¿Qué es la biopsia corial?

En algunos embarazos es necesario descartar enfermedades genéticas en el bebé. La biopsia corial analiza las células de la placenta con esta finalidad.
¿Qué es la biopsia corial?
Leidy Mora Molina

Revisado y aprobado por la enfermera Leidy Mora Molina.

Escrito por Leidy Mora Molina

Última actualización: 14 septiembre, 2021

Cuando el obstetra determina que el embarazo en curso es de alto riesgo para enfermedades genéticas, puede optar por realizar distintos estudios diagnósticos.

Entre ellos, la biopsia corial, que es un procedimiento por medio del cual se obtienen células de una capa de la placenta: el corion. Se utiliza para analizar el ADN del bebé, con el fin de diagnosticar posibles alteraciones en sus genes desde el comienzo del embarazo.

¿Quieres saber cómo se realiza este procedimiento y que implicancias tiene? A continuación, te lo contamos todo. ¡No dejes de leer!

¿Qué es la biopsia corial?

La biopsia corial es una prueba prenatal de tipo invasiva, ya que requiere la toma de muestra de las vellosidades coriónicas placentarias a través de un procedimiento quirúrgico.

El corion es la membrana externa que envuelve el feto dentro del útero y que tiene pequeñas vellosidades o proyecciones de tejido placentario. Tanto esta capa como el bebé tienen la misma información  genética.

A partir de la muestra de vellosidades se pueden analizar distintos aspectos de este material.



¿Qué se detecta a partir de este procedimiento?

ecografia diagnostico imagenes prenatal estudio croosomico genetico prevencion deteccion temprana enfermedades salud perinatal

A continuación, te contaremos qué información especifica del feto se puede obtener a partir de la biopsia corial:

  • Cariotipo fetal: se analiza cada uno de los cromosomas que contienen la información genética, para conocer el número y la estructura de cada uno.
  • Sexo del bebé: gracias al cariotipo, es posible determinar el sexo del bebé por medio del análisis de los cromosomas sexuales.
  • Trastornos metabólicos fetales.
  • Anomalías cromosómicas (como el síndrome de Down o Edwards) y genéticas (como la fibrosis quística).
  • Infecciones congénitas (como la rubéola, el citomegalovirus, la toxoplasmosis, entre otros).

¿Cuándo se realiza?

La biopsia corial es un estudio del primer trimestre de la gestación, y específicamente se practica entre la semana 10 y la 14.

No se indica de rutina en todos los embarazos, sino que se reserva para aquellas situaciones de riesgo para la salud del bebe, como las siguientes:

  • Resultado positivo del cribado del primer trimestre.
  • Antecedentes de anomalías cromosómicas en embarazos anteriores.
  • Sospecha de malformaciones en la ecografía del primer trimestre.
  • Antecedentes personales o familiares de enfermedades genéticas.
  • Madres de edad avanzada.
  • Historia de abortos reiterados.

Así mismo, la biopsia corial puede realizarse para confirmar el diagnóstico preimplantacional cuando se recurre a ciertas técnicas de reproducción asistida.

Contraindicaciones para la biopsia corial

  • Embarazos de menos de 10 semanas, por el riesgo de provocar defectos en las extremidades, como acortamiento de los miembros.
  • Mujeres seropositivas para virus de hepatitis B y C o virus de la inmunodeficiencia humana con carga viral alta.
  • Mujeres con isoinmunización.
  • Amenaza de aborto y sangrado.
  • Infección materna activa, con o sin fiebre.
  • Hematoma intrauterino.
  • Problemas de coagulación materna.

¿Cómo se realiza la biopsia corial?

Este estudio requiere una técnica invasiva, por lo que debe realizarlo un médico en un área libre de gérmenes, como el quirófano.

No requiere una preparación previa y en caso de tomar algún medicamento, es necesario que el obstetra indique cómo proceder con esto.

Se trata de un estudio relativamente corto, que no demora más de 45 minutos.

Para comenzar, se le coloca a la mujer una bata quirúrgica y se la recuesta sobre la camilla en una posición cómoda, que a su vez facilite la prueba. Durante todo el procedimiento se controlan sus signos vitales y se realiza un control ecográfico para evaluar el sitio más apropiado para tomar la muestra.

Existen dos vías para obtener las vellosidades, la vía transabdominal y la vía transcervical. Es importante destacar que en ninguno de los dos casos se toca el saco amniótico del bebé.

medico busca sitio puncion amniocentesis biopsia vellosidades coriales trocar ecografo

Vía transabdominal

El acceso a la placenta es a través del abdomen, con una aguja fina que aspira el material necesario. Para evitar molestias, se coloca anestesia local sobre la piel de la madre y se realiza la asepsia adecuada. Tal como mencionamos anteriormente, la punción se realiza bajo control ecográfico permanente.

Vía transcervical

En este caso se accede a la placenta a través del cuello uterino. Para esto, es necesario realizar una buena asepsia de la zona intima, introducir el espéculo y luego, una pinza fina semirrígida o cánula a través del cérvix.

A través de este elemento se toma la muestra de las vellosidades coriales, siempre con la guía ecográfica. Esta vía es la más utilizada, porque permite tomar una mayor cantidad de tejido.

Generalmente, es un procedimiento indoloro o con molestias leves, como las de la menstruación.

Algunas consideraciones especiales

Si la madre es Rh negativo, debe colocarse una inyección de inmunoglobulina anti-D en las siguientes 72 horas tras la biopsia. Pues existe la posibilidad de que la sangre del bebé se mezcle con la de su madre durante el procedimiento.

Por otro lado, es recomendable que la mujer guarde un reposo relativo por 48 a 72 horas y evite cargar peso, hacer ejercicio físico y mantener relaciones sexuales.

Complicaciones que pueden aparecer luego de la biopsia corial

Aunque las complicaciones posteriores al procedimiento son raras, existe un riesgo mínimo de desarrollarlas. Entre estas destacan las siguientes:

  • Dolor abdominal en la zona de punción.
  • Sangrado vaginal.
  • Infección de líquido amniótico y membrana amniótica (corioamnionitis).
  • Fiebre.
  • Rotura prematura de membranas.
  • Hematoma placentario.
  • Aborto (Menos de 1%).

En la actualidad, estas complicaciones han disminuido considerablemente gracias al avance en las técnicas y en los equipos. No obstante, cualquier procedimiento invasivo tiene sus riesgos. Lo importante es acudir a la evaluación médica en caso de sentir algún malestar.

Cuando los beneficios superan a los riesgos

La biopsia corial es un estudio preciso y confiable, que proporciona un resultado válido en el 99% de los casos. Por este motivo, es de elección para realizar ante la sospecha de enfermedades potencialmente graves en el bebé.

Los resultados preliminares se dan en 48 horas y el resultado definitivo en una semana. Estos son evaluados y entregados por el ginecólogo y por el especialista en genética. Solo en un 2% de los casos se deben corroborar con una amniocentesis.

Por todo esto podemos decir que ante alguna condición de riesgo potencial, los beneficios de hacer esta prueba son incontables. Conversa con tu médico y evacúa todas las dudas.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.