Mochilas colgantes para llevar al bebé

Para aportar comodidad y seguridad a los padres cuando llevan al bebé, así como para potenciar el contacto con el pequeño, las mochilas colgantes son una opción ideal. Hay algunas pautas en su uso que es conveniente conocer.
Mochilas colgantes para llevar al bebé
María José Roldán

Revisado y aprobado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 19 agosto, 2020

El transporte del bebé de un lado a otro ya no debe ser un problema para ti. Gracias al progreso que se da en materia de accesorios útiles infantiles, existen las mochilas colgantes para llevar al bebé. En el mercado hay una amplia variedad y oferta de ellas; conozcamos algunas.

Cada vez son más los padres que optan por usar mochilas colgantes para llevar al bebé. Se han vuelto un accesorio sumamente útil, que permite cargar al recién nacido de una manera confortable y cómoda a la vez.

Además, este tipo de mochilas suelen fomentar la relación entre padres e hijos durante los primeros años de vida de los pequeños. Por estas razones, es importante conocer los beneficios y como se usa cada una de ellas.

Beneficios de las mochilas colgantes para llevar al bebé

Las mochilas portabebés tienen múltiples beneficios; uno de los más importantes es el contacto del bebé con el cuerpo de sus padres. Esto permite desarrollar una relación mucho más cercana con ellos.

El uso de las mochilas colgantes para llevar al bebé es una tendencia muy utilizada, que permite a los padres transportar al bebé de una manera segura. A su vez, este tipo de accesorio permite que los padres estén más atentos a las necesidades que presenta su bebé en cada situación.

Etapas en las que se recomienda su uso

Teniendo en cuenta la seguridad y la postura del bebé, las mochilas colgantes están diseñadas para portar bebés desde su nacimiento. Hay muchas opciones en el mercado, y cada una está hecha a medida, considerando la seguridad y postura del recién nacido.

Desde el punto de vista afectivo y también sensorial, tanto padres como bebés se ven beneficiados por el uso de mochilas portabebés. Sobre todo en los primeros días de vida, cuando es el primer contacto del bebé con su entorno más cercano.

Los beneficios del porteo repercuten tanto al niño como a la madre

Mejor posición para llevar los bebés en mochilas colgantes

Hay muchas dudas sobre cuál es la mejor posición para el bebé si se le lleva en una mochila colgante. ¿Es mejor mirando a los padres o mirando hacia adelante? Lo cierto es que, cuando el bebé nace, posee una musculatura muy débil en el cuello y la columna. Por lo tanto, el riesgo de tener lesiones por un movimiento brusco es aún mayor.

A causa de la fragilidad del pequeño, durante el período de los primeros tres meses, lo ideal es que la posición sea mirando hacia los padres. Además, la mochila debe cubrir la zona de la nuca para que estabilice la cabeza.

Poco después, entre los tres y seis meses del bebé, este comienza a adquirir progresivamente mayor fuerza muscular para sostener su cabeza y mantener el tronco con firmeza. Incluso comienza a desarrollar la visión lejana y la curiosidad por conocer el mundo que lo rodea. Durante este período y en adelante, se puede colocar al bebé mirando hacia adelante, siempre y cuando la mochila tenga todas las medidas de seguridad para que se sienta cómodo.

 

Las mochilas colgantes para llevar al bebé deben ser cómodas para los pequeños y sus padres.

Consideraciones a tener en cuenta la momento de comprarlas

Para que la mochila colgante realmente favorezca el contacto entre los padres y bebé, es necesario que esta sea segura y cómoda. Estas dos características son fundamentales. La mochila debe estar diseñada específicamente para proteger al bebé, asegurando la adecuada posición y sujeción del pequeño. Es fundamental evitar zonas de compresión o tiras que puedan provocar algún tipo de lesión al bebé.

“Durante el período de los primeros tres meses, lo ideal es que la posición sea mirando hacia los padres”

Igualmente importante es que la mochila colgante tenga un buen soporte para el portador, principalmente para repartir de manera adecuada el peso y evitar la fatiga muscular. Lo recomendable es que las tiras del hombro sean anchas y acolchonadas y que además dispongan de un apoyo lumbar.

Básicamente, la mochila colgante debe ser confortable siempre. Para el bebé, ajustable a su medida y con algún tejido apropiado para cada tipo de clima. También cómoda para el padre o madre, que sea fácil de poner y quitar, con cierres sencillos de encajar y soltar pero que sean seguros y no se puedan soltar solos o por acción de los bebés.

En conclusión, las mochilas colgantes para llevar al bebé son uno de los mejores accesorios que existen en el mercado. Resultan muy prácticas y útiles, ya que permiten portear al bebé en todo momento y de la manera más cómoda.

Por lo que, si quieres portear a tu bebé, no dudes en hacerte con una de estas mochilas. Son buenas para tu espalda y buenas para tu bebé. Si está bien colocado no afectarás a su desarrollo físico ni tendrá molestias de ningún tipo. Lo mejor de todo, es que podréis pasar más tiempo juntos y disfrutar de las ventajas de estar tan cerca el uno del otro. ¡Vuestro vínculo se volverá indestructible! 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.