Cada hijo es un nuevo desafío

Cada hijo es un nuevo desafío
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 13 marzo, 2019

No todos los hijos son iguales, sino que cada uno de ellos es una obra de arte en potencia. Ya que cada hijo es un nuevo desafío, ¿qué puedes hacer para educarlo de manera única y especial?

Los hijos son un bendición en el hogar pero también cada uno es un ser único y especial que necesita atención, y si tienes más de un hijo notarás que son muy diferentes uno del otro. Hasta padres con hijos mellizos y trillizos notan las similitudes en su apariencia pero también que cada uno tiene una personalidad, gustos y metas diferentes.

No hay por qué abrumarse ya que en realidad los retos hacen la vida más placentera y eso es lo que imponen los hijos. Pero al final todos desean lograr el mismo objetivo en la vida: convertir ese niño en un hombre profesional y exitoso.

Diferencia vs Igualdad

Ahora bien, una creencia muy generalizada es que ser justos con los hijos significa darles a todos los mismos beneficios, ponerles a todos los mismos límites o plantearles a todos las mismas exigencias. Muchos padres buscan así ponerse en una actitud neutral frente a los hijos, porque creen que hacer ciertas diferencias se podría interpretar como favoritismo.

Cada hijo es distinto al otro, desarrolla distintas habilidades, presenta distintas sensibilidades, intereses, aptitudes. De hecho, cada hijo tiene diferentes ritmos o formas de aprendizaje. La naturalidad de esto radica en el simple hecho de que cada hijo es un ser humano distinto, único e irrepetible. Por eso cada uno de ellos es un nuevo desafío para los padres.

Ya que cada hijo es un nuevo desafío, ¿cómo puedes lograr criar a cada hijo de forma diferente y única?

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Crianza de un niño y una niña

Suele ocurrir que en los padres o madres exista un anhelo muy íntimo y secreto de que el hijo venidero sea de un sexo u otro, pero muchas veces ese deseo está marcado por la cultura y el valor que se le atribuye a cada sexo.

Hay estudios sobre lactancia materna y cuidado temprano que muestran que los niños varones reciben un mejor amamantamiento que las niñas. Tal vez sin darse cuenta, muchas madres actúan pensando en que por ser niños necesitan más comida que las niñas. Luego, a lo largo de su crecimiento, suele ocurrir que las niñas desde temprano son incorporadas a las tareas de la casa y se hacen cargo de sus hermanos en ausencia de la madre.

Además la educación de un niño es de trabajador y responsable del cuidado de la casa, por lo general, los padres desean darle las herramientas desde temprano para que aprenda labores y el valor del trabajo. Para las niñas es diferente: las madres desean que ellas sean unas princesas por eso se las cuida y protege más, se les enseña el valor de ser madre y lo importante de los valores morales.

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Hijos con necesidades especiales

A veces los hijos son diferentes por su sexo, personalidad o intereses pero además pueden ser diferentes por tener alguna necesidad o cuidado especial. Estos niños representan un reto en la crianza, necesitarán más ayuda y atención personalizada y tal vez su independencia de los padres tomará más tiempo.

A muchos niños con necesidades especiales se les llama discapacitados, pero la verdad es que tal vez una de sus habilidades no se ha desarrollado al igual que los demás niños y por eso sobre desarrollan otras. Por ejemplo; los niños sordos desarrollan la capacidad de memorizar y su vista se amplía al igual que sus reflejos. 

Ahora como padres deben lograr un equilibrio entre desafiar a sus hijos con estas necesidades a hacer progresos en su adaptación contra exigirles algo que no pueden lograr. Asumir una actitud pasiva frente a estos niños les puede hacer sentir a ellos que no son buenos para nada, y que sus padres no tienen expectativas. Por el contrario, ser demasiado exigentes puede deteriorar la relación entre los padres y el hijo. 

Sugerencias

  • No menospreciar a ninguno, da detalles específicos de qué amas de cada uno.
  • Nunca se debe decir “mi hijo preferido” o “tú eres la oveja negra de la familia”.
  • Da amor único a cada uno y no les des las mismas cosas por igual.

 


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.