4 alimentos para combatir el estreñimiento en el embarazo
Es posible experimentar estreñimiento en el embarazo de forma más frecuente que de costumbre. Esto se debe a que los cambios a nivel morfológico pueden dificultar el tránsito intestinal. Por este motivo, puede ser necesario incluir en la dieta alimentos para combatir tal condición.
De todos modos, es importante que estos productos entren dentro del espectro de comestibles que puede consumir una mujer embarazada. En este estado, es crucial cuidar la pauta dietética con el objetivo de evitar la ingesta de tóxicos que puedan perjudicar al feto.
Alimentos para combatir el estreñimiento en el embarazo
Los siguientes alimentos son ideales para combatir el estreñimiento en el embarazo, ya que ayudan al mejorar el tránsito y hacen que las deposiciones más fáciles.
Ciruelas
Las ciruelas suponen una fuente de nutrientes esenciales y de fibra, clave para prevenir el estreñimiento, ya que consigue incrementar el volumen del bolo fecal, volviendo el tránsito más eficiente. Así lo evidencia un estudio publicado en British Journal of Nursing .
Hay que tener en cuenta que la mayor parte de las guías contra los problemas intestinales se posicionan a favor de modificar los hábitos de vida. Implementar mejoras en la dieta, así como un incremento de la actividad física, resulta beneficioso.
Ahora bien, durante el embarazo puede ser necesario moderar el nivel de ejercicio, para no afectar negativamente al feto. Hay que optar siempre por una actividad poco agresiva y moderada que mantenga el organismo en funcionamiento.
Aceite de oliva
Las grasas saludables pueden ser elementos clave para mejorar la lubricación del bolo intestinal, haciendo que este descienda de forma óptima a través del tubo. El aceite de oliva en crudo es uno de los lípidos recomendados. Además, se trata de un producto que ayuda a prevenir el desarrollo de patologías complejas.
Asimismo, los ácidos grasos omega 3 que se encuentran en su interior consiguen contribuir al desarrollo óptimo del cerebro del bebé. También cuentan con un marcado carácter antiinflamatorio.
Incluso es posible plantear el uso de enemas de aceite de oliva para evitar los episodios de estreñimiento crónico y severo. Así lo evidencia un estudio publicado en la revista Journal of Pediatric Surgery . De todos modos, este remedio es más frecuente en niños y es importante consultar primero con el médico.
Agua
Aunque muchas veces se pase por alto, una buena hidratación es clave para asegurar la lubricación del bolo, lo que ayuda a prevenir el estreñimiento.
De acuerdo con una investigación publicada en Jornal de Pediatria , es fundamental consumir agua mineral de forma diaria, en un volumen de al menos litro y medio.
Del mismo modo, resulta crucial evitar el consumo regular de bebidas con gas. Esta clase de productos puede incrementar las molestias a nivel intestinal, además de generar descontrol sobre las glucemias.
Patatas cocidas
Está claro que el consumo de fibra es un pilar importante para combatir el estreñimiento en el embarazo. En este sentido, las patatas cocidas pueden ser de gran ayuda. Son capaces de aportar pocas calorías, pero sí carbohidratos de elevada calidad. De este modo, se asegura el suministro energético.
Recuerda que siempre es recomendable evitar la ingesta de fritos y de rebozados. Someter a los alimentos a altas temperaturas puede modificar el valor nutricional de los mismos. Se generan compuestos de desecho, como la acrilamida o las grasas de tipo trans, que impactan negativamente sobre el estado de salud. También resultan nocivos para el feto.
Mejora la dieta para combatir el estreñimiento en el embarazo
Es posible combatir el estreñimiento en el embarazo modificando una serie de hábitos de vida, entre ellos la dieta. Ten en cuenta que la planificación de un menú saludable conlleva muchos beneficios a nivel de salud. No solo garantiza el buen desarrollo del bebé, sino que mejora el tránsito intestinal de la madre.
Asimismo, trata de mantenerte activa, en la medida de lo posible. El ejercicio ligero o de media intensidad ayudará a que el bolo fecal descienda de manera óptima a través del tubo, lo que se traduce en deposiciones sencillas y más frecuentes. Además, el sistema cardiovascular también se verá beneficiado.
Si incluso mejorando los hábitos de vida no experimentas un cambio significativo a nivel intestinal, consulta con un especialista. En ocasiones es necesario hacer uso de la farmacología para evitar el problema.
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