El hábito del perdón y la compasión en los niños
Perdonar es un acto de buena fe, significa dejar atrás lo malo y abrir paso a lo bueno; mientras que la compasión se trata de comprender el sufrimiento de los demás. ¿Te parece complicado enseñarle esto a un niño?. Pues en este post te daremos algunas herramientas para que tu pequeño desarrolle el hábito del perdón y la compasión.
Como siempre decimos, muchas de las acciones de nuestros hijos comienzan a darse con nuestro ejemplo. Tengamos siempre en cuenta que los padres somos los modelos a seguir, nos imitan queramos o no. Nuestros hijos constantemente nos observan y evalúan, su comportamiento también depende del nuestro.
Sabemos que el perdón y la compasión no son conceptos tan sencillos y simples como parecen, pues al intentar ejecutarlos intervienen pensamientos, la inteligencia emocional y hasta prejuicios. Para enseñarle a tu pequeño a practicar el hábito del perdón y la compasión debes comenzar por ti mismo.
Liberarse y sanar de aquello que nos hizo daño en el pasado, saber perdonar, nos hará tener la fuerza para cultivar en nuestros hijos este hábito. Fomentar ambos elementos: el de perdonar y el de sentir compasión, son tareas que se enseñan en casa y que requieren de paciencia, comprensión y aceptación.
Los niños necesitan saber perdonar y ser perdonados
Que tus hijos aprendan a perdonar y ser perdonados es tan necesario como aprender a expresarse o relacionarse con su entorno. Es importante que los niños entiendan el valor de pedir perdón y el de ser perdonados. Enseñarle a asumir sus errores es uno de los primeros pasos y que en este caso será de gran ayuda.
Cuando un niño pide disculpas, inmediatamente se produce una reacción y todo queda atrás. Pero es necesario inculcarle que solo debe hacerlo cuando sea un sentimiento sincero y de corazón, genuino. Que pida perdón cada vez que comete algún acto indebido y sepa que con disculparse bastará, no es el escenario ideal.
Explicarle las razones o motivos por los cuales es necesario pedir una disculpa, les hará conocer el verdadero valor del perdón. Saber pedir perdón los hará niños más responsables y honestos.
Por otra parte, si tu hijo desarrolla el hábito de perdonar es seguro que la empatía y la paz interior le acompañarán a lo largo de su vida. Dar un perdón es un acto que se traducirá en hijos felices, estables emocionalmente, libres de rencores y malos recuerdos.
Despertar la compasión
Enseñar a tu pequeño a ser compasivo, a ser sensible ante situaciones de dificultad también es un elemento primordial en su crecimiento. Está comprobado que mientras más empáticos y considerados sean los niños, mejores personas serán en un futuro. Introducir este hábito es algo que se hace de a poco y desde temprana edad.
La mejor manera de instruirlos en el hábito de la compasión es que sean conscientes de su entorno. Enséñale a tu pequeñito que hemos de aceptar a las personas tal y como son. Este es un ejercicio que le ayudará a comprender que todos los seres humanos somos diferentes y que no siempre las circunstancias nos favorecen a todos por igual.
Guía a tu niño para que desarrolle empatía con las personas mayores o con aquellos que presentan alguna enfermedad. Aunque no pueda remediar esas situaciones sí podrá tener una palabra o algún gesto amable para con ellos.
Lástima versus compasión
Conversa con tu pequeño para que comprenda que sentir pena por alguien enfermo o incluso por un animal abandonado no está mal. De hecho es un sentimiento absolutamente válido. Pero en sus manos puede encontrar la posibilidad de ir más allá: brindar una ayuda.
Enseñarle la diferencia entre la compasión y la lástima también es muy importante. Desde la lástima se puede sentir tristeza por el que sufre y continuar, pero desde la compasión se acciona para tenderle la mano o cambiar la situación del que padece o está en desventaja.
La familia es el ambiente perfecto para aprender a perdonar, ser perdonado y tener compasión por los semejantes. Procura el compartir y la convivencia de tus hijos con sus círculos más cercanos y encontrarás allí las situaciones ideales que le ayudarán a fortalecer su carácter bajo los preceptos de la compasión y el perdón.
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Salguero, M. J. C. (2011). Importancia de la inteligencia emocional como contribución al desarrollo integral de los niños/as de educación infantil. Pedagogía magna, (11), 178-188.
- ACEVEDO OCHOA, V., MANGIA FARFÁN, R. M., MARTÍNEZ GARCÍA, M. D. C., ROLLANO QUIROGA, L., & SÁNCHEZ GALVÁN, P. (2019). Desarrollando la compasión: programa de inteligencia emocional interpersonal aplicado para niños (DCIEIN).