Enseñemos a nuestras niñas a ser valientes, no perfectas

Es fundamental que los padres fomenten esta habilidad en sus hijas para cuidar su bienestar. ¡Descubre los detalles en este artículo!

En el último tiempo, se ha podido hacer frente a la desigualdad y se ha logrado disminuirla en gran medida. Sin embargo, algunas familias todavía incluyen los sexismos en la crianza de los niños, lo cual acaba por afectar su desarrollo.

Hay padres que todavía manifiestan que los varones tienen que transmitir fortaleza y que no pueden llorar para desahogarse. Así mismo, sostienen que las niñas deben ser reservadas y que tienen que alcanzar la perfección en todo momento.

A causa de ello, generan algunas limitaciones en las niñas porque no les permiten arriesgarse y participar de los retos más difíciles. Asimismo, las sobreprotegen en exceso y les quitan la posibilidad de descubrir nuevas habilidades.

El mensaje que reciben las niñas es que para que su comportamiento resalte siempre tienen que ser calmadas y tímidas. Por esa razón, se les enseña a permanecer en una zona de confort en la que los riesgos no son una opción prioritaria. Todo este actuar le causa inconvenientes en su día a día, pues en el mundo real existen múltiples obstáculos y es fundamental saber sobreponerse a ellos para no desesperarse.

En vista de esa preocupación, los especialistas llevaron a cabo un análisis que terminó de encender las alarmas. A continuación, se detallan todos los hallazgos que se revelaron en él.

El estudio

Los investigadores de la Universidad de Columbia plantearon una serie de tareas complejas a un grupo de niños y niñas de quinto grado, a fin de comprobar la personalidad de los dos géneros ante una situación retadora.

Los niños se emocionaron con el ejercicio y se esforzaron al máximo para encontrar una solución, pues desde la infancia se les había enseñado a demostrar valentía e iniciativa para afrontar las adversidades.

Por su parte, las niñas renunciaron a la tarea de una manera más rápida, ya que en los hogares no se les impulsa a adquirir la confianza necesaria para atreverse a ver el lado positivo de aquellos sucesos que implican un esfuerzo adicional.

Los investigadores fueron enfáticos al decir que esto no está relacionado con las capacidades cognitivas, pues las niñas evaluadas tenían un gran rendimiento escolar.

Por este motivo, concluyeron que la educación es un factor determinante para que las niñas se acostumbren a los momentos de calma y no vean a los desafíos como una necesidad.

¿Cómo formar niñas valientes?

Lo primero que se debe hacer es dejar a un lado los estereotipos, pues todos los seres humanos cuentan con las mismas capacidades para sacar adelante cualquier tarea. De esa manera, es imprescindible eliminar la idea de que hay unas acciones específicas para los hombres y que por eso la fuerza les pertenece.

En segundo lugar, los padres deben evitar decirle a sus hijas que tienen que ser perfectas, pues todas las personas tienen el derecho de descubrir, de equivocarse y de aprender para evolucionar.

Adicional a ello, debe fomentarse a las niñas a explorar su entorno y a tener iniciativas. Así se consigue que se arriesguen, que venzan los miedos y que no se desesperen con facilidad.

Finalmente, los padres tienen la tarea de motivar a sus hijas y de resaltar cada una de sus habilidades. De esa manera, las llenan de autoestima y confianza para afrontar nuevos retos y buscar cada vez más aprendizajes.

La valentía es imprescindible para la vida

Ser valiente es imprescindible para gestionar las emociones y no quedarse estancado en los malos momentos. Además, resulta necesario para buscar las formas de cumplir con todos los objetivos propuestos y alcanzar el bienestar que tanto se desea.

Debido a ello, los padres deben caer en cuenta del error y entender que la valentía es un aprendizaje importante para que las niñas no se sientan limitadas. Asimismo, aceptar que este valor les permite acomodarse a todos los entornos de sus vidas.