Vitamina D y cólicos en el bebé: ¿cómo se relacionan?

Mantener unos niveles adecuados de vitamina d es fundamental para prevenir el desarrollo de patologías crónicas a medio plazo. Te contamos si sus suplementos generan cólicos en el bebé.
Vitamina D y cólicos en el bebé: ¿cómo se relacionan?
Saúl Sánchez Arias

Revisado y aprobado por el nutricionista Saúl Sánchez Arias.

Última actualización: 13 febrero, 2022

Los cólicos del bebé durante las primeras etapas de la vida suponen un problema frecuente. Pero últimamente, se ha sugerido que el mantenimiento de los niveles de vitamina d en rangos óptimos podría reducir dicha dolencia y mejorar así la calidad de vida de los más pequeños.

Resulta fundamental asegurar que se cubran los requerimientos vitamínicos durante todas las etapas de la vida. De lo contrario, podrían desarrollarse patologías a partir de la ineficiencia de ciertos procesos fisiológicos del organismo. De hecho, en algunas situaciones puede ser necesaria la suplementación con preparados farmacológicos para mantener la buena salud.

A continuación, te vamos a contar todo lo que debes saber acerca de la vitamina d. ¡No dejes de leer!

Importancia de la vitamina d en los bebés

Mujer dando el pecho a su bebé en el parque.

La vitamina d es un nutriente que desempeña un montón de funciones en el cuerpo humano. Entre ellas, es un importante regulador del sistema endocrino y modula la fijación del calcio en los huesos. Un déficit continuado de este nutriente puede derivar en algunas patologías estructurales, como el raquitismo o la osteoporosis. Así lo evidencia una investigación publicada en la revista Pediatrics and Neonatology .

Por otra parte, este elemento podría reducir la incidencia de las patologías pulmonares, cardiovasculares y de ciertos tipos de cáncer cuando se mantiene en los niveles óptimos. De este modo, es crucial evitar las carencias. Sin embargo, son pocos los alimentos que cuentan con vitamina d y la mejor manera de recibirlo es por medio de la exposición solar frecuente.

Dosis adecuadas de vitamina d en los bebés

A través de la exposición solar, la piel inicia el circuito de producción endógena (dentro del organismo) de esta vitamina. Pero, en general, se desaconseja que los bebés pequeños tengan contacto directo con los rayos del sol a fin de proteger su delicada piel.

Por eso, para realmente satisfacer las necesidades, es clave asegurar un aporte nutricional diario de 400 unidades internacionales (UI) de vitamina d. Como en general la leche no alcanza a cubrir esta dosis, se recomienda recurrir a la suplementación farmacológica, sobre todo en los niños de alto riesgo de carencias. En este grupo se incluyen a los lactantes menores de un año, los bebés prematuros y los pequeños de piel oscura.

Además de esto, es determinante asegurar que los niños salgan al exterior y tomen contacto con el sol de forma apropiada. Y un dato no menor es optar por aquellas pantallas solares que no bloqueen la síntesis de la vitamina.



¿Se relacionan los suplementos de vitamina d con los cólicos del lactante?

Algunas madres tienen la sensación de que los niños experimentan cólicos cuando consumen los suplementos de vitamina d. Sin embargo, no existen evidencias científicas que sustenten esta asociación. Tampoco se describe este malestar como un efecto secundario del producto farmacológico.

Es cierto que podrían producirse algunas molestias de tipo digestivo, pero a dosis muy superiores a las indicadas por los especialistas. Por lo tanto, bajo las recomendaciones de suplementación de las guías dietéticas actuales no habría riesgos.

Además, es clave destacar que en caso de experimentarse algún efecto secundario vinculado al consumo de altas dosis de vitamina D, estos suelen ser leves y reversibles. Se trata de medicamentos con un perfil de seguridad bastante elevado.

¿Qué hacer si el bebé llora mucho tras el consumo de vitamina d?

Si se sospecha de la aparición de cólicos tras el consumo de un suplemento de vitamina d, a pesar de que no exista evidencia sólida al respecto, se puede probar con una adecuación de la dosis. Esto quiere decir, reducir la cantidad hasta alcanzar una pauta de administración bien tolerada por el infante. Ahora bien, es importante que esto se haga bajo el consentimiento del especialista.

En el caso de las mujeres que amamantan a los niños, lo que se puede hacer es incorporar el suplemento en la dieta de la madre. Una ingesta al día de 6.400 UI de vitamina d al día puede incrementar los niveles del nutriente en la leche y por ende, en el organismo del bebé.

sordera

No existe evidencia que establezca una relación causal entre consumo de vitamina d y los cólicos de los bebés

Como has podido comprobar, no se encuentran artículos en la literatura científica que relacionen de forma certera el consumo de vitamina d con la aparición de cólicos en los bebés.

Se trata de un nutriente que suele ser deficitario en el organismo y que participa de procesos muy importantes. Por este motivo, es clave cubrir los requerimientos diarios durante todas las etapas de la vida.

Para terminar, recuerda que la pauta de exposición a la luz solar también marcará la diferencia. No se soluciona el problema solo con la suplementación, pues la vitamina d que sintetiza el propio organismo tiene una calidad superior a la que se ingiere por medio de la dieta.


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