Muchas madres han descuidado sus vidas personales por ser mamá, en algunos casos lo usan como pretexto y a otras les pasa por el sentimiento de culpa. También hay casos donde la labor de madres les obliga a dejar su propia vida en segundo plano, aun sin que esté pasando realmente. Pero hay cosas que no debes dejar de hacer por ser mamá.
Es cierto que cuando se inicia la etapa de la maternidad muchas cosas cambian para la mujer, pero existen maneras de equilibrar esos cambios para procurarnos una vida mejor. Aun cuando sabemos que a las madres nos complementa el hecho de cuidar de nuestra familia, es tiempo de reflexionar sobre nuestra condición de mujer.
En tal sentido, aunque suene algo repetido, el valor de la mujer no se pierde en ninguna etapa de la vida. Es nuestro deber comenzar a valorarnos nosotras mismas y dar un vuelco a todo aquello que nos causa malestar y no nos deja crecer como personas.
Velar por la familia lleva su tiempo y nos quita gran parte de la energía que necesitamos para continuar, pero es algo que con organización y ganas se puede trasformar en nuestro beneficio. Por lo tanto, existen al menos cinco maneras de apartar aquellas rutinas que no nos traen nada bueno y cosas que no debes dejar de hacer por ser mamá, entre ellas tenemos.
¿Qué no debes dejar de hacer por ser mamá?
1.- Cuidar tu apariencia
Las personas tenemos un estilo que nos define, la manera de vestirnos, los accesorios que usamos, la forma de llevar el cabello o de demostrar que nos arreglamos. Dicho estilo suele variar, pero conserva su particularidad; por eso cuando cambia radicalmente, puede causar una sorpresa a quienes nos conocen y estaban acostumbrados a la otra persona.
En común que la mujer dé ese giro en su apariencia física cuando se convierte en madre, en tal caso comienza a modificar su estilo acostumbrado, por lo general alegando falta de tiempo. El sobre peso y la falta de cuidados, se evidencia rápidamente y es la maternidad el principal pretexto.
Esto no debemos hacerlo, porque es preciso sacar el tiempo de donde sea posible, pues si queremos hacerlo, encontraremos la manera. Nadie te va a juzgar, al menos que no logres el equilibrio entre tu cuidado y el de tu hijo.
2.- Compartir con tu pareja o buscar una
En el caso de las madres solteras, es común que la dedicación a su hijo sea exclusiva, por lo cual no deja tiempo para relacionarse sentimentalmente con alguien. Pero aquellas madres que tienen a su pareja, algunas veces la descuidan debido a su ocupación de madre.
Esta es una de las cosas que debemos evitar, porque la relación de pareja es importante para garantizar una sensación de confianza en nostras mismas, nos permite sentirnos queridas, saber que contamos con alguien que es nuestro amigo y con quien nos sentimos bien.
Además, evita que el estrés de la maternidad nos agobie, por eso es importante salir de vez en cuando y tener momentos románticos que eleven nuestra autoestima y fomenten las ganas de vernos mejor.
3.- Dar lugar a tus aficiones
Las madres pasamos varias horas al día viendo programas infantiles, escuchando las canciones que les gustan a los niños, leyendo sus libros y armando sus juegos; esto no nos deja tiempo para hacer lo que nos gusta y por lo general nos acostumbramos a eso.
Esta rutina pasa a agrandar el tedio y la decepción que a veces nos embarga, por eso no debemos dejar de hacer aquellas cosas con las que nos sentimos bien. En tal sentido, es recomendable establecer un horario donde haya tiempo para ver nuestros programas, escuchar nuestra música y hacer lo que nos satisface, es algo que debe formar parte de las normas de convivencia.
4.- Cuidar tu salud
Es bastante común que las madres saquemos pretextos para no atender cosas que son importantes para nosotras como cuidar nuestra salud. Dar largas a un chequeo médico porque las ocupaciones no nos lo permiten, puede causarnos un problema mayor.
En este aspecto, es preciso reflexionar sobre la necesidad de estar bien para poder cuidar a nuestra familia, por lo que, si aún piensas que tu salud no es tan importante como para abandonar la maternidad unas horas, piensa que si enfermas lo hará por más tiempo. Lo mejor que puedes hacer por tus hijos es cuidar de ti misma.
5.- Ver a los amigos
Compartir con los amigos en contextos menos infantiles es recomendable para todas las madres que se han descuidado a sí mismas por cuidar de sus familias. Algunas madres tienden a juntarse seguido con sus amigas, pero mientras sus respectivos niños juegan; esto implica que también se deje de ver a aquellos amigos que no tienen hijos.
Salir entre amigos y compartir de vez en cuando como adultos puede resultar muy beneficioso para liberar el estrés acumulado o para cambiar de aires. Tener momentos donde la maternidad no lo sea todo, también nos puede ayudar a pensar diferente y relajar un poco nuestra rutina.