Cómo redirigir al niño si va mal en el cole

Aprende algunas claves para entender a tu hijo y redirigirlo y reconducirlo si ves que en el colegio no obtiene los resultados deseados o no llega a explotar toda su capacidad.
Cómo redirigir al niño si va mal en el cole
Pedro González Núñez

Escrito y verificado por el educador infantil Pedro González Núñez.

Última actualización: 21 enero, 2021

Si un chico suspende varias asignaturas durante un trimestre o un curso, lo primero que tenemos que saber es que dramatizar en exceso con la situación no conviene en absoluto. Por eso, vamos a ofrecer algunas claves para redirigir al niño si se observa que no va bien en el colegio.

Las causas por las que un niño suspende muchas asignaturas pueden ser muy variadas. La mayor parte de los padres tiende a creer que es porque los pequeños juegan demasiado y no ponen interés en los estudios. Pero detrás de esta situación puede haber otros motivos subyacentes mucho más escondidos que debemos desvelar.

Aprendamos a redirigir al niño cuando no va bien en el colegio

Es habitual que, tras el primer trimestre, los padres de niños que ven que sus hijos no han sacado las notas esperadas busquen asesoramiento profesional. Es el momento de encauzar la educación del pequeño y, para ello, suelen optar por las academias y las clases de refuerzo.

Niño aprendiendo sobre filosofía gracias al Proyecto Wonder Ponder.

Tenemos que pensar, además de los clásicos comentarios de que el niño no está centrado, estudia poco y demás, que también influyen los constantes madrugones, la acumulación de clases, la obligatoriedad de asistir a ellas y las muchas actividades extraescolares que a veces hacen tantos de nuestros pequeños.

A eso le sumamos las vacaciones, que suelen ser periodos de fiesta en los que los niños tampoco descansan demasiado. Navidad y Semana Santa, por ejemplo, son periodos en los que se sale mucho y se come demasiado, y no siempre de manera saludable.

Al final, vemos que los niños apenas tienen paréntesis en su actividad constante. Por eso es tan importante ser conscientes del entorno en el que se desarrollan los pequeños a la hora de analizar su desempeño académico.

Claves familiares para evitar la frustración innecesaria por los malos resultados escolares

Es fundamental que el ambiente familiar sea correcto para que el niño se motive, se adapte al colegio y no se frustre innecesariamente por los resultados obtenidos en la escuela. Por eso, el hogar del pequeño es el lugar idóneo para que se aplique en clase.

  • Si conoces bien a tu hijo, sabrás cómo ha sido su desarrollo y en qué momento evolutivo y psicológico se encuentra. Hay que tener en cuenta su carácter, su proceso de cambio, la etapa de su vida y lo que le motiva y le ayuda a concentrarse.
  • Estaremos atentos a su entorno personal y social. Tanto el ambiente escolar como las actividades extraescolares determinan su grupo de amigos. Si es motivador, será más sencillo que saque buenas notas.
  • Es más fácil que el niño se implique mejor en sus tareas de la escuela si en casa cumple con sus compromisos y responsabilidades. Por lo tanto, resulta una buena idea definirlos en familia y asegurar que se cumplen.
  • El éxito escolar será resultado de que todo esto se cumpla en un clima familiar que ayude a la motivación del pequeño, que debe entender la importancia de ser responsable y de querer superarse día a día.

Motiva al niño

Es importante aceptar la realidad. El niño no va a mejorar porque sí. A veces, tampoco lo hará por obligación. Por eso, es conveniente aceptar que, si el chico no está motivado, no dará el paso definitivo para mejorar en sus estudios, pero se le puede ayudar desde casa.

Niña haciendo las tareas escolares en casa con la ayuda de su madre, que sigue las claves para redirigir al niño en el colegio.
  • Crea un ambiente y un espacio adecuado para que el niño pueda estudiar cómodamente. De esta forma, será más ordenado, prestará más atención y hará sus labores del colegio cómodamente.
  • Ayuda a definir los trabajos que tienen que hacer para que se sienta acompañado y guiado.
  • Usa la empatía y ponte en su lugar. Puedes ayudarlo a hacer lo que sea, pero prueba a que sean ellos los que lo logren. Actúa como guía y tutor, no lo hagas nunca por ellos.
  • Evita las interrupciones constantes en casa. Que el niño tenga un espacio propio en el que se sienta motivado y sin problemas para estudiar.
  • Sigue de cerca sus progresos, mantenlo animado y echa una mano dentro de tus posibilidades y tiempo libre.

Sobre cómo redirigir al niño si va mal en el colegio

Esperamos que estas claves te sean de ayuda con tu pequeño pero, recuerda: si no encuentras la forma de redirigir al niño si va mal en la escuela, siempre tienes la posibilidad de pedir ayuda a un psicopedagogo profesional para buscar la mejor solución entre todos.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.