Los riesgos de Instagram para niños y adolescentes

Una de las redes sociales más utilizadas hoy en día es Instagram. Resulta muy llamativa porque su modalidad de uso es muy sencilla y, además, tiene un formato principalmente visual. A través de ella se comparten fotos con usuarios de todas partes del mundo, a cualquier hora y lugar. Así, publicar imágenes se convierte en algo muy fácil e, incluso, cotidiano.

En los últimos años, esta red es la que ha propiciado, en mayor medida, los autorretratos (selfies, en inglés). Y si bien no todos los niños y adolescentes hacen un mal uso de ella, lo cierto es que aún queda mucho por hacer a la hora de educar a los más jóvenes al respecto.

Como padres, es importante informarse bien de los distintos avances tecnológicos para poder orientar a los hijos adecuadamente. También es necesario aprender a evaluar los posibles riesgos del uso de las redes sociales. Por ende, hay que estar atentos. 

Una red social muy atractiva y adictiva

Desde el punto de vista de los jóvenes, subir fotos y compartir datos personales no es nada malo. Sin embargo, no todo el mundo tiene buenas intenciones y, con demasiada frecuencia, hay quienes se aprovechan de esta inocencia para fines indebidos, como suplantar identidades, acosar o consolidar un delito sexual.

Al ser tan popular, esta red social resulta no solo atrayente sino muy influyente en el día día, tanto en niños como adolescentes. Con facilidad, le dan demasiada importancia y se dedican a publicar contenido con la finalidad de obtener aprobación y reconocimiento social y, por supuesto, satisfacción inmediata.

 En lugar de prohibir el uso de redes sociales a los jóvenes, lo más recomendable es enseñarles a protegerse y a conocer los peligros a los que pueden exponerse si no tienen cuidado.

En el caso de los niños, quizás, lo mejor sería que no tuviesen redes sociales. Sin embargo, si los padres han permitido que los niños tengan cuentas, deberán asegurarse de supervisarlas con regularidad para evitar problemas, tanto a corto como largo plazo.

Riesgos de Instagram para niños y adolescentes

Algunos de los riesgos que conlleva el uso de Instagram en niños son:

1. Sobreexposición

Como todos sabemos, en las redes sociales se pueden compartir datos personales que pueden poner en riesgo la privacidad e incluso la integridad de todos. Muchas veces en una foto puede revelarse la ubicación del pequeño o incluso, se pueden colocar los números telefónicos como públicos. Por ello es fundamental que los padres vigilen de cerca la información que publican sus hijos Internet.

2. Ciberbullying

El bullying no es un tema nuevo, de hecho, se ha mantenido a lo largo de los años como un grave problema en las escuelas. Con la aparición de las redes sociales, como es el caso de Instagram,  ha aparecido el “Ciberbullying”, donde los niños y adolescentes son víctimas de acoso a través de la red social.

3. Adicción a la red social

Uno de los más poderosos riesgos de Instagram para niños y adolescentes es la adicción, que puede aparecer debido a lo dinámica y visual que puede ser esta red social. Otro punto a destacar, es que es realmente fácil de instalar y utilizar, lo que la hace mucho más accesible.

4. Tendencia a sufrir de depresión

Según un estudio realizado por la Royal Society of Public Health y la Universidad de Cambridge, los jóvenes que pasan más de dos horas al día en las redes sociales, son más propensos a sufrir problemas de salud mental, como angustia, síntomas de ansiedad y depresión.

Los autores del estudio alegaron que “ser un adolescente es ya suficientemente difícil, pero las presiones a las que se enfrentan online los jóvenes son sin duda únicas para esta generación digital. Es de vital importancia que intervengamos poniendo medidas preventivas“. Así que, demasiado tiempo en redes sociales como Instagram, pueden ser perjudicial para los niños y jóvenes.

Según la Royal Society of Public Health y la Universidad de Cambridge, Instagram podría ser la red social más perjudicial.

5. Extraños y depredadores

Tener un perfil en Instagram hace a los niños y jóvenes vulnerables ante posibles depredadores. Cualquier persona puede crearse una cuenta con datos falsos y hacerse pasar por un adolescente cuando no lo es con fines malintencionados.

6. Modelos y presión social

Las redes sociales son una de las principales fuentes de referentes para los jóvenes y normalmente no ofrecen los modelos más apropiados. A raíz del uso de Instagram puede dispararse la insatisfacción con la propia imagen y la obsesión con el cuerpo y la apariencia; algo que puede derivar en trastornos alimenticios y otras patologías.

Además, en estos medios se fomenta un estilo de vida superficial en el que las personas parecen valer por lo que tienen o muestran y no por lo que son, por sus logros personales y virtudes. Esto, en una etapa tan crítica como la adolescencia, puede sentar unas bases muy perjudiciales.

7. Problemas de socialización

Las redes ofrecen un relativo anonimato, una zona de confort que puede ser especialmente útil para aquellos niños y jóvenes con problemas de socialización. Y es que por este medio pueden mostrarse más atrevidos o sociables de lo que son en la vida real. No obstante, refugiarse en el mundo virtual les priva de las oportunidades de practicar en la vida real, que es donde realmente precisan esa habilidad.

Claves para proteger a los más jóvenes

Es complejo que los niños y adolescentes abandonen la red social por su cuenta, debido a que es lo suficientemente atractiva para ellos, pero los padres pueden tomar algunas acciones para proteger a sus hijos. Estos son algunos consejos para disminuir los riesgos de Instagram para niños y adolescentes:

• Mantener el perfil privado. Además, es preferible compartir las historias únicamente en “mejores amigos”, especialmente aquellas que contengan información personal.
• No admitir a extraños ni revelar datos (nombre, apellidos, edad, ubicación, etcétera).
• Tomar y compartir fotos acordes a la edad (educar en temas de sexualidad es clave en este aspecto).
• Enseñar a distinguir posibles depredadores y a mantener conversaciones sanas. Asimismo, es importante que los jóvenes puedan tener la confianza de comentar cualquier inquietud con sus padres. La comunicación entre padres e hijos será de gran utilidad.
• Los progenitores deben estar al tanto de la actividad de sus hijos en redes y restringir el tiempo de uso de estas aplicaciones.

En el caso de los niños más pequeños, es importante que los padres supervisen siempre las fotos que suben en su perfil. Cuando se trata de los adolescentes, es fundamental comunicarles el riesgo que implica publicar fotografías privadas o datos como la ubicación.

En la actualidad, es difícil evitar que los niños y adolescentes utilicen las redes sociales, debido a que es parte de la sociedad y la tecnología de la información. Por lo que los padres deben supervisar y aconsejar tanto a los pequeños, como a los jóvenes.