre y lesiones que ocasionan picazón, muchas con base enrojecida (vesículas, pápulas, pústulas y costras).
  2. Eccema del bebé (dermatitis atópica). Los expertos de Cleveland Clinic explican que las lesiones típicas aparecen en la región facial, apareciendo una superficie seca, enrojecida y con pequeños bultos. Si bien desaparece de forma espontánea, puede convertirse en una condición crónica que puede recidivar inclusive hasta la edad adulta.
  3. Roséola. Se trata de una infección viral que aparece en niños entre los 6 meses y los 3 años de edad, según los expertos del Manual MSD. Provoca pequeñas manchas rojas en el tronco, el cuello y los brazos, asociadas a comezón. Esta enfermedad dura unos 7 días y se contagia mediante la saliva. Por eso, es importante acudir al especialista.
  4. Sarampión. A pesar de que los bebés que reciben lactancia materna suelen tener anticuerpos que controlarían la enfermedad en caso de infección, hay excepciones a esta regla. Un estudio publicado en la Revista Pediatría Electrónica explica que, luego de las típicas lesiones enrojecidas en la piel, los lactantes pueden presentar complicaciones como neumonía y laringotraqueobronquitis.
  5. Eritema infeccioso (enfermedad de la bofetada o quinta enfermedad). Es una condición causada por el parvovirus B19 que afecta varios órganos y conlleva a la aparición de manchas rojas en las mejillas, pero también se puede expandir por espalda, barriga, brazos y piernas. Su aparición en lactantes es excepcional, mientras que otras enfermedades ocasionadas por el mismo virus son más frecuentes.

Esas manchitas rojas en la piel de tu bebé pueden necesitar la revisión de un especialista

Esperamos que estas posibles causas te hayan ayudado a entender mejor los distintos condicionantes de estas manchas rojas que a veces suelen salir en la piel de los bebés. Como ya has podido comprobar, hay diversos motivos según los detalles de cada caso.

No obstante, ante cualquier tipo de duda, es importante acudir al pediatra o dermatólogo para evaluar la situación. Él o ella podrá recetar el mejor tratamiento si las manchitas continúan saliendo y también proporcionará los mejores consejos para combatirlas.


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