Cómo hablar cosas difíciles con niños

Si tienes hijos con edades comprendidas entre 7 y 12 años, descubre cómo hablar cosas difíciles con ellos.
Cómo hablar cosas difíciles con niños
María José Roldán

Escrito y verificado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 05 octubre, 2020

Debido a que los niños entre los 7 y los 12 de edad pueden leer y escribir, se exponen a contenido inapropiado para su edad con mayor frecuencia, pero los niños más pequeños en este rango todavía son un poco inseguros sobre lo que es real y lo que no lo es. Para muchos padres, hablar cosas difíciles con niños puede parecer abrumador, pero en muchas ocasiones es algo necesario.

A medida que los pequeños adquieren habilidades de pensamiento abstracto, experiencia en el mundo real y la capacidad de expresarse, pueden lidiar con temas difíciles y comprender diferentes perspectivas.

Padres aprendiendo a hablar cosas difíciles con sus niños.

Hablar cosas difíciles con niños y preadolescentes: de 7 a 12 años

Los preadolescentes se están separando de sus padres emocionalmente. Están entrando en la pubertad e interactúan con los medios de manera más independiente, entran en contacto con videojuegos violentos, pornografía, noticias angustiosas y discursos de odio. Por ello, n ecesitan poder hablar las cosas sin sentir miedo o vergüenza.

Para poder hablar cosas difíciles con niños y preadolescentes, es buena idea que tengas en cuenta algunos aspectos. De esta manera, te resultará más sencillo hacerlo y, además, tendrás en cuenta su edad evolutiva en este caso (de 7 a 12 años).

Esperar el momento correcto

A esta edad, es muy probable que los niños vengan a ti si han oído hablar de algo aterrador, aunque, en ocasiones, eres tú quien debe dar el primer paso.

Descubrir lo que saben para hablar cosas difíciles con niños

Pregúntales a tus hijos qué han escuchado o si sus amigos en la escuela están hablando sobre algo. Responde a sus preguntas de manera simple y directa, pero trata de no explicar en exceso, pues podría hacer que se asusten más.

Crear un espacio seguro para la conversación

Puedes decir algo como: “Estos temas son difíciles de hablar incluso para los adultos. Solo hablemos sobre lo que te sientas capaz. No me enfadaré y quiero que te sientas libre de preguntar lo que quieras”. Así, tu hijo sentirá la confianza suficiente para poder expresarse.

Proporcionar contexto y perspectiva

Los niños necesitan comprender las circunstancias en torno a un problema para darle un sentido completo. Para un tiroteo masivo, por ejemplo, puedes decir: “La persona que hizo esto tenía problemas en su cerebro que confundían sus pensamientos”.

Para los delitos basados en la raza, intenta decir algo como: “Algunas personas creen erróneamente que las personas de piel clara son mejores que las personas de piel oscura. Sin la información correcta, a veces cometen delitos que creen que están justificados, pero no lo están”.

Abordar su curiosidad para hablar cosas difíciles con niños

Si tu hijo se topa con material adulto en internet, tal vez sea hora de encontrar contenido que le permita aprender sobre temas más maduros de manera apropiada para su edad.

Puedes decirle cosas como: “La pornografía en internet es algo que algunos adultos miran. Pero no se trata de amor o romance y puede darte una idea equivocada sobre el sexo. Si quieres aprender más sobre este tema, puedo darte algunos libros para que veas y podamos hablar más si tienes preguntas”.

O si tu hijo quiere explorar temas serios con más profundidad de la que tú puedes proporcionarle, puedes decirle algo como: “Busquemos algunas fuentes de noticias que ofrezcan eventos actuales escritos para niños”.

Ser sensible a las emociones y al temperamento de los niños

Nunca se sabe lo que puede desencadenar emociones intensas en tu hijo. Dile cómo te sientes y pregúntale cómo se siente él. Puedes decir algo como: “Me siento enfadada cuando sé que alguien ha resultado herido”.

Padre hablando con su hijo con empatía.

Fomentar el pensamiento crítico

Haz preguntas abiertas para que los niños piensen más profundamente sobre temas serios. Pregunta cosas como: “¿Qué escuchaste? ¿Qué te hizo pensar? ¿Por qué piensas eso?”. Para los niños mayores, puedes preguntar: “¿Crees que las familias de otros orígenes verían esto de la misma manera que nosotros?”.

Buscar lo positivo para hablar cosas difíciles con niños

Puede que no haya un lado positivo en cada nube, pero trata de ser optimista. Puedes decir cosas como: “B usquemos formas con las que podamos ayudar”. Intenta inculcar en tus hijos una mente positiva o mentalidad de crecimiento para que aprendan a ver el lado bueno de las cosas.

Esperamos que estos consejos para hablar sobre cosas difíciles con niños te sirvan a la hora de dialogar con los ya no tan pequeños de la casa y puedas resolver mejor cualquier duda o temor que les surja.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.