Consejos para disminuir la fiebre en los niños

La fiebre puede llegar a ser uno de los problemas de salud más frecuentes en la infancia. Descubre por qué sucede y cómo afrontar esta situación de la mejor forma.
Consejos para disminuir la fiebre en los niños
Diego Pereira

Revisado y aprobado por el médico Diego Pereira.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 02 agosto, 2023

¿Necesitas algunos consejos para disminuir la fiebre en los niños? Antes de nada, debes saber que la fiebre en los niños aparece de manera muy frecuente; ya que a esas edades el cuerpo tiene que combatir con multitud de agentes para crear anticuerpos que los adultos ya tenemos.

La fiebre supone un aumento de temperatura corporal como reacción del organismo ante alguna enfermedad o infección. Podemos saber si alguien tiene fiebre con la ayuda de un termómetro; si este marca alrededor o más de 38,3 ºC la temperatura corporal será más alta de lo normal. En este caso, deberás actuar para tratar de que baje lo antes posible.

¿Cuándo hay que preocuparse si sube la fiebre en niños?

Previamente, hay que tener en cuenta que la fiebre es la reacción del cuerpo ante la enfermedad. De esta forma, lo recomendable es aliviar el malestar que puede producir al pequeño, pero es una reacción normal ante la presencia de virus o bacterias.

Diferencias entre fiebre y febrícula según la edad

Para empezar, es adecuado diferenciar entre fiebre y febrícula teniendo para ello en cuenta que la temperatura corporal normal es de unos 36ºC a  37ºC. En función de esta y la edad que tenga el pequeño, se puede distinguir entre:

  • Febrícula: temperatura corporal entre 37 y 38,2 ºC.
  • Fiebre: temperatura corporal igual o superior a 38,3 ºC.
  • Hipotermia: temperatura corporal inferior a 35 ºC.

En la mayoría de los casos la fiebre es el signo de que el organismo está luchando a través de su sistema inmunitario contra un microorganismo, habitualmente una infección viral que no precisa de tratamiento específico. Eso sí, deberás acudir al médico si el niño, además de la fiebre, presenta alguno de los siguientes síntomas:

  1. Tos o flemas.
  2. Tiene vómitos y diarrea o por el contrario no orina ni hace de vientre.
  3. Tiene la piel demasiado pálida y está poco activo.
  4. Presenta alguna erupción en la piel.
  5. No tiene ganas de comer.


¿Estás midiendo bien la temperatura?

A pesar de que las manifestaciones físicas de la fiebre pueden ser muy evidentes, vale la pena estar seguros de cuál es la temperatura corporal del niño, según explican los expertos de Healthy Children. Los métodos son diversos y no siempre bien conocidos:

  • Actualmente se están descartando los termómetros de mercurio, ya que pueden romperse y liberar tóxicos capaces de afectar la salud de los niños y adultos. Utiliza un termómetro digital.
  • Hay medidas más exactas dependiendo del lugar escogido. La más exacta es la rectal, y le siguen la frontal, la oral, la auricular (en el oído) y, por último, la axilar.
  • Existen diferentes termómetros para cada lugar de medición. Por ejemplo, para medir la temperatura en la región frontal se usan termómetros que emiten ondas infrarrojas.
  • En los bebés menores de 3 meses es más recomendable usar el termómetro rectal. Para ello debe usarse un poco de lubricante, colocar al bebé boca abajo e introducir el aparato suavemente.

Medicamentos para bajar la fiebre

Como bien aconsejan los expertos de la Asociación Española de Pediatría, para disminuir la fiebre y aliviar el malestar en los niños se utilizan habitualmente el paracetamol y el ibuprofeno, ambos se pueden dar en gotas o en jarabe.

Sin embargo, no se debe recurrir a la automedicación y se debe consultar siempre a un profesional que identifique cuál puede ser la posible causa de esta reacción. Además, hay que tener en cuenta que:

  • Los antitérmicos pueden disminuir la temperatura entre 1 y 1,5 ºC.
  • La mayoría de los medicamentos de este tipo tienden a actuar alrededor de la media hora luego de ser ingeridos, aunque puede ser más rápido con los supositorios.
  • El ibuprofeno se puede utilizar a partir de los tres o cuatro meses de vida.
  • No es recomendable utilizar antitérmicos para prevenir una posible reacción ante las vacunas.
  • El paracetamol se puede administrar cada 4 o 6 horas, y el ibuprofeno cada 6 u 8 horas. No obstante, se debe consultar siempre las dosis adecuadas con el pediatra, ajustándose al peso del niño.
  • No es recomendable mezclar o alternar medicamentos distintos.
  • La ingesta de una dosis elevada produce toxicidad. Según un artículo de investigación, la intoxicación por paracetamol es un evento común en niños y que causa una grave y potencialmente mortal afección hepática.

La Comunidad de Madrid tiene a disposición del público una calculadora online de dosis pediátricas de paracetamol e ibuprofeno. Solo debes asegurarte de introducir correctamente los datos referentes al peso y el medicamento que pretendes utilizar.

¿Cómo disminuir la fiebre en los niños?

Aunque en la mayoría de los casos la fiebre de tu hijo se deberá a una infección viral y mejorará por sí sola, es recomendable saber cómo bajar la fiebre en casa si no presenta otros síntomas de gravedad. A continuación, según opinan los expertos de la Clínica Universidad de Navarra, te proponemos una serie de remedios para lograr que la fiebre en los niños baje lo antes posible.

1. Darle un baño de agua tibia, uno de los mejores consejos para disminuir la fiebre en los niños

Para bajar su temperatura corporal, se puede bañar al niño para que el cuerpo se refresque, pero para ello no es necesario ducharlo con agua fría. Lo que haremos será llenar la bañera con agua a una temperatura templada.

La fiebre en los niños aparece muy frecuentemente.

Lo ideal, según una investigación desarrollada en 2018 por la Universidad María Auxiliadora, es mantener al niño durante un rato en el agua para que esta se vaya enfriando de forma gradual.

Utilizar medidas físicas contra la fiebre en vez de los medicamentos ha sido un tema polémico. Varios estudios han comparado ambos métodos y solo unos pocos han demostrado mayor eficacia de los baños de agua tibia o la aplicación de compresas.

2. Refrescar la frente, la nuca, las piernas y las manos

Se recomienda utilizar un paño o compresa mojado con agua a temperatura ambiente. Debemos pasárselo por la frente, las manos, las piernas y la nuca. Esta es una forma de enfriar al niño sin necesidad de bañarlo en caso de que se encuentre muy cansado y no se quiera mover. Además, resulta una muy buena opción cuando es invierno.

A medida que veas que las compresas se van calentando, es bueno volverlas a mojar y aplicarlas de nuevo. Esto se puede repetir hasta que compruebes con el termómetro que la fiebre ha disminuido.

3. Crear una buena temperatura ambiente

Es importante que la temperatura de la habitación donde se encuentre el niño esté regulada, es decir, que no haya ni demasiado frío ni demasiado calor (unos 21 ºC). También es aconsejable ventilar bien la sala para proporcionar al niño aire fresco.

Si es verano y utilizamos algún aparato de ventilación o aire acondicionado, ten cuidado de que no se exponga directamente a él, es preferible que se sitúe más lejos y le llegue solamente una suave brisa. Esto es especialmente importante en caso de que se sospeche de una infección respiratoria.

4. Quitarle algo de ropa

Para que la fiebre no aumente, hay que tratar de bajar la temperatura del cuerpo. Lo ideal es quitarle una capa de ropa si es invierno o dejarle lo más fresco posible si es verano. 

Otra opción es quitarle los zapatos y dejar sus pies al aire. Si hace demasiado calor fuera, intenta que tenga los pies en contacto con una superficie fría, ya sea el suelo, un paño mojado o directamente el agua, dependiendo de la edad del niño y lo que le sea más cómodo.

En caso de que tenga escalofríos, es posible taparlo con una sábana ligera para que esté lo más cómodo posible sin correr el peligro de subir su temperatura.



5. Evitar la deshidratación, uno de los mejores consejos para disminuir la fiebre en los niños

El niño comenzará a sudar y a perder el apetito desde el primer momento en que presente fiebre, por ello tenemos que intentar mantenerlo siempre hidratado. Si es verano y el niño estará todo el día en la calle, es importante que no dejemos que le dé el sol y permanezca a la sombra.

La fiebre en los niños puede provocar que estén más cansados de lo normal.

Para disminuir la fiebre en los niños se recomienda siempre que beban mucho suero oral, pero como en la mayoría de los casos estas bebidas no parecen agradarles, una buena opción es sustituirlo por agua en abundancia, zumos, gelatinas o algún caldo templado si es invierno.

6. Reposo y descanso

Por último, la mejor cura para la fiebre en los niños es que reposen y descansen. Hay muchos niños que cuando tienen fiebre se muestran cansados y no tienen ganas de jugar. Sin embargo, hay otros que cuando tienen fiebre no son conscientes de su temperatura corporal y por eso juegan y corren como hacen habitualmente.

Es recomendable que esté tranquilo y realice actividades que no le supongan un esfuerzo, por ejemplo ver una película o leer un libro.

Ten en cuenta estos consejos para disminuir la fiebre en los niños y consulta al médico

Si el niño tiene menos de 3 meses de edad debemos de ir al médico lo antes posible y no esperar a que la fiebre le baje en casa. Además, tiene que ser un médico el que determine un diagnóstico en caso de que haya que administrar algún tratamiento. Nunca debes medicar a tu hijo sin que te lo indique un especialista; ya que tomar decisiones por cuenta propia puede poner en peligro la salud de nuestros hijos.

Si finalmente, tras poner en práctica estos consejos, observas que a tu hijo no le baja la fiebre o incluso le ha subido, acude inmediatamente a su pediatra para que te indique cómo actuar. Recuerda que la elevación abrupta de la temperatura en niños entre los 6 meses y 5 años suele asociarse a convulsiones febriles. También debes de buscar ayuda médica cuando la fiebre permanezca durante dos días consecutivos.


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