El segundo embarazo: ¿cuáles son las diferencias con el primero?

¡No creas que el segundo embarazo será idéntico al primero! Cada bebé es muy diferente, y tu cuerpo tampoco es igual al que tenías durante la primera experiencia. Te lo explicamos a detalle.
El segundo embarazo: ¿cuáles son las diferencias con el primero?

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 30 julio, 2021

El primer embarazo puede provocar sensaciones contrapuestas. Por una parte, es una experiencia nueva que asusta; por otra, emociona. Ser madre es una gran responsabilidad y por ello, es normal que surjan muchas dudas relacionadas con el parto o la propia gestación. Afortunadamente, el segundo embarazo suele ser mucho menos tenso, desde el punto de vista emocional. 

En un segundo embarazo, una mujer se puede sentir más preparada e informada que en la vez anterior. Esto sin duda, ayuda a tener mayor seguridad y a aliviar la tensión emocional. Ya se ha vivido el proceso y se está más dispuesta a volver a pasar otra vez por el mismo, aunque con algunas mejoras claro está.

A pesar de esto, hay ciertas cosas que es necesario tener en cuenta.

Diferencias entre el primer y el segundo embarazo

1. Esta vez, la barriga se notará antes

En el primer embarazo la barriga empieza a notarse a partir del quinto o sexto mes. En el segundo ocurre de forma diferente, porque los músculos del abdomen están un poco más relajados. Esto hace que se adapten más rápidamente a los cambios y que se empiece a notar más desde el tercer mes.

2. El útero no es más grande

Pese a la creencia general, el útero no aumenta de tamaño después de la primera gestación. Durante el segundo embarazo el crecimiento del órgano es igual a la vez anterior.

Mujer embarazada con un jersey gris

3. Puede que no tengas los mismos síntomas que en el primero

No tienen por qué sufrirse los mismos trastornos del primer embarazo. Lo más probable es que las náuseas y el dolor de espalda se repitan, pero otros síntomas más fuertes (como la gestosis), no tienen por qué volver a darse.

4. Los movimientos del feto llegan antes

En el segundo embarazo, los movimientos del feto comienzan a sentirse a partir de la semana 14. En el primero esto ocurre en la semana 20 o 21.

5. El proceso de dar a luz puede variar

Aunque el primero haya sido mediante cesárea, el segundo puede ser parto natural. La cicatriz no representa ningún obstáculo, ni tiene por qué influir en el proceso de dar a luz. También es necesario recalcar que aunque en el primer parto se rompiese aguas de forma espontánea, no tiene por qué repetirse esta vez.

6. La episiotomía no siempre es necesaria

En la actualidad, esta es una práctica que se realiza únicamente en casos extremos. Si en el primer parto se practicó, es posible que en el segundo también se realice.

7. Es aconsejable que asistas nuevamente al curso de preparación al parto

Aunque ya hayas asistido la primera vez, siempre se aconseja volver al curso. Podrás realizar ejercicios físicos y de relajación, además de tener la oportunidad de conocer a otras madres.

8. La dilatación debería durar menos que en el primer parto

El proceso debería durar menos durante el segundo parto. Si el primero duró, por ejemplo, 24 horas, el segundo debería durar por lo menos la mitad.

¿Cómo prepararse para el segundo embarazo?

Cuando se toma la decisión de agrandar la familia, es necesario prepararse, tanto física como mentalmente. Después de todo, van a ocurrir muchos cambios que no solo afectarán al propio cuerpo, sino también a su pareja y primer hijo.

Es importante analizar con calma la situación para tomar las decisiones adecuadas.

1. ¡Cuídate siempre!

En lugar de cuidar tu salud a partir del momento en que recibes la noticia de que estás encinta, cuídate siempre. Hazlo por ti y verás cómo podrás afrontar la maternidad con mucha más fuerza y mejor disposición.

Comenzar a cuidar más detenidamente de tu salud antes de quedar embarazada permitirá a tu organismo adaptarse a los cambios y ofrecer un mejor ‘sostén’ al bebé cuando llegue el momento. No es lo mismo dejar de fumar o beber alcohol en la primera semana del embarazo que un mes o un año antes, por ejemplo. La planificación es fundamental.

Padre y madre con las manos entrelazadas y unos zapatos de bebé

 2. Visita al médico 

Nunca está de más mencionar la importancia de visitar al ginecólogo y acudir a las revisiones periódicas para tener más información acerca del bebé y la salud en general, pero también para resolver dudas y hacer comentarios.

3. Respetar la distancia mínima

Es fundamental que exista una distancia mínima de 6 meses después del parto entre el primer y el segundo embarazo. Lo ideal es que sea de 2 a 5 años, pero si ocurriera dentro de los parámetros anteriores no habría ningún problema. Cada familia es diferente y ha de elegir el momento cuando lo crea conveniente.

Conclusión

El segundo embarazo puede ser una etapa tan bonita como la primera, o incluso más dado que ya se conoce parte del panorama. Ahora bien, está claro que lo más importante será no descuidar las revisiones médicas y resolver siempre todas las inquietudes con el profesional para evitar caer la desinformación.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Timur, Hakan & Topçu, Hasan Onur & Kokanali, Mahmut & Topcu, Seda & Erkılınç, Selçuk & Uygur, Dilek & Yakut, İbrahim. (2015). Factors That Affect Perinatal Outcomes of the Second Pregnancy of Adolescents. Journal of Pediatric and Adolescent Gynecology. 29. 10.1016/j.jpag.2015.05.002.
  • Soma-Pillay, Priya et al. “Physiological changes in pregnancy.” Cardiovascular journal of Africa vol. 27,2 (2016): 89-94. doi:10.5830/CVJA-2016-021

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.