5 señales de que tu hijo te ama

La relación entre una madre y un hijo es una de las más importantes que ambos experimentarán a lo largo de su vida. El vínculo entre ellos es único y los sentimientos que pueden desarrollar el uno por el otro son incomparables. Sin embargo, la conexión no está exenta de retos, obstáculos y dificultades.

Los conflictos del día a día y los miedos a no estar actuando bien como madre pueden generar preocupación. Sin embargo, tu hijo te ama y, a continuación, te mostramos algunas señales a través de las cuales puedes detectarlo.

No todos los adultos expresamos afecto de la misma forma; Tampoco lo hacen los niños. Cada infante posee su propio lenguaje del amor y mientras algunos prefieren el contacto físico, otros pueden optar por mostrar cariño con palabras, gestos o acciones más sutiles. Estos son algunos ejemplos de cómo tu hijo puede estar diciéndote lo importante que eres para él.

Algunas señales de que tu hijo te ama

Quiere pasar tiempo contigo

Algunos niños son más demandantes y otros más independientes, pero, en cualquier caso, es fácil detectar cuándo un niño disfruta pasando tiempo contigo. Tú eres su compañera preferida de juegos y te pide con frecuencia que le dediques tu atención y tu tiempo. Esto puede hacerte sentir agobiada en ocasiones, especialmente cuando tienes otras tareas que atender, pero es una clara señal de que tu hijo te ama.

Por otro lado, para él tu presencia y tu compañía son regalos superiores a cualquier otra alternativa. ¿En alguna ocasión tu hijo ha preferido dejar de jugar para ir contigo a la compra o para preparar juntos la comida? La actividad no importa tanto si puede realizarla contigo.

Te cuenta sus secretos

¿Tu hijo siente la confianza de contarte todo lo que acontece en su vida? ¿Te habla de cómo le ha ido en el colegio, de qué desea y a qué le teme? ¿Comparte contigo sus preocupaciones, ideas y ocurrencias? Entonces, no dudes de cuánto te quiere, ni de la gran labor que estás haciendo como madre.

Cuando un niño se abre emocionalmente a un adulto es porque se siente amado y aceptado incondicionalmente, porque se siente protegido. Seguramente tu pequeño sabe que, incluso si ha cometido un error, tú eres su lugar seguro.

Te ofrece regalos

Los niños no tienen poder adquisitivo, pero eso no impide que puedan obsequiar a sus seres queridos con los mejores presentes. Coloridos dibujos, cartas, flores cogidas del parque, una piedra con forma de corazón o una concha especial encontrada en la playa… Los infantes saben como nadie apreciar el valor y la belleza de las pequeñas cosas de la vida y no dudan en compartirlas con aquellos a quienes más aman.

Te ayuda y te cuida, una de las señales que demuestran que tu hijo te ama

Todos los menores pueden sentir pereza a la hora de colaborar en las tareas del hogar, incluso tratar de posponer ese momento. Sin embargo, si tu hijo te ayuda a tender la ropa, poner el lavaplatos o preparar la cena sin que se lo pidas, es porque disfruta de tu atención y valora tu reconocimiento.

Además, es posible que cuando estés cansada tenga sencillos gestos como taparte con una manta o dejarte su peluche preferido. ¿Hay alguna muestra de amor más pura y genuina?

Busca el contacto físico

No todos los niños recurren al contacto físico para expresar afecto, pero si este es el lenguaje del amor de tu hijo, probablemente te besará y abrazará con frecuencia, te dará la mano por la calle o se recostará en tu hombro mientras veis una película. Además, es posible que desee dormir contigo y lo disfrute enormemente cuando se lo permitas. Al fin y al cabo, al estar en contacto contigo se siente tranquilo y resguardado.

¿Crees que tu hijo te ama?

En todas las familias puede haber conflictos, discusiones o discrepancia, y esto no afecta al amor que se tienen sus miembros entre sí. Sin embargo, si sientes que los conflictos y malentendidos son constantes y que la relación con tu hijo no es la más adecuada, trata de buscar una solución.

Puede que el pequeño se sienta incomprendido, invalidado o poco tenido en cuenta y, a la larga, acciones como los gritos o los castigos pueden hacer un gran daño emocional al niño y perjudicar el vínculo entre padres e hijos. Presta atención a las señales de tu pequeño y trata de crear una relación de confianza en la que podáis hablar de forma sincera y respetuosa acerca de los aspectos a mejorar.