9 cuidados higiénicos básicos del bebé
Todos los que somos padres, sobre todo si somos primerizos, hemos tenido muchas inquietudes con respecto a cómo hay que cuidar al bebé. El recién nacido, principalmente en sus primeras semanas de vida, requiere unos cuidados higiénicos básicos para su bienestar.
Ya que no puede decirnos qué le molesta, hay que tener en cuenta que no tener unos cuidados higiénicos básicos le pueden ocasionar rozaduras del pañal, arañazos por las uñas o incluso que tenga mocos y al tomar el pecho o el biberón no pueda respirar.
Cuidados higiénicos básicos del recién nacido
Es importante llevar a cabo estos 9 cuidados higiénicos básicos para asegurarnos del bienestar de nuestro niño.
1. Si es un bebé recién nacido, hay que cuidarle el ombligo para que no se infecte
Hay que evitar que el trozo de cordón umbilical quede dentro del pañal mientras que no se haya caído, puesto que la humedad puede aumentar las probabilidades de infección. Tampoco hay que mojarlo. Es importante que esté siempre limpio y seco. Y cuando se haya caído, echarle un poco de alcohol de 70º y clorhexidina, que es un desinfectante, hasta que cicatrice.
2. Es muy importante el cambio de pañal para evitar las irritaciones o rozaduras
Hay que estar atentos al pañal, sobre todo cuando el bebé haga caca. Se debe de quitar inmediatamente, puesto que la caca de los bebes es muy ácida y les produce irritaciones.
3. Limpieza del culete del bebé
Siempre que estemos en casa y podamos, es bueno en el cambio de pañal lavar el culete con agua y jabón. Si estamos fuera, podremos usar unas toallitas. No obstante, cada vez que se pueda, es mejor el agua.
4. Limpiar la nariz del bebé
Podemos usar una solución salina, suero fisiológico, o bien un aspirador nasal o peras de goma. También podemos aprovechar el baño con agua caliente para que se reblandezcan y aseemos bien toda esta zona de la cara.
5. Baño diario
Aa los niños les relaja mucho y además hacerlo siempre a la misma hora antes de cenar. También les proporcionará un mejor descanso a la hora de dormir. Es importante tener cuidado con la temperatura del agua, debe estar entre los 35 y 37º. Ten todo lo que necesites cerca, puesto que es muy básico no descuidarte ni siquiera para coger un bote de jabón, ya que un solo segundo puede ser fatal.
6. Cortar las uñas
Cuando son pequeños, tienen las uñas muy finitas y largas, y como ellos agitan mucho los brazos, se pueden arañar la cara. Por eso hay que cortarlas con unas tijeras de punta redonda para no pincharles.
7. Limpiar la boca del bebé
Aunque no tenga dientes, es importante que tenga la boca y lengua limpias. Con un paño o gasa húmeda, se le pasa por las encías y lengua del bebé. Y cuando le empiezan a salir los dientes, pero todavía es pronto para lavárselos con un cepillo, también podemos recurrir a la gasa húmeda y pasársela por las encías, lengua y dientes.
8. Limpiar los oídos
No es recomendable usar bastoncillos. Los pediatras lo desaconsejan, puesto que sin querer podemos producirles alguna lesión en el conducto auditivo. Es mejor pasar un paño húmedo por la parte externa del oído y después secarlo.
9. Limpiar los ojos
Los bebés crean mucosidad en los ojos. Por eso es muy frecuente la constante presencia de legañas y lágrimas. Esta suciedad se puede limpiar con toallitas estériles. Y si al final deriva en una conjuntivitis, es bueno limpiar los ojos con manzanilla y un algodón.
Los cuidados higiénicos son muy importantes para cualquier persona, puesto que la limpieza de nuestro cuerpo evita la proliferación de bacterias que pueden dañar nuestra salud.
Pero si es importante para los adultos, para un niño pequeño o un bebé lo es más, puesto que ellos tienen menos desarrolladas las defensas. Una mala higiene, además de producirles irritaciones en la piel, puede provocarles infecciones que podrían afectar gravemente su salud. Por esta razón es fundamental mantener siempre unos cuidados higiénicos básicos.