La adolescencia es una etapa de transición y cambios significativos en la vida de una persona. Uno de los aspectos más destacados y notables de la adolescencia es el desarrollo de la piel y, con ella, la aparición de problemas comunes como el acné y las imperfecciones.
Es por eso que la higiene facial en los adolescentes se convierte en una parte esencial de su rutina de cuidado personal. Ahora bien, ¿cómo pueden los adolescentes incorporar una limpieza de rostro adecuada? Quédate hasta el final para descubrirlo.
Cambios en la piel durante la adolescencia
Antes que nada, es fundamental comprender cómo cambia la piel durante esta etapa. La pubertad trae consigo fluctuaciones hormonales que pueden provocar un aumento en la producción de sebo en las glándulas sebáceas de la piel.
Por consiguiente, el exceso de sebo obstruye los poros y crea un ambiente propicio para el crecimiento de bacterias, lo que puede desencadenar la aparición de acné y puntos negros.
Además del acné, de acuerdo a un artículo de la revista Advances in Dermatology and Allergology, algunos adolescentes también pueden presentar piel grasa, piel seca y otras imperfecciones, lo que aumenta la necesidad de prestar atención a una higiene facial adecuada.
¿Por qué es importante?
La higiene facial desempeña un papel crucial en la salud y apariencia de la piel de los adolescentes. A continuación, destacaremos algunos de los beneficios más significativos.
1. Controla el acné y las imperfecciones
Mantener una higiene facial adecuada ayuda a eliminar el exceso de grasa y las impurezas de la piel, lo que disminuye la probabilidad de obstrucción de los poros y la aparición de acné y espinillas. Por lo tanto, se recomienda comenzar la rutina de cuidado de la piel con un limpiador facial formulado para pieles oleosas.
2. Previene infecciones cutáneas
La limpieza regular del rostro reduce la cantidad de bacterias en la piel, lo que disminuye el riesgo de infecciones cutáneas y afecciones más graves. Incluso, se recomienda utilizar una toalla limpia para secar y no la toalla de mano que usa el resto de los convivientes. De hecho, cualquier toalla que no se encuentre limpia puede presentar diversas bacterias.
3. Mejora la autoestima
Una piel limpia y saludable puede aumentar la confianza de los adolescentes, lo que influye de manera positiva en su autoestima y bienestar emocional. Un artículo de la Indian Journal of Dermatology refiere que asociados al acné, también se han documentado otros problemas psicológicos como los siguientes:
- vergüenza
- insatisfacción con la apariencia
- timidez
- falta de autoconfianza
- reducción del vínculo social
4. Previene cicatrices
La American Academy of Dermatology Association destaca que, al controlar el acné y las imperfecciones de la piel, se reduce la posibilidad de que se desarrollen cicatrices permanentes. Si bien el acné severo es el que provoca mayor cantidad de cicatrices, el acné moderado puede generar ganas de tocar las lesiones y también provocar que estas aparezcan.
Consejos para una adecuada higiene facial en adolescentes
Inculcar hábitos de higiene facial adecuados durante la adolescencia puede sentar las bases para una piel sana y radiante en la edad adulta. Asimismo, una simple rutina de tres pasos: limpieza, hidratación y protección, puede ser muy beneficiosa para la salud de la piel.
A continuación, detallamos algunos consejos prácticos para que los adolescentes mantengan una higiene facial efectiva y saludable.
- Limpieza facial diaria: es esencial limpiar el rostro dos veces al día, siendo la primera por la mañana y la segunda por la noche, utilizando un limpiador facial suave y adecuado para su tipo de piel.
- Hidratación y protección solar: aunque la piel sea grasa, es crucial hidratarla de forma adecuada con una crema ligera y no comedogénica. Además, se aconseja aplicar protector solar todos los días para prevenir el daño solar y el envejecimiento prematuro.
- No exprimir granos: aunque puede ser tentador, la organización Neumors Teens Health no aconseja exprimir los granos, ya que puede agravar la inflamación y provocar cicatrices permanentes. A su vez, tampoco se debe tocar o frotar el rostro con las manos, porque esto puede transferir bacterias y empeorar el acné.
- Exfoliación ocasional: la exfoliación suave una o dos veces por semana puede ayudar a eliminar las células muertas de la piel y desobstruir los poros.
- Cambiar las fundas de almohada de forma regular: cambiar las fundas de almohada al menos una vez a la semana puede ayudar a evitar que las bacterias se acumulen en la piel mientras duermen.
- Mantener una dieta saludable: una dieta equilibrada y rica en frutas y verduras puede contribuir a la salud general de la piel.
- Consultar a un dermatólogo: si los problemas de la piel persisten o empeoran, es recomendable consultar a un dermatólogo para un diagnóstico y tratamiento adecuado.
La autoestima y la higiene facial en los adolescentes
La higiene facial adecuada es un pilar fundamental en el cuidado de la piel de los adolescentes. Durante este período, mantener una rutina de higiene facial adecuada puede ayudar a controlar el acné y las imperfecciones, mejorar la autoestima y promover una piel saludable y radiante a largo plazo.
A su vez, al seguir los consejos y recomendaciones, los adolescentes pueden cuidar su piel y sentirse más seguros durante esta etapa de su vida. La higiene facial es una inversión en su bienestar físico y emocional que los acompañará durante toda su vida adulta.
Bibliografía
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