¡Vas a ser mamá!

¡Vas a ser mamá!

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 30 abril, 2020

El test ha dado positivo. Estás embarazada. ¡Vas a ser mamá! Respira. Cuenta hasta tres: uno, dos, tres. Sí, vas a ser madre.

Al obtener el resultado y comprobar que efectivamente estás embarazada, el mundo parece detenerse. Este momento resulta tan impactante que se nos fija en la memoria y a partir de entonces no se olvida. Entonces no hay vuelta atrás.

¿Y ahora qué? A continuación te contamos qué debes saber para prepararte para lo que va a venir después de mirar tu test.

Desde el primer momento en que somos conscientes de nuestro embarazo, nuestro cuerpo y mente cambian. Comienza un viaje lleno de emociones en el que no todo va a ser color de rosa, pero sí inolvidable. Hablando claramente: ser mamá es una experiencia que nos marca de por vida.

¡Vas a ser mamá! exclaman los más emocionados. Familiares, amigos y allegados se congregan a nuestro alrededor para visitarnos y regalarnos esas sonrisas de emoción y expectación pura. En nuestro interior, muchas veces sentimos tantas cosas a la vez que no sabemos cómo etiquetarlas.

La expectación genera también cierta incertidumbre y esta, a su vez, genera cierta mezcla de curiosidad, ansiedad, alegría, y mucho más.

¿Qué siento cuando voy a ser mamá?

Las hormonas se disparan. Esto significa que nuestro cuerpo sabe que está creciendo una nueva vida en nuestro interior, así que nuestro sistema hormonal se vuelca en protegerlo. Tanto revoloteo hormonal nos hace sentirnos de mil maneras diferentes. Y sí, tranquila, es normal.

En primera instancia, al sentir que estamos ante un camino desconocido, que caminamos a oscuras y sin saber muy bien a dónde vamos, nos produce cierto temor.

El miedo a lo que va a pasar son la antesala a las múltiples dudas que comenzaremos a plantearnos. Incluso, la expectativa nos hace sentir inseguridad acerca de si seremos capaces o no de llevar el embarazo a término, si sabremos cuidarnos bien durante su duración, etcétera. De igual modo nos preocupamos por cómo va a ser nuestra vida a partir de ahora.

También nos sentimos dichosas. La alegría de saber que hay un bebé dentro de nosotras es… indescriptible.

Por un lado queremos contárselo al mundo entero para que sepa lo afortunadas que somos y por otro lado, queremos vivir al máximo el momento en la intimidad. Acercarnos al silencio, meditar en él acerca de nuestro bebé, acariciarnos el vientre y soñar… Soñar hasta que sentimos sus pies por primera vez moviéndose en nuestro interior. Soñar hasta quedarnos dormidas de sólo pensar en lo bonito que es que dos corazones latan verdaderamente juntos.

En fin, todo un abanico de sentimientos.

¿Y cómo puedo evitarlo? No puedes. Es imposible aplacar tantas cosas a la vez. ¿Y para qué hacerlo? ¿Para qué contener a la naturaleza?

No hay manera de ser una madre perfecta. Hay un millón de maneras de ser una buena madre.

-JILL CHURCHILL-

Queremos que sepas que las emociones son intensas durante el embarazo. Esta es nuestra nueva etapa en la que nuestras capacidades se amplían al máximo. Nuestros sentidos se maximizan y nos convertimos en seres renovados, aptos para sobrellevar este reto.

Te advertimos que vas a pasar por momentos en los que las hormonas te van a traicionar. A veces, al enfadarte sentirás que vas a descontrolarte. Pero, calma y cordura, todo pasará. Aunque te parezca mentira, vas a salir adelante con esto.

Tú puedes hacer de esta experiencia la mejor

¿Qué le pasa a mi cuerpo cuando voy a ser mamá?

Una de las cosas que más frustración puede provocarte es tu cuerpo y todos los cambios que va a tener.

En un principio, no habrá mucho más allá que un fuerte dolor en los pechos, una mayor sensibilidad y algún que otro dolor en el vientre (debido a los estiramientos que va a ir sufriendo el útero) pero no desesperes, estos cambios son normales. Luego ser irán sumando otros cambios que son necesarios e inevitables.

Cuando empieces a ganar peso pero no veas todavía la “barriguita de embarazada”, te sentirás algo insegura, ya que parece que ganas peso, pero todavía no es tan evidente que sea por la presencia de un bebé. Tranquila, es normal sentirse así. Recuerda que con el paso de los días esos cambios tendrán un por qué.

Los principales cambios que vas a notar al prepararte para ser mamá son:

  • PRIMER TRIMESTRE: Más cambios internos que visibles para los demás. Crecimiento de pechos, náuseas y cansancio.
    • CONSEJO: ante las náuseas hay muchos remedios caseros que puedes consultar con tu médico. Evita los olores fuertes, ya que aumenta la sensibilidad olfativa.Descansa si lo necesitas, pero sin olvidar que el ejercicio es un gran aliado durante todo el embarazo.
  • SEGUNDO TRIMESTRE: las náuseas parecen disminuir en este periodo; el bebé crece y presiona tus órganos internos, así que tendrás más ganas de orinar; también puedes tener problemas de estreñimiento y aumentará la temperatura de tu cuerpo. Además comenzarás a retener más líquidos. Es normal que tus encías sangren durante el cepillado.
    • CONSEJO: haz visitas al dentista. Date largos paseos para mejorar la circulación y evitar todo lo posible la retención. Las duchas frecuentes te aliviarán la subida de temperatura. Usa crema hidratante en abundancia, ayudará a mantener a raya las estrías. Aceites corporales como el aceite de almendras pueden ayudarte.
  • TERCER TRIMESTRE: llegamos al final del embarazo. El cuerpo ya está totalmente “acomodado” al bebé. Es la etapa más incómoda para ti, ya que el peso y las molestias han aumentado.
    • CONSEJO: descansa todo lo que puedas. Al acercarse el momento del parto aumentan los miedos, el estrés y la ansiedad. Recuerda, buscar el mayor equilibrio emocional te ayudará. Ante el “síndrome del nido” no te preocupes, es normal querer tenerlo todo preparado para la llegada de nuestro bebé.
Si vas a ser mamá debes aprender a cuidarte

Más consejos

Recurre a actividades que te ayuden con a manejar tus emociones asertivamente. La gestión de tu mundo emocional será muy importante a partir de ahora para que puedas liberar tensiones y mantener tu bienestar. Practicar  yoga (un ejercicio además muy adecuado para el embarazo), las técnicas de respiración y de meditación que te enseñarán a la par del ejercicio físico optimizarán tu estado de salud y cuidarán muy bien de ti en general.

También te recomendamos todas aquellas prácticas de mindfulness. Dibujar o colorear también son muy buenas opciones. Hay madres que incluso optan por escribir un diario o un cuaderno. A muchas mujeres les hace ilusión escribir acerca de sus expectativas, preparativos, etcétera, con la ilusión de poder mostrárselo a su futuro hijo/a en alúgn momento.

Escribir es una actividad muy terapéutica que te ayudará a liberar todo lo que sientes y que, si decides conservar, lo escrito será un recuerdo de cómo fue tu embarazo.

Ser mamá va a ser una de las mayores experiencias de tu vida. Ayúdate a ti misma a convertirla en la mejor.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.