Niños con mucho carácter: características y cómo tratarlos

Los niños con mucho carácter tienen unas características que les hacen diferentes de los demás. Esto no es nada malo, pero es necesario conocer cómo abordarlos mejor.
Niños con mucho carácter: características y cómo tratarlos
Mara Amor López

Revisado y aprobado por la psicóloga Mara Amor López.

Escrito por Mara Amor López

Última actualización: 03 enero, 2022

Cada persona es un mundo y lo mismo aplica para los niños. Los hay con mucho y con poco carácter, pero esto no tiene por qué agobiarnos a la hora de criarlos. Por el contrario, hemos de ver este rasgo como una oportunidad para descubrir la mejor forma de educarlos, sin dejar de respetar su naturaleza. Pues tanto el carácter como la personalidad de los niños son aspectos muy variables.

Muchos padres se pasan todo el tiempo intentando cambiar esa personalidad fuerte de sus hijos, porque simplemente no son como les hubiera gustado que fuesen. Pero con esto, lo único que se consigue es perder la conexión con los pequeños, dañar su autoestima y hacerles pensar que algo en ellos no está bien y deben cambiarlo para ser queridos.

Lo más importante en la crianza de los niños es poder adaptarse a su forma de ser para inculcarles las mejores enseñanzas. Aquí te explicamos las características de estos pequeños con mucho carácter y cómo tratarlos.

“Tus hijos necesitan que pongas todo de ti para que los ames tal como son, no para que pases todo el tiempo corrigiéndolos”.

-Bill Ayers-

Niños con mucho carácter: sus principales características

Lo primero que tienes que saber es la diferencia entre un niño con mucho carácter y aquél que hace un berrinche en un momento concreto. No es lo mismo tener una rabieta un día que tenerla todos los días. Entonces, ¿quieres saber cuáles son las características de estos niños de personalidad fuerte? No dejes de leer.

1. Siempre van a contra corriente

Niño al que le gusta jugar solo en el parque.

Los niños con mucho carácter saben muy bien qué, cómo y cuándo quieren algo. Y por mucho que les digamos o que vean a los demás hacer, ellos llevan su propio ritmo.

Son niños a los que les gusta explorar y no suelen tenerle miedo a nada, por lo que necesitan de la supervisión constante de sus cuidadores.

2. Pueden parecer tercos

No es terquedad, sino atención y pasión a lo que hacen en un momento concreto. No tenemos que hacer que siempre acepten nuestras creencias ni lo que los demás digan. Lo importante es dejarlos a ellos que nos cuenten qué es lo que quieren, pues acabarán sorprendiéndonos.

3. Tienen criterio propio

Puede que intentemos que lleven una determinada ropa o que le elijamos nosotros las actividades extraescolares, pero ellos tienen su criterio propio.

Debemos dejarles que elijan sus cosas, según sus gustos y sin dejar de tener en cuenta sus opiniones. Son niños que tienen que hacer las cosas a su modo y permitírselos no es ser blandos con ellos.

4. Lo quieren hacer todo solos

Si un niño que intenta hacer algo por él mismo y no quiere que lo hagas por él, es probable que se trate de un pequeño con mucho carácter. En este caso, lo mejor es darle su autonomía y permitirle que haga las cosas apropiadas para su edad, siempre a su lado para cooperar con él cuando sea necesario.

Puedes darle varias opciones para que elija y que así sea más fácil controlar lo que hace. Esto puede resultar tedioso, pero es la mejor manera de que el niño confíe en sus padres y que sienta que él es quien toma sus decisiones.

Niño vistiéndose solo gracia a 'el árbol de los logros'.

Consejos para tratar a los niños con mucho carácter

Si tenemos un niño o una niña de carácter fuerte no debemos verlo como algo complicado. Simplemente, necesitamos adaptar las estrategias de crianza a su forma de ser. Aquí te damos algunos consejos para tratar con estos niños de fuerte temperamento.

1. Explícales las razones

No tenemos que limitarnos a decirles lo que deben o no hacer, sino explicarles las razones del porqué. Un niño que entiende por qué debe o no hacer una determinada cosa, probablemente modifique su comportamiento. ¡Inténtalo!

2. Usa el juego para controlar su mala conducta

Todos sabemos que el juego es bueno en muchos aspectos, pero además, es uno de los mejores medios para utilizar en la crianza de los niños con mucho carácter.

A través de los juegos y con mucho sentido del humor, podemos lograr que los peques hagan ciertas cosas o dominen un poco su mala conducta en las distintas situaciones.

3. No les grites ni los compares con nadie

Hay que evitar gritarles a los pequeños siempre y no compararlos con los demás (hermanos, primos, amigos o vecinos). Pues cuando hacemos esto, lo único que conseguimos es hacerles sentir ofendidos e incrementar su enfado o rabieta.

Lo mejor y más sano es establecer unos límites claros y no tomarnos su fuerte carácter como algo malo, porque no lo es.

4. Enséñales a cooperar

Otra forma de tratar con un niño con mucho carácter es enseñarle a cooperar e implicarlo en lo que hacemos. De esta forma, sentirá que le tenemos en cuenta y aprenderá el valor de ayudar y de colaborar con los demás.

Es una forma de involucrarnos todos y en lugar de decirle que haga las cosas solo, unirnos a él. Por ejemplo, “vamos a lavarnos los dientes” y todos nos lavamos los dientes, o “vamos a recoger” y todos recogemos. De esta forma, dejará de ver la propuesta como una orden y la aceptará mejor.

5. Empatiza con ellos

La empatía es una habilidad que todos deberíamos implementar a la hora de tratar con cualquier persona. Es una cualidad que nos posibilita ponernos en el lugar del otro y entender mejor las situaciones por las que pasa o cómo las vive.

Es fundamental que no le quites importancia a los sentimientos ni a los pensamientos de tus hijos. Escúchales e incítales a que te cuenten lo que les pasa.

Madre siendo sobreprotectora, una de las cosas que nunca debes hacer por tus hijos.

6. Dales siempre varias opciones

Una crianza muy estricta con los niños de mucho carácter es muy propensa al fracaso. Es más, puede ocasionar justo lo contrario de lo que se desea conseguir. Además, la conducta se vuelva mucho más provocadora con el paso del tiempo.

Por esta razón, siempre que podamos, debemos darles a elegir entre varias opciones para que participen de las decisiones. Se puede negociar con ellos de esta manera y así, el resultado no habrá sido una imposición nuestra, sino su propia voluntad.

Sobre los niños con mucho carácter debes saber

Hay niños con mucho carácter y esto no tiene por qué ser algo malo, sino que debemos verlos como personas que dirigen toda su atención y energía a lo que hacen.

Son pequeños con criterio propio, a los que les gusta experimentar su propia vida, sentirse independientes y autónomos. Todo esto es un conjunto de enormes virtudes para cultivar y encauzar.

No porque los niños tengan un carácter fuerte la crianza tiene que ser dificultosa. Solamente, tenemos que probar las distintas formas de acercarnos a ellos, explicarles los por qué con amor y tenerles mucha paciencia. Con estas claves es muy posible alcanzar los mejores resultados.

“Mientras tratamos de enseñar a nuestros hijos todo acerca de la vida, nuestros hijos nos enseñan de qué trata la vida”.

-Angela Schwindt-


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