El aparato reproductor masculino

El aparato reproductor masculino contiene un circuito de tejidos que permiten la formación y transporte de espermatozoides desde los testículos hasta el interior de la mujer.

El aparato reproductor masculino se define como el conjunto de órganos y tejidos que tienen como función la reproducción humana y el placer sexual del hombre. Está dividido en dos grupos: los órganos genitales internos y los órganos genitales externos.

Este sistema también está encargado de la secreción de hormonas como la testosterona, que favorecen la espermatogénesis. Además, ayuda a la eliminación de los desechos líquidos corporales a través de la micción.

Es importante conocer como es la anatomía y fisiología de la reproducción masculina, para entender a detalle todo el proceso de concepción y embarazo. A continuación, te explicamos todo lo que debes saber sobre este sistema. Continúa leyendo.

¿Cómo está formado el aparato reproductor masculino?

El aparato reproductor masculino se divide en dos grandes grupos. El primero es el que está integrado por los órganos internos y el segundo el que está compuesto por los órganos externos. Veamos sus estructuras a detalle.

Órganos internos

Se pueden distinguir varios órganos internos en el aparato reproductor masculino, cuya función es la de producir y entregar los espermatozoides y el semen, además de la secreción hormonal. Entre estos se encuentran los testículos, los conductos deferentes, las vesículas seminales, el epidídimo, el conducto eyaculador, la uretra, las glándulas bulbo uretrales, la próstata, los cuerpos cavernosos y esponjosos.

Los testículos

Los testículos se encuentran dentro del escroto y están suspendidos por el cordón espermático. En el interior de ellos se encuentran alrededor de 250 compartimientos, en los cuales se ubican los túbulos seminíferos, lugar donde ocurre la espermatogénesis (proceso de formación de los espermatozoides).

Una publicación de StatPearls señala que los testículos actúan como órganos endocrinos y exocrinos, en el sentido de que son responsables de la producción de andrógenos (como la testosterona) y de la producción y transporte de espermatozoides.

El epidídimo

Es un tubo largo, estrecho y enrollado situado en la parte posterior de cada testículo. Tiene como función madurar y almacenar los espermatozoides. Conecta los testículos con los vasos deferentes.

Los vasos deferentes

Es un tubo largo y delgado de paredes gruesas que tiene como función transportar el esperma desde el epidídimo hasta el conducto eyaculador, que a su vez desemboca en la uretra.

Uretra

La uretra es un conducto muscular que cumple funciones del sistema urinario y reproductor. Se encarga de transportar orina y semen. El semen se eyacula por la uretra.

Glándulas accesorias

Secretan sustancias que nutren, lubrican y preservan los espermatozoides. Son las encargadas de formar el líquido seminal, qué junto con los espermatozoides, conforman el semen.

  • Próstata: Esta genera ciertas sustancias que al unirse con el semen producido por las vesículas seminales favorece la supervivencia de los espermatozoides que acceden al sistema reproductor femenino.
  • Vesículas seminales: Producen sustancias ricas en azúcares y prostaglandinas, que nutren a los espermatozoides.
  • Glándulas bulbouretrales: Conocidas también como Glándulas de Cowper, producen el líquido preseminal que lubrica la punta del pene y además, neutralizan la acidez vaginal.

Órganos externos

Los órganos externos del aparato reproductor masculino están compuestos por el escroto y el pene, los cuales se encuentran ubicado en la base de la pelvis.

El escroto

Es el saco de piel donde se encuentran suspendidos los testículos. El escroto mantiene la temperatura de los testículos, lo que permite que los espermatozoides se formen y conserven.

Esto lo hace a través de un mecanismo de contracción o relajación; es decir, se relaja cuando hace calor y se contrae cuando hace frío, con el fin de aumentar o reducir la temperatura interna.

El pene

Es el órgano copulador, cuya función adicional es la de la excreción urinaria. A través del pene, los espermatozoides pueden ser depositados en el interior de la vagina mediante la eyaculación.

Esta función es posible cuando el pene se encuentra erecto durante el acto sexual. El pene consta de las siguientes estructuras:

  • Glande: Es la cabeza del pene. Está cubierto por una capa de piel llamada prepucio.
  • Eje: Es el cuerpo del pene. Consta de dos cuerpos cavernosos y un cuerpo esponjoso, estructuras que permiten las erecciones.
  • Uretra: El tubo por el que sale la orina y el semen.
  • Raíz: Base del pene que está unida a la pelvis.

Funciones del aparato reproductor masculino

Como vimos, los órganos del aparato reproductor masculino, se encargan de producir, almacenar y eyacular los espermatozoides, además de la producción del semen, el líquido que transportará a los espermatozoides hacia el exterior.

En este sentido, otra de las funciones de este sistema es el de liberar los espermatozoides en el aparato reproductor femenino durante el coito para lograr la fecundación. Todo esto lo logra gracias a la secreción de las hormonas sexuales masculinas dentro de los testículos.

¿Cómo trabaja el aparato reproductor masculino?

El funcionamiento de los órganos del aparato reproductor masculino es orquestado por la interacción hormonal. La hormona que cumple funciones claves en la reproducción masculina es la testosterona, que se encarga del desarrollo de las estructuras de este sistema a partir de la pubertad para que estos cumplan su función sexual.

Un estudio publicado en la Revista Venezolana de Endocrinología y metabolismo detalla que el hipotálamo, la hipófisis y los testículos forman un sistema integrado que es responsable de la secreción adecuada de las hormonas masculinas y la espermatogénesis.

Así mismo, detalla que los testículos requieren la estimulación por parte de la hormona folículo estimulante (FSH) y hormona luteinizante (LH) que son secretadas en respuesta a la hormona liberadora de gonadotropina hipotalámica (GnRH).

Todo este proceso hormonal ayuda producir y regular la testosterona, que a su vez interviene en la producción de los espermatozoides, así como también, en el deseo sexual que provoca la erección y eyaculación.

Enfermedades más comunes del aparato reproductor masculino

Existen diversas enfermedades que pueden comprometer el buen funcionamiento del sistema reproductor masculino. Entre las más comunes se encuentran:

  1. Varicocele: El varicocele consiste en la dilatación de las venas de los testículos. Se trata de una de las afecciones más comunes que puede afectar a hombres jóvenes. Se debe tratar a tiempo por medio de la opción quirúrgica, porque además de resultar dolorosa, también puede tener consecuencias en la fertilidad del hombre.
  2. Hipertrofia prostática: Suele presentarse en hombres de la tercera edad, y consiste en una inflamación de la próstata. Al encontrarse muy cerca de la uretra y vejiga, puede ocasionar problemas para orinar. De hecho, esta patología suele ser el principal síntoma por el que los hombres acuden al especialista.
  3. Epididimitis: Es la inflamación del epidídimo. La causa de este malestar suele ser infecciones bacterianas e infecciones de transmisión sexual ITS, como clamidia o gonorrea. Un artículo publicado en Cureus detalla que la clamidia y bacterias como la E. coli fueron los microrganismos encontrados en urocultivos de hombres que acudieron a urgencias por epididimitis y orquitis.
  4. Hernia testicular: Ocurre cuando una porción del intestino protruye a través de las paredes debilitadas de los músculos y genera una protuberancia en la ingle o escroto. Suele ser consecuencia de hacer fuerzas desmedidas al cargar peso.
  5. Hipogonadismo: Es cuando los niveles de la testosterona son muy bajos en hombres producto de una disfunción testicular. Se acompaña de síntomas como disfunción eréctil, pérdida de la libido, depresión, aumento de peso, fatiga, entre otros.
  6. Cáncer: Aparece con la formación de tumores. El cáncer más frecuente del sistema reproductor masculino es el de próstata, seguido del cáncer testicular.

La salud del aparato reproductor masculino

La práctica de hábitos saludables ayuda a mantener la salud del sistema reproductor masculino y además, favorece la fertilidad. Por ello, es recomendable llevar una alimentación balanceada, realizar ejercicios físicos y mantener bajos niveles de estrés, aún más, cuando la pareja está en la búsqueda de un bebé.

Por último, conocer cómo está conformado, cómo funciona y las enfermedades que más afectan el aparato reproductor masculino permite esclarecer algunas dudas que pueden surgir cuando se planifica un embarazo. De igual manera, es muy importante que acudir al médico para los chequeos pertinentes y asegurarse de que todo está en orden.

Bibliografía

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