Hipocondría en niños y adultos

Las personas hipocondríacas sienten una preocupación frecuente, infundada y profunda sobre su salud. Es importante comprender sus riesgos y ser responsables para evaluar los síntomas que podamos sentir.
Hipocondría en niños y adultos
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Fernando Clementin

Última actualización: 10 mayo, 2020

La hipocondría es la preocupación excesiva, infundada y persistente por la propia salud. Si bien es cierto que es bueno preocuparse por la salud hasta cierto punto, un hipocondríaco exagera esta preocupación al punto de creer que padece una enfermedad que, en realidad, no tiene.

Incluso hay casos de personas que ha somatizado los síntomas de la afección que cree tener. Esta situación puede ocurrir tanto en niños como adultos.

El temor a la enfermedad es algo normal. De hecho muchas veces sentimos síntomas similares a los que se asocian con determinada afección. Sin embargo esto no significa que la tengamos. Por ejemplo, el sentir dolor de cabeza no quiere decir que tengamos migraña, gripe o fiebre.

Quienes padecen hipocondría sienten este miedo de manera extrema. Su impulso los lleva a consultar constantemente fuentes de salud o acudir con demasiada frecuencia al médico. Ellos piensan que pueden tener alguna enfermedad grave y que todo podría empeorar si no se tratan de inmediato.

Cómo darse cuenta si padece de hipocondría

Como señalamos previamente, es normal que alguien se preocupe por su salud si siente algún síntoma en su cuerpo. Asimismo genera ansiedad el momento de esperar los resultados de los análisis o de un testo médico. Esto es perfectamente entendible y a casi todos nos pasa.

Sin embargo, para las personas con hipocondría, esta ansiedad se convierte en motivo de suspensión de la rutina normal. De pronto, dejan de asistir al trabajo, a las clases de gimnasia, a los eventos sociales y a reuniones con amigos. Aquí sí, ya se puede hablar de un trastorno de ansiedad por enfermedad, el término más reciente para referirse a la hipocondría.

Algunos síntomas de las personas hipocondríacas:

  • Convicción o temor profundo de padecer una enfermedad basado en interpretación personal de los síntomas.
  • Interrupción de estilo de vida normal por culpa de esta preocupación.
  • El temor se extiende pese a la realización de análisis médicos y consultas con especialistas.
  • En casos graves, se presentan cuadros de ansiedad o, incluso, delirio.
La hipocondría hace pensar que se padece una enfermedad cuando no es así.

¿Cómo superar un cuadro de hipocondría?

Los psicólogos aseguran que la hipocondría es una de las principales razones por las que las personas deciden acudir a ellos.

Por lo general, las personas hipocondríacas desoyen los diagnósticos de profesionales que no encajan con lo que ellos “presienten”. Su mente está tan cerrada a una idea que simplemente desconfían de todo aquello que lo contradiga.

En estos casos, recurren a otros profesionales. Así, de cada consulta, extraen aquello que termina por reforzar lo que ellos suponen. Es decir, hacen una recopilación selectiva de datos para sustentar su idea. Esto, al fin de cuentas, solo logra magnificar su ansiedad.

¿Cómo superarla? Aquí les brindamos algunos consejos para evitar caer en este autosabotaje a la salud:

  1. Consultar con un médico y confiar en él. De todos modos, no está mal buscar una segunda opinión si lo consideramos necesario. Pero debe ser con el fin de encontrar mayor seguridad, no por mera desconfianza o por pensar “que el doctor nos miente”.
  2. Dejar de buscar síntomas continuamente o alarmarnos ante la mínima aparición de uno. Muchos son transitorios y se irán cuando menos lo notemos.
  3. Comprender que la enfermedad es una condición inevitable. Nadie es inmortal y tampoco inmune a todo. En algún momento de nuestras vidas, nos enfermaremos. Y alguna vez seguramente será algo grave. No obstante con los avances tecnológicos actuales, prácticamente toda afección tiene una cura eficiente.
  4. Cuida tu salud. Si temes enfermarte, lo mejor que puedes hacer es prevenir. Entonces, abandona los malos hábitos, haz ejercicio físico y sigue una dieta equilibrada. A la larga, verás que es el mejor médico que podrías encontrar.
Psicólogos y psiquiatras afirman que un gran número de sus pacientes padecen hipocondría.

El buscador de Internet, aliado y enemigo

Los pacientes con hipocondría encuentran en Internet un vicio informativo en lugar de una fuente de información. Cabe destacar que, es imposible que cualquier portal, por más personalizado que se presente, realice un diagnóstico a distancia sin atender a las particularidades del paciente.

Lo único que se logra acudiendo a la web en búsqueda de una solución es toparnos con aquello que buscamos y que tanto tememos. Lo más probable es que arribemos al peor de los diagnósticos, por más improbable que sea. De esta manera la ansiedad y los miedos se multiplican exponencialmente.

Se recomienda evitar acudir a los sitios en línea para buscar síntomas y asociarlos con los que sentimos. La única vía potable es la consulta con un profesional de la medicina.


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