Embarazadas al volante

Embarazadas al volante

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 16 abril, 2020

El día  a día de las embarazadas está lleno de restricciones, por eso hay tantas dudas sobre qué podemos hacer. Particularmente, una mujer al volante recibe muchas recomendaciones sin importar si está embarazada o no.

En el caso de aquellas futuras madres que conducen, la reglamentación deja la misma claridad que las abuelas y las vecinas. Las medidas de seguridad se duplican cuando una embarazada va al volante, te contamos de qué se trata.

No es que esté prohibido conducir si estamos embarazadas, pero sí debemos cuidarnos más. Los especialistas recomiendan que dejemos de conducir después del segundo trimestre de gestación. Sin embargo, tomando las medidas necesarias, podemos hacerlo hasta el término de nuestro embarazo.

De cualquier manera, se entiende que es durante el primer trimestre cuando existe mayor riesgo. En el comienzo del embarazo, el principal temor es el posible desprendimiento de la placenta. Luego, al final de la gestación el feto podría sufrir lesiones directas y todavía hay riesgo de rotura del útero.  Estos riesgos son potenciales en el momento de conducir, debido a colisión o desaceleración violenta.

¿Es peligroso que una embarazada vaya al volante?

El principal riesgo que corre una mujer en estado de gestación cuando circula en un vehículo, es un eventual movimiento brusco. Como sabemos, ya sea como pasajera o conductora, el riesgo podría ser el mismo, solo que conducir tiene más responsabilidad.

Además, en ocasiones se prohíbe el uso del cinturón en las embarazadas y se exige una distancia mínima de 20 cm del airbag. Estas medidas restringen a la mujer que desea conducir durante su embarazo, porque le impide cumplir con la ley.

Por otro lado, el embarazo puede producir alteraciones en la capacidad de conducir de la mujer. Por ejemplo, esta es afectada por los niveles de azúcar en la sangre, sufre problemas de tensión y su visón puede fallar. En tal sentido, es importante que la gestante se realice chequeos con su especialista para garantizar una buena salud.

En términos generales no es peligroso que una mujer embarazada conduzca, además, no está prohibido por la ley. Sin embargo, los riesgos a los que se enfrenta, merecen mayor precaución antes de decidirlo.

Los inconvenientes más significativos tienen que ver con la seguridad dentro del vehículo y una posible colisión. Aunque todas las personas corremos el mismo peligro al conducir, la gravidez provoca una condición delicada en muchos sentidos.

Medidas de precaución para las embarazadas al volante

Lo primero que debe considerar una mujer embarazada antes de ponerse a conducir es su salud. Se recomienda que chequee su presión y se asegure de no haber presentado mareo o somnolencia previa a la conducción.

Si ha conducido con regularidad durante su embarazo, es importante comprobar que se siente segura hasta el momento. Otras medidas pueden ser:

  • Usar correctamente el cinturón de seguridad, por debajo del abdomen y sobre la ingle, nunca debe apretar el vientre. La banda de la parte superior, se coloca entre los senos y se recomiendan tres puntos de anclaje en el uso de cinturón.
  • Retrocede el asiento para evitar que el volante roce la barriga
  • Es importante que el posa cabeza esté a la altura deseada, de manera que garantice una protección al cuello
  • Viajemos con ropa y calzado cómodos, que no sean ajustados y permitan mayor maniobrabilidad
  • intentemos ubicar la dirección y altura del volante siempre hacia el pecho
  • procuremos descansos regulares cuando los viajes sean largos, estirar las piernas, ir al baño y sentirnos cómodas
  • En caso de accidentes, es conveniente esperar por la ayuda de los especialistas y acudir al médico aun cuando no presentemos lesionas aparentes
  • Mantener siempre activado el airbag
  • Evita conducir si has sentido contracciones
  • Mantener la espalda recta
  • Adecuemos nuestro estilo de conducción a la situación que vivimos. Evitemos acelerar demasiado o de manera brusca, al igual que cualquier maniobra violenta como frenar o girar
  • Después de dar a luz, el médico decidirá cuando podemos retornar al volante.

 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.