Cómo entretener a mis hijos mientras trabajo en casa

Trabajar desde casa no es nada fácil, mucho menos cuando tienes hijos pequeños. Aprende cómo conseguir que se entretengan durante tu jornada laboral.

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En el mundo actual el tele trabajo se ha vuelto la norma y con él la necesidad de entretener a los hijos en casa. Hasta no hace mucho tiempo ocurría lo contrario y la mayoría de los padres salían a trabajar fuera del hogar.

Si bien esta nueva modalidad tiene sus beneficios, acarrea otros perjuicios: es causa de ansiedad, estrés y culpa en los padres de niños pequeños. Porque aunque ahora vean más a sus hijos, esto no implica que dispongan de más horas para ellos.

Encontrar el límite entre la jornada laboral y la vida personal es sumamente difícil. Sobre todo cuando los niños demandan atención constante y no se ha logrado una buena organización.

Que los hijos vean la televisión durante toda la jornada laboral no es apropiado, pero tampoco es posible distraerse todo el tiempo para atenderlos. Entonces, la carga mental puede llegar a ser paralizante y es necesario encontrar una solución con la que todos se beneficien.

9 formas de entretener a mis hijos mientras trabajo en casa

Las personas que nunca han trabajado desde casa con sus hijos dentro pueden pensar que no es algo tan complicado de lograr. Pero la realidad es otra, ya que entretenerlos durante toda una jornada laboral no es tan simple.

Los niños pequeños pueden pasar horas jugando, siempre y cuando uno esté a su lado física y emocionalmente. Porque al trabajar desde el hogar se está cerca con el cuerpo, pero la cabeza está en otro sitio. Ellos lo notan y en consecuencia, demandan más atención.

Cuando los niños son mayores, es probable que su comportamiento empeore si se aburren o no saben qué hacer. En estas situaciones, el nerviosismo aflora y sobrevienen las discusiones. Pero es importante evitar llegar a esto.

Es clave buscar la manera de que los hijos se entretengan y que al mismo tiempo, aprendan a respetar las horas de trabajo de sus padres. Sobre todo si solo uno de ellos queda al cuidado de los niños todo el día.

A continuación, te ofrecemos algunos consejos para que logres congeniar tus actividades laborales con tu vida familiar.

1. Establece rutinas para los días laborables

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Las rutinas son herramientas fundamentales para la organización familiar. Les permiten a los niños comprender la dinámica de la casa y anticiparse a los distintos eventos, sin reaccionar de forma desmesurada ante el cambio.

Antes de comenzar tu jornada laboral, dedica un momento para hablar con tus hijos y organizar el día de la familia. Solo entendiendo lo que sucede, ellos podrán cooperar contigo.

Puedes elaborar un horario visual, en el que quede claro en qué momento se llevarán a cabo las actividades y cuáles de estas deberán hacerlas solos.

Recuérdales que aunque vayas a estar a su lado, en algún momento del día deberás prestar atención al trabajo.

2. Pídeles colaboración para que luego puedas dedicarles todo tu tiempo

En el caso de que sean algo más mayores, puedes encargarles alguna tarea de la casa. Por ejemplo, destender la ropa u ordenar su cuarto. Así la casa estará en mejores condiciones y ellos habrán colaborado contigo para darte más tiempo libre después.

Si hacen las cosas bien y respetan tu horario de trabajo, al final de la semana puedes recompensarlos. No necesariamente con objetos materiales, sino con algo que a ellos los gratifique. Puede ser su cena favorita, un plan familiar al aire libre o aquella cosa que hayas dejado pendiente para una ocasión especial.

3. Evita sobrecargarte de actividades que requieran de tu atención

Si un día tienes un evento importante en el trabajo, evita comprometerte con tus hijos para hacer otros planes. Ese día limita las actividades que demanden tu supervisión.

Una buena idea es proponerles dibujar o pintar mientras estás trabajando u ofrecerle algunos rompecabezas acordes a su edad. También es ingenioso remarcarles en el reloj el tiempo que deberán permanecer en esa actividad, para que luego puedan disfrutar de un momento juntos y libre de responsabilidades.

Los juegos de construcción también son una buena forma de entretener a los hijos mientras se desarrolla el trabajo en casa. Además, disfrutarán creando con su imaginación y el tiempo les pasará volando.

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4. Hacer las tareas juntos

¿Cómo entretener a mis hijos mientras trabajo en casa? Una alternativa: hacer juntos (en el mismo espacio, uno al lado del otro) el trabajo que a cada quien le toca.

Los deberes escolares son su responsabilidad. Que aproveche el tiempo en que tú también estás ocupada para cumplir sus deberes redundará en tiempo de calidad durante y después.

Además, si estás cerca y tiene alguna duda, no asumas como distracción el ayudarlo a salir del escollo. Considéralo una forma de descanso. Explicarle algo le dará seguridad y confianza y, sobre todo, ánimo; el tiempo que inviertes en ayudarlo, te dará más tiempo de ocupación y concentración.

5. Ensaya el método ‘pomodoro’

Trabaja de manera concentrada 25 minutos y para 5. Luego de descansar y despejar la mente, vuelve a la concentración. Tras cuatro bloques de trabajo, descansa por más tiempo.

Es esta una técnica de organización del tiempo de trabajo que rinde buenos frutos y permitiría, en los descansos, dedicarte a conversar, a orientar a tu hijos, a acompañarlos en alguna de sus asignaciones.

De hecho, lo mejor sería compartir las mismas pautas e intervalos de trabajo y descanso, lo que los haría compenetrarse mucho más y ganar en comprensión mutua.

6. Organiza encuentros con sus amigos o primos

El aburrimiento y la soledad no son una buena combinación. De ser posible, cada cierto tiempo, organiza que primos o algún amigo o compañero de clases lo visite para hacer juntos los deberes escolares o simplemente, jugar.

Lograr planificar los encuentros hará que las opciones de juego, estudio u ocio recreativo, respondan a un plan, a una estrategia de formación y educación.

Por ejemplo, que ensayen juntos instrumentos musicales, que acometan la construcción de un puzzle laborioso o el estudio de materias complejas como biología o matemáticas.

Dejar los encuentros a la deriva o a la casualidad puede a veces resultar interesante, pero otras contraproducente.

7. Gestiona lo necesario para realizar manualidades

Siguiendo las líneas anteriores, preparar las horas de crecimiento y desarrollo emocional de los hijos pasa por organizar y planificar.

Programar jornadas de pintura, de elaboración de manualidades o la ejecución de tareas que ameritan construcción, debe responder a proyectos concebidos con anterioridad.

La idea es que los hijos comprendan que el manejo del recurso tiempo de manera inteligente y consensuada será beneficioso para todos.

8. Invítalos a preparar una obra de teatro

En la programación de las actividades familiares puede aparecer una invitación a parientes y amigos, para el estreno de una obra de teatro familiar. Ese compromiso artístico les hará ocuparse de los detalles: desde la concepción de la obra hasta la elaboración del vestuario y el escenario.

En tus momentos libres, inspecciona los avances, opina, estimula y ayúdalos a seguir el plan de trabajo ajustado a los tiempos de la presentación. Que el proyecto sea compartido y sobre todo, tomado muy en serio.

9. Organiza una buena sesión de películas

Ya dijimos arriba que la televisión no es la mejor opción. ¿Qué tal seleccionar listas de películas? Pueden ser temáticas, clásicas, históricas. Son muchísimas las posibilidades y acercarse al cine de autor rendirá exquisitos frutos estéticos.

Es muy probable que tus hijos se quieran entretener con estas sesiones y esperarán tus horas de trabajo para dar inicio al cine de calidad en casa. Prepáralo todo, palomitas incluídas.

Congeniar el trabajo en casa con la familia

Recuerda que educando con calma, evitando las peleas y las tensiones, obtendrás mejores resultados. Los niños se adaptan a las rutinas mucho más rápido que los adultos.

Aprovecha esta condición y enséñales a colaborar contigo durante la jornada laboral. De sus esfuerzos vendrán grandes recompensas, como disfrutar de tu tiempo exclusivo para ellos.

Bibliografía

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