El árbol de las emociones: lo que debes saber

Las emociones en los niños se mueven a gran velocidad. ¿Cómo reconocerlas para comprenderlas mejor?

padre e hijo caminan por el prado campo bajo arbol atardecer

¿Conoces el árbol de las emociones? ¿Sabes cómo se interpreta y para qué puede servirte?

Esta analogía te permite conocer un poco más sobre la inteligencia emocional y aprender cómo acompañar a tus hijos en el proceso de desarrollo de esta habilidad. El modelo tiene diferentes aplicaciones, según la el objetivo que se busque alcanzar. ¡Te invitamos a descubrirlo!

Las partes del árbol y las emociones

Ayudar a los niños a desarrollar su inteligencia emocional no se limita a incentivarlos a demostrar sus emociones y a comprender las de los demás. También requiere brindarles las herramientas necesarias para que logren conectar de manera efectiva con sus sentimientos y los del entorno. Esto se denomina competencia emocional.

Si tomas como base la estructura perfecta de un árbol, puedes ubicar en él las diferentes competencias emocionales:

  • Raíces: aquí se ubican las competencias emocionales subyacentes, que abarcan la comprensión, la percepción y el respeto hacia el otro. También el autoconocimiento, la autorregulación y la autoestima. Sin esta base, no existe ningún árbol.
  • Tronco: esta parte conecta la visión de uno mismo (raíces) con la relación con los demás, a través de las competencias emocionales básicas. Entre ellas, la flexibilidad, la capacidad de adaptación, la forma de reaccionar emocionalmente, la creatividad, la empatía, la iniciativa y el optimismo.
  • Hojas, ramas y frutos: es la zona de los resultados y reúne las competencias emocionales ejecutivas, que se refieren al trabajo en equipo, la comunicación, la gestión del estrés, la delegación, el asertividad, la negociación y la escucha activa.

nino pequeno y padre plantan arbol en tierra bosque

“Si supiera que el mundo se acaba mañana, yo hoy, todavía, plantaría un árbol”. -Martin Luther King-

Los niños necesitan un árbol de emociones equilibrado

El desarrollo de las competencias emocionales de los niños comienza en el hogar y está muy ligado al estilo de crianza que adoptan los padres. En este sentido, las conductas extremas, como ignorar las emociones o desaprobarlas, no construyen un entorno saludable para los pequeños.

En cambio, es posible llevar a cabo acciones para contribuir a que el árbol de las emociones de los hijos crezca sano y robusto. Estas son las siguientes:

  • Fortalecer la base (sus raíces): dejar a los niños reconocer sus propios sentimientos y emociones.
  • Enseñarle a conectar con los demás, a través de las emociones: esto favorece el desarrollo de una estructura sólida (tronco), con relaciones interpersonales genuinas y confiables.
  • Escuchar atentamente sus emociones y atender a sus necesidades: en línea con esto, es importante también explicarles que para alcanzar ciertos logros (hojas y frutos) hay que respetar algunos límites. Por ende, ciertos comportamientos emocionales no son apropiados para mantener una buena relación con los demás.

Si puedes aplicar estos pasos, estás lista para fomentar el desarrollo emocional estable de tus hijos. A futuro, esto influirá positivamente en su salud física, psicológica y social.

Otras formas de aplicar el concepto del árbol de las emociones

Un árbol significa mucho en sí mismo, ya que nos da una imagen de fortaleza y de robustez. También es un símbolo de la vida, como el árbol de Navidad.

Por este motivo, el árbol de las emociones se utiliza mucho en las escuelas para que los niños cuelguen de sus ramas algunas tarjetas con sus sentimientos y pensamientos. Esto es una forma de compartir sus emociones con los demás y entender que todos pasan por los mismos momentos de aprendizaje y crecimiento.

Otro ejemplo es el árbol de las emociones de Pip Wilson, un psicólogo británico que creó unos graciosos dibujos de personajes (blobs), ubicados en distintas partes de un árbol. Según sus estudios, cuando un niño elige un determinado blob, revela cuáles son sus habilidades emocionales y cómo se siente en relación a sí mismo y a los demás.

A través de este ejercicio es posible detectar problemas emocionales en los niños, como el caso del niño introvertido que no puede expresar sus emociones ante las distintas situaciones de estrés. O también, descubrir si un niño tiene rasgos de líder, es un gran amigo, una persona demasiado optimista o un soñador.

Acerca del árbol de las emociones

concepto conservacion cuidado vida brote arbol manos padres

En resumen, un árbol de las emociones es una herramienta capaz de poner de manifiesto muchas cuestiones de los niños, pero son los padres los que deben ayudar a que crezca en armonía.

Tu tarea como madre consiste en consolidar las raíces, fortalecer las ramas y multiplicar los frutos y las hojas, para dar a tus hijos el abrigo emocional necesario para su desarrollo integral.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

Scroll al inicio