Técnicas de relajación para niños según su edad

Aunque parezca exagerado, las técnicas de relajación para niños son sumamente importantes. Los infantes también viven situaciones y entornos complejos y muchas veces, carecen de habilidades para controlar lo que sienten.

Como madre es fácil analizar las situaciones de manera diferente. Crees que la vida de adulto es la única cargada de estrés y te olvidas de que tu niñez pudo haber sido muy compleja, sobre todo a nivel emocional.

Un punto importante respecto de los niños es que muchas de las emociones que sienten son totalmente nuevas para ellos. Por otra parte, la capacidad de analizarlas todavía está en proceso de desarrollo.

Por lo anterior, los niños también necesitan relajarse, aprender a controlarse y sobre todo, a gestionar este tipo de sensaciones.

Técnicas de relajación para niños

La niñez es la etapa de la vida en la que se forman las bases para el resto de la existencia. Por tal razón, las reacciones emocionales pueden ser exageradas o mal gestionadas si no se las acompaña adecuadamente.

En sí esto no es culpa de los niños, pues es de esperar que la reacción ante algo nuevo sea poco acorde a la situación. Algo similar ocurre con las situaciones de estrés, las cuales los hace experimentar enojo, ira, desesperación y muchas cosas más.

En el caso de que esto les ocurra, lo mejor es implementar algunas técnicas de relajación para niños, orientadas según su edad.

Técnicas de relajación para infantes de 0 a 3 años

¿Bebés estresados? Si es la primera vez que experimentas el hermoso proceso de crianza probablemente te sorprenderás de esto. Sin embargo, los niños pequeños suelen ser más impacientes de lo que piensas.

La falta de autonomía e independencia es el factor principal para que un bebé no pueda relajarse por sí solo y por eso, debemos ayudarlo.

Combinar música con masajes relajantes es una de las mejores técnicas de relajación para niños menores de 3 años. Sin embargo, te aconsejamos recurrir primero a la música, justo en el momento de la rabieta o unos instantes posteriores a la misma.

Respecto al masaje, sobresale como una buena alternativa en los momentos de paz y tranquilidad. Procura utilizar aceites especiales para la piel del bebé o cremas neutras, como medio de desplazamiento de tus manos.

El principal beneficio del masaje es que disminuye la ocurrencia de crisis de estrés o de impulsos desenfrenados. De esa manera lo indica una revisión sistemática publicada en la revista de la Facultad de Medicina de la Universidad de la Sabana, en Colombia.

Sin embargo, el masaje y la musicoterapia pueden trabajar de la mano. Lo ideal es encontrar el ritmo que le guste a tu pequeño y esto lo determinas por medio de la lectura de sus gestos y sus reacciones ante la música.

Técnicas de relajación para niños de 4 a 7 años

El desarrollo psicofísico de los niños a estas edades indica que no solo las capacidades físicas han evolucionado. El aspecto emocional ha ganado mayor terreno, pero aún presentan dificultades a la hora de tranquilizarse.

Con el fin de relajar a los niños mayores, se recomienda implementar actividades lúdicas. Los ejercicios concretos pueden resultar aburridos y monótonos, pero los juegos tienen mejor aceptación.

Ten en cuenta que las actividades lúdicas que implementes deben hacer énfasis en el manejo de la respiración. Un ejemplo claro es el juego de la ‘hormiga y el elefante’.

El objetivo de esta actividad se centra en emular la respiración de un animal pequeño como la hormiga o uno grande como el elefante. Los niños pueden escoger el animal que más les guste para llevar el ejercicio a cabo.

Técnicas de relajación de niños entre los 8 y los 12 años

A mayor es la edad, más avanzado es el control sobre las emociones. Por eso, los niños comprendidos en este rango de edad conocen más acerca de su estado emocional y cuáles son detonantes que los pueden desestabilizar.

Dicho autocontrol favorece a las técnicas de relajación para niños, las cuales pueden ser un poco más avanzadas que las anteriores.

Un ejemplo claro de ello es la práctica de actividades deportivas o disciplinas de mayor concentración, como el yoga o el Pilates. Ambas combinan el manejo corporal con la respiración y la concentración.

Otras técnicas que pueden implementarse en niños de 8 a 12 años son las actividades manuales, pues no solo contribuyen a mejorar el estado de ánimo, sino que además estimulan la relajación y la tranquilidad.

Cabe recordar que por ser un poco mayores, todavía se entretienen con las actividades lúdicas y recreativas. Por eso, no deben pasar a un segundo plano.

Técnicas de relajación para niños: ¿qué beneficios aportan?

Por obvias razones este tipo de técnicas se encargan de relajar a los niños o de mitigar los efectos del estrés ante situaciones complejas. Más allá de eso, también contribuyen a mejorar otros aspectos relevantes de la vida de los infantes. Por ejemplo, la calidad del sueño, la distensión de los músculos y el bienestar.

Sin embargo, las técnicas que expusimos anteriormente son solo algunos ejemplos con los cuales puedes empezar. Pero puedes recurrir a un especialista en esta área para solicitarle orientación acerca de otras alternativas.