Dientes en forma de sierra: ¿es normal?

Cuando comienzan a salir, los dientes en la boca pueden tener el borde con forma de sierra. Descubre por qué sucede y qué debes hacer.

Si a tu niño le han comenzado a salir los dientes y notas que presentan el borde con forma de sierra, puede que te alarmes y te inquietes. En este artículo, te contaremos sobre estas protuberancias que tienen los nuevos elementos dentarios apenas aparecen en la boca.

Este borde irregular, que se nota apenas aparecen los dientes frontales, se conoce como mamelones dentales. Se trata de una situación normal que, en general, no provoca complicaciones y desaparece con el tiempo. Sigue leyendo para descubrir por qué los dientes nuevos tienen forma de sierra y cuál es la conducta a seguir frente a esta situación.

¿Qué son los mamelones dentales que dan a los dientes forma de sierra?

La forma de sierra de los dientes se debe a lo que en odontología se conoce como mamelones dentales. Se trata de tres protuberancias que sobresalen en el borde de las piezas frontales de los niños. Estos son más evidentes cuando los elementos definitivos reemplazan a los de leche. De todos modos, también pueden estar presentes cuando brotan las piezas temporarias del bebé.

Los mamelones dentarios son parte de la anatomía de los incisivos superiores e inferiores, es decir, de los ocho dientes frontales de la boca. En francés, mamelón significa ‘pezón’. Esto se refiere a la forma de la protuberancia que sobresale del elemento dentario. Hay tres mamelones en cada diente y, juntos, crean un borde festoneado y ondulado con aspecto de sierra o serrucho.

Esta característica anatómica se observa cuando los incisivos centrales y laterales apenas aparecen en la boca. En general, con el tiempo comienzan a desgastarse y a verse con el borde lineal y liso que tenemos los adultos.

A medida que las piezas frontales se utilizan para realizar las funciones habituales de la boca, es común que los mamelones se desgasten y desaparezcan.

¿Cuál es el origen de los dientes con forma de sierra?

Los dientes con forma de sierra deben su aspecto a la unión de los mamelones dentales que constituyen la anatomía de los incisivos. Estas estructuras surgen durante la formación de las piezas en la etapa de gestación del niño.

La formación de los dientes surge por la unión de varios lóbulos primarios que se fusionan y se calcifican para constituir la corona dental. Esto es lo que le otorga a cada diente su aspecto y forma característica. Los mamelones son el registro de la unión de estas 3 estructuras vestibulares que, junto con un cuarto lóbulo palatino, conforman la corona de los incisivos. Es decir, son un rastro del proceso de formación de la pieza dentaria.

¿Qué sucede con los mamelones dentales?

Los mamelones dentales suelen desgastarse por sí solos una vez que el niño comienza a usar sus dientes. El contacto con las piezas antagonistas, la lengua, los alimentos y el cepillo dental hacen que la forma de sierra desaparezca. Este desgaste fisiológico es lo más habitual, pero existen casos en los que los mamelones pueden perdurar.

Cuando hay problemas de oclusión o malposiciones dentarias y los incisivos de arriba y los de abajo no logran ponerse en contacto, el desgaste no sucede. De todos modos, la permanencia de los mamelones a lo largo de la infancia no es un problema en sí mismo, pero puede ser el indicativo de una alteración en la oclusión que sí requiere de un tratamiento.

Las visitas al odontopediatra en esta etapa son fundamentales. Cuando hay alteraciones en la oclusión, el diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado evitarán que el trastorno avance y pueda generar complicaciones más severas.

El contorneado dental o la reconstrucción con resina son posibles tratamientos para eliminar el aspecto de sierra de los dientes del niño. Otra opción es no intervenir y dejar que se desgasten con el paso del tiempo.

¿Hay que tratar los dientes en forma de sierra?

En general, los dientes de sierra se alisan por sí solos y no requieren de ningún tratamiento. Es importante dejar que el proceso de desgaste suceda de manera fisiológica y a su propio tiempo. Además, no se debe recurrir a ningún método de limado casero, pues esto podría poner en riesgo la salud de las piezas dentarias.

Si los mamelones no han desaparecido durante la infancia del niño, se pueden seguir dos criterios:

  1. Dejarlos como están y convivir con este aspecto particular de los dientes.
  2. Realizar un tratamiento. Esto es en el caso de que la apariencia de sierra de los dientes afecte de manera psicológica y social al niño. También, es una alternativa a considerar cuando los mamelones traumatizan las mucosas y provocan ulceraciones o aftas a repetición en los labios o en la lengua.

Posibles tratamientos

Siempre será el odontólogo quien mejor te asesorará sobre las alternativas más adecuadas para tu pequeño. De todas formas, estas son dos de las opciones de tratamiento a tener en cuenta:

  1. Contorneado dental: es un tratamiento odontológico cosmético. El mismo consiste en hacer un pulido sutil sobre los bordes para darles un aspecto recto y liso.
  2. Reconstrucción con resinas: se realiza sobre el borde del diente y le da a la pieza un aspecto más armónico.

Una etapa transitoria

Los dientes con forma de sierra no tienen por qué preocuparte ni inquietarte. El aspecto irregular de los nuevos elementos dentarios de tu pequeño son un símbolo de juventud. Lo más probable es que el propio uso de la dentadura se encargue de alisar los bordes. De todos modos, te aconsejamos estar atento a la salud bucal de tu niño y acudir a los controles odontológicos semestrales para asegurarte de que todo marcha bien.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • Fuentes Miranda, R. F. (2012). Anatomía de la cavidad pulpar de un incisivo lateral superior permanente (Bachelor's thesis, Universidad de Guayaquil. Facultad Piloto de Odontología).
  • Garza, M. T. R. (2014). Anatomía dental. Editorial El Manual Moderno.
  • Nelson, S. J., & Dds, M. S. (Eds.). (2020). Wheeler. Anatomía, fisiología y oclusión dental. Elsevier.
  • Cubas, C. D. (2005). Anatomía Dental para higienistas de atención primaria. Vision Libros.
  • Campos Soto, F. M. (2018). Desgaste dental oclusal en dentición permanente y su relación con la estimación de la edad cronológica en humanos.
  • Vila, R. E. (2020). Anatomía dental. UNAM, Dirección General de Publicaciones y Fomento Editorial.
Scroll al inicio