La caída del cabello en los recién nacidos recibe el nombre de efluvio telógeno. Este proceso natural del cuerpo suele causar un poco de angustia en los padres; sobre todo cuando no se trata de una calvicie total, sino parcial y localizada.
Las causas del efluvio telógeno son completamente naturales. A excepción de algunas condiciones asociadas a enfermedades, todos los bebés pasan por este proceso.
Lo ideal es cuidar el cuero cabelludo del bebé y evitar cortar su pelo antes de los tres meses de vida; los recién nacidos controlan su temperatura corporal a través de la cabeza.
A qué se debe la caída del cabello en los recién nacidos
No deja de sorprender cómo bebés que han nacido con abundantes cabelleras comienzan a presentar calvicie con el paso de los días. En la mayoría de los casos, suelen dejar parte del cabello pegado a la almohada o sillita de descanso.
El pelo no siempre está en una etapa de crecimiento. De hecho, su período de crecimiento es de tres años, mientras que el de reposo es de tres meses. Esto no quiere decir que todo el pelo crece a la vez, o se mantiene en reposo al mismo tiempo; solo entre el 5% y el 15% del cabello se mantiene en etapa de reposo.
La caída del cabello en los recién nacidos es importante para dar paso al nuevo pelo. Mientras parte del cabello está en reposo, una parte se va cayendo para dar paso a nuevas hebras. De esta forma, se evita la calvicie total, aunque en algunos niños pueda existir ese riesgo.
Para algunos padres, resulta una sorpresa descubrir que el cabello nuevo de su bebé es diferente al del nacimiento. Generalmente, el pelo de nacimiento es más oscuro y grueso que el cabello nuevo; solo en el caso de los bebés de tez muy clara, su color de cabello se asemeja más al verdadero.
¿Cuándo no es normal la caída del cabello en los recién nacidos?
Solo en casos muy puntuales la caída del cabello en los recién nacidos está asociada a enfermedades. Por ejemplo, si el cuero cabelludo se torna rojo o inflamado, puede deberse a la presencia del algún hongo.
Lo mismo ocurre cuando hay seborrea o escamas, una situación que puede aumentar la caída del cabello. En este sentido, es importante no confundir la caspa con la costra láctea; a diferencia de la caspa común, la costra láctea es amarillenta y gruesa. Además, no causa irritación y es una condición muy usual en los recién nacidos, que suele superarse por sí sola.
Finalmente, los trastornos hormonales, de tiroides o ganglios, pueden estar asociados a la caída del cabello en los recién nacidos. Por eso, es importante no restar importancia a este fenómeno durante su chequeo médico regular; es recomendable compartir cualquier cambio físico que nos pueda sorprender con el pediatra.
Cómo se puede cuidar el cabello del recién nacido
Los bebés no requieren de cuidados extraordinarios en el aseo. Su baño diario no solo les mantiene limpio, sino que les ayuda a relajarse. Para el cuidado del cabello del bebé, hay algunos consejos importantes a tener en cuenta:
- Utilizar champú clínico o para bebés. La mayoría de los especialistas recomiendan el uso de jabones y champús neutros, es decir, sin fragancias o colorantes añadidos. De esta manera, se evita cualquier reacción alérgica. La piel de los bebés es muy delicada en sus primeros meses y lo mismo ocurre con el cuero cabello.
- Bañarlo con agua tibia. El agua del baño debe estar a una temperatura ideal, ni muy fría, ni muy caliente. El baño caliente estimulará la pérdida del cabello, ya que contribuye a abrir los folículos
- Masajear cuidadosamente el cuero cabelludo. Los masajes estimulan al cuero cabelludo, aunque también pueden provocar que el pelo débil caiga más rápido. De igual modo, los masajes también son útiles cuando hay presencia de costra láctea.
- Variar la postura del bebé al dormir. Los cambios de postura cuando el bebé duerme ofrecen la ventaja de que la calvicie no se pronuncie más de un lado que del otro. La postura también debe variar en los momentos en que el bebé repose en su silla de descanso.
“La caída del cabello en los recién nacidos es importante para dar paso al nuevo pelo. Mientras parte del cabello está en reposo, una parte se va cayendo para dar paso a nuevas hebras”
En definitiva, la caída del cabello en los recién nacidos no es un suceso que deba despertar la preocupación de los padres, salvo en algunas excepciones. En el corto plazo, verás que aparecerán nuevos cabellos y su cabeza volverá a lucir como siempre.