Cuando los padres comienzan la alimentación complementaria en el bebé, especialmente los sólidos, suelen ocurrir situaciones en las que el bebé juega con la comida y la tira al suelo o por todos lados.
Esto suele ocurrir con todos los niños, al principio siempre va a haber una etapa en la que va a jugar con la comida, pero tal vez como madre no te agrade mucho o pienses que el comportamiento se extiende más tiempo del que puede aguantar tu paciencia.
Antes de decidir alguna acción ante tal comportamiento por parte del bebé, hay que comprender lo que hay detrás y reflexionar qué intenta conseguir con este comportamiento; ¿estará tratando de comunicar algo?
Los niños tienen el cerebro programado para aprender. Son pequeños científicos haciendo experimentos de todo tipo y de forma constante. Cuando empieza a amasar la comida que amorosamente le has preparado, está experimentando; sí, está conociendo texturas, temperaturas, resistencia a la presión, es decir si la comida se deshace o se desmorona, si tiñe la bandeja o el plato.
Cuando tira la comida desde lo alto de su silla está haciendo experimentos con la gravedad, está descubriendo que las cosas no flotan, que se caen, está descubriendo la velocidad con la que cae, si se expande, o si se rompe cuando golpea el suelo, si lo mancha, si lo moja, entre otras cosas.
A veces el bebé tira la comida porque está jugando
Jugar con la comida es básicamente una actividad de lo más completa para los bebés. Pero a veces puede que lo haga simplemente porque no tiene hambre. Tal vez porque ha tomado leche un rato antes o porque está pasando por una etapa de poco apetito. Si comer es para el bebé una actividad secundaria a jugar-aprender, es probablemente porque no tiene hambre, o al menos porque no tiene mucha.
Hay que aclarar que este comportamiento en sí no esconde problema ninguno, es perfectamente normal teniendo en cuenta el desarrollo infantil. El único problema en realidad está cuando los padres reaccionan tan mal a esta conducta; y así sin darse cuenta la alimentan haciendo que lo que es una etapa se alargue cada vez más y además están convirtiendo el momento de la comida en un tiempo desagradable para toda la familia.
Si nos convencemos de que efectivamente los niños aprenden gracias a nuestro ejemplo, tendremos la paciencia y la tranquilidad para dejarles ser niños y aprender lo que necesiten aprender,
Consejos por si tu hijo tira la comida
Poner un plástico bajo la silla del bebé:
Una bolsa grande de plástico abierta debajo de la silla o trona del bebé hará la tarea de la limpieza mucho más sencilla para ti. Si lo que deseas es que la comida no se pierda o se ensucie al caer al suelo. Este método de la bolsa te va a ayudar mucho, ya que la comida no llegará a tocar el piso.
Ofrece muy poca cantidad de comida:
Puedes administrarle o ponerle la comida poco a poco, comienza por darle solo un trozo o porción a la vez. Cuando empiece a tirarla ya puedes comenzar a decidir si darle un poco más o si volver a ofrecerle luego. Incluso tomar esto como una señal de que por el momento ya está satisfecho.
Poner la comida en la bandeja de la silla o trona en lugar de usar un plato:
Con esto te estás evitando el riesgo que conlleva dejar a su alcance un plato lleno de comida que pueda lanzar por los aires cuál frisbee.
Evita todo tipo de comportamiento forzado:
Si el niño se niega a abrir la boca, de ninguna manera, bajo ningún concepto, debes forzarle. Dar de comer a la fuerza o con distracciones trae muchísimos problemas con la comida más tarde, además de ser una experiencia bastante traumática.
Establecer el límite:
Si tienes una reacción fuerte ante la suciedad o el desperdicio de comida por muy valioso que sea como actividad de aprendizaje del niño, es preferible establecer el límite con toda confianza. Desde luego esto no significa que vayas a privar a tu hijo de aprender y explorar, sino que simplemente tendrá que aprender con otras cosas o de otra manera.
En este caso estaría bien ser consciente del valor de una actividad sensorial como esta y buscar la manera de permitirle tener experiencias similares de forma que sea aceptable para ti. Los límites dependen de cada familia y deben estar diseñados para facilitar la convivencia entre cada uno de los miembros.
Así que si tu hijo tira la comida, tienes que decidir si te molesta tanto como para establecer el límite o si puedes encontrar la manera de permitirlo sin que te produzca resentimiento. Jugar con la comida es una actividad valiosísima desde el punto de vista del aprendizaje.
Lo ideal sería que puedas verlo y permitirlo, al menos de forma controlada, como tal. Pero recuerda que también puedes establecer el límite y que puedes hacerlo de forma respetuosa. Sin perder los estribos, sin enfadarte, sin invalidar las emociones de tu bebé. Con confianza, con seguridad, con calma y con cariño.