Maca andina o aceite de onagra: ¿realmente aumenta la fertilidad?

En el mercado hay muchos suplementos alimenticios que prometen incrementar las probabilidades de concebir un bebé. Ahora bien, pocos son los que han demostrado una real eficacia en estudios científicos bien diseñados.

Está claro que mantener hábitos saludables es clave para lograr un embarazo y que, por el contrario, el consumo de alcohol o de tabaco afectan negativamente a la función reproductiva.

Por este motivo, para ser padres se aconseja evitar la ingesta de tóxicos, plantear una pauta nutricional apropiada y practicar ejercicio físico de manera regular. Pero, ¿qué hay de los suplementos nutricionales como la maca andina y el aceite de onagra? Te lo contamos.

¿Funciona la maca andina para aumentar la fertilidad?

La maca es una planta similar al rábano, que se cultiva en algunos países del sur del continente americano. Sobre todo, en Perú y en Bolivia.

Este producto natural se ha utilizado durante muchos años como un remedio, pues propone un efecto positivo sobre la vitalidad. Del mismo modo, también se afirma que se trata de una raíz capaz de incrementar la libido y la fertilidad.

Se especula con la posibilidad de que el consumo regular de maca aumenta el recuento de espermatozoides y su calidad. Sin embargo, hasta el momento no existen evidencias sólidas al respecto, tal como lo confirma una investigación publicada en la revista Natural Products Research.

En el estudio antes mencionado se revisaron varios trabajos científicos publicados entre los años 2000 y 2019. Ninguno de ellos permitió establecer una relación causal entre el consumo regular de maca y un aumento en la calidad del semen.

¿Y qué sucede con el aceite de onagra?

Por otra parte tenemos el aceite de onagra, un extracto natural que deriva de las semillas de la planta Oenothera biennisla.

Según se supone, el consumo regular de este producto podría favorecer al control de diversos parámetros fisiológicos, como la presión arterial. También se propone un efecto positivo en el perfil lipídico, con una reducción del nivel de colesterol LDL. Incluso, algunos expertos hablan de un posible beneficio sobre la salud mental.

Sin embargo, ninguno de estos efectos cuenta con una evidencia científica sólida y tampoco está claro que ofrezca ventajas sobre la posibilidad de concebir.

Recientemente, se ha estudiado el efecto del aceite de onagra en la progresión del parto, como un facilitador de la dilatación. Sin embargo, esta asociación no se ha podido demostrar con certeza, según detalla un artículo publicado en la revista Journal of Obstetrics and Gynaecology.

¿Cómo mejorar las posibilidades de concebir?

A día de hoy no existe ningún remedio natural o producto milagroso que consiga aumentar la fertilidad de manera significativa.

Si deseas aumentar la probabilidad de una fecundación exitosa, debes plantearte llevar un estilo de vida saludable. Pues el número de espermatozoides, su movilidad y su calidad son factores determinantes de cara al éxito reproductivo. Y en este sentido, evitar los tóxicos y el sedentarismo se torna crucial para lograrlo.

De todos modos, si aun manteniendo buenos hábitos no se consigue un embarazo, puede ser preciso acudir a una clínica especializada. Existen tratamientos farmacológicos que han demostrado efectividad y que han permitido romper las barreras de la infertilidad en muchas parejas.

La maca y el aceite de onagra no incrementan la fertilidad

Como has visto, ni la maca ni el aceite de onagra son capaces de mejorar la fertilidad. Aun así, existen varias líneas de investigación abiertas al respecto. También, se estudia si otros producto como el tribulus terrestris o el extracto de jengibre provocan cambios significativos sobre la movilidad y la cantidad de espermatozoides del semen.

De momento, la mejor alternativa para mejorar las probabilidades de concepción consiste en plantear unos buenos hábitos y mantenerlos durante todas las etapas de la vida. Además, estudiar el calendario de ovulación para mantener relaciones los días claves del ciclo.