Para aquellos a los que les encanta disfrutar de la lectura, las bibliotecas son mundos fantásticos que abren puertas a cientos de historias y vidas diferentes. Además, desde pequeños, se les debe inculcar a los niños la importancia de acudir a las bibliotecas y de utilizar y prestar el material que en ellas se ofrecen.
Estas visitas a las bibliotecas deben adquirirse como un hábito para fomentar en el niño la lectura y la posibilidad de seguir desarrollando estas visitas a medida que vaya creciendo.
Son numerosas las familias que acuden a ellas y disfrutan del material que allí se presta. Los libros son los más reclamados por el público, sin embargo, también existen otros artículos que gustan mucho a los más pequeños, como pueden ser las películas infantiles.
Entre tanto material que se presta, puede ser que, en alguna ocasión, alguno de ellos se pierda o se extravíe. Por ello, hoy os contamos un poco más sobre los aspectos que debes de tener en cuenta si pierdes un libro de la biblioteca y cómo actuar.
Aspectos que debes tener en cuenta si pierdes un libro de la biblioteca
1. Revisa todos los espacios de la casa con calma
Aunque puede parecer algo obvio, en numerosas ocasiones, esto puede pasarse por alto. Por ello, lo primero que debes hacer si piensas que has perdido un libro de la biblioteca es revisar todos los espacios en los que puede estar. Recuerda que los niños pueden haberlo utilizado y es muy probable que lo hayan dejado en un sitio difícil de encontrar.
2. Son cosas que pueden ocurrir
Estropear un libro, un CD o un DVD, o también perderlo, no son cosas que se hagan voluntariamente. Por ello, si te ocurre alguna de ellas, debes mantener la calma.
En el primero de los casos, es decir, si se estropea, debes comprobar si este se puede arreglar de una forma fácil y sencilla. Si ves que esto no es posible de manera rápida, trata de evitarlo, ya que el daño puede ser aún mayor. Una vez que has buscado y no has encontrado el libro, o ves que el daño no tiene reparación, debes pasar al siguiente aspecto.
3. Acudir o llamar a la biblioteca para comunicarlo
Sin duda alguna, en la serie de cosas a tener en cuenta si pierdes un libro de la biblioteca esta es la más importante. Aunque, nuevamente, puede parecer un aspecto obvio, mucha gente prefiere no volver nunca a la biblioteca para no tener que pasar un mal rato explicando lo sucedido o, en ciertas ocasiones, tener que pagar el daño.
Como ya hemos dicho anteriormente, esto es una cosa que puede ocurrirle a cualquier persona, por lo que el personal bibliotecario lo entenderá.
Además de entenderlo, te dará instrucciones sobre cómo reparar el daño. Como ya hemos dicho en el punto anterior, a veces, los libros pueden ser reparados si el daño es menor y el personal bibliotecario está formado para ello.
Más aspectos a tener en cuenta si pierdes un libro de la biblioteca
4. Reponer el material
Si en vez de deterioro tu caso es por pérdida del libro, tendrás que reponerlo. Para ello, el personal de la biblioteca te indicará los datos de la edición del libro para que compres un nuevo ejemplar.
Si esto sucede con un libro nuevo, no tendrás ningún problema para encontrarlo. Sin embargo, existen ediciones de libros o incluso títulos como tal que ya están descatalogados.
¿Esto qué significa? Que el libro ya no está en circulación en ningún punto de venta, un aspecto que suele ser común sobre todo en la literatura infantil por todos los títulos que se editan. En este caso, el personal de la biblioteca te dará la posibilidad de comprar otro libro que ellos mismos te indiquen.
5. ¿Qué pasa si pierdes el libro porque te lo han robado?
Por desgracia, a menudo se sufren robos de cosas materiales. Si por alguna razón en ese momento llevabas en tu bolso o mochila un libro de la biblioteca, antes de acudir a la biblioteca, debes de ir a poner una denuncia a la policía.
Una vez que la denuncia está implantada, tienes que acudir con ella a la biblioteca para demostrar la veracidad de la información. En este caso, es la única ocasión en la que es la propia biblioteca la que repone el libro y no la persona que lo pierde.