Protege a tus hijos de los efectos negativos de las pantallas electrónicas

Las pantallas electrónicas pueden tener efectos negativos en la salud de los niños. ¡Protege a tus hijos!
Protege a tus hijos de los efectos negativos de las pantallas electrónicas
María José Roldán

Escrito y verificado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 12 febrero, 2020

Es un habitual ver en las familias cómo los niños pasan más tiempo del indicado mirando pantallas. Les gusta pasar el rato jugando a juegos electrónicos y, como ven a sus padres pasar horas y horas delante de las pantallas, no ven nada malo en hacerlo ellos. Aunque la realidad es que hay que proteger a los niños de los efectos negativos de las pantallas electrónicas.

Las pantallas electrónicas, como todo el mundo sabe, deben usarse con moderación, siempre bajo la vigilancia de los padres y, sobre todo, poniendo normas y límites, tanto en su uso como en el tiempo de exposición. Pueden generar efectos negativos en la salud de los niños, tanto a nivel físico (sedentarismo, obesidad, problemas visuales), como a nivel emocional (nerviosismo, aislamiento, ansiedad).

Cómo proteger a los niños de los efectos negativos de las pantallas electrónicas

Si tu hijo se queja de ardor en los ojos, debes revisar la cantidad de tiempo que pasa con los dispositivos. Aquí hay algunos consejos que te ayudarán para cuidar su salud ocular, aunque es necesario que también tengas en cuenta otros aspectos importantes, como hacer ejercicio físico de manera regular y la socialización, tanto con amigos como con la familia.

Limita el tiempo de uso de las pantallas electrónicas

Limita la cantidad de tiempo que tus hijos pasan viendo la televisión. Limita el tiempo de otros aparatos a una hora al día para niños pequeños y dos horas al día para niños que van a la escuela. Divide esta asignación en dos o tres sesiones para reducir la fatiga visual. Es necesario que seas firme en esto porque los niños no encuentran el momento de acabar con el tiempo de pantallas.

Niños mirando pantallas electrónicas, tanto móviles como tablets.

Anima a los niños a jugar al aire libre

Los gadgets fomentan hábitos sedentarios que son malos para el cuerpo y la mente. Anima a los niños a pasar un tiempo al aire libre para actividades que les obliguen a moverse e interactuar con otros niños. Jugar al aire libre con el perro u otros niños es más divertido que ver una película de animación por enésima vez. Pasar tiempo al aire libre también ejercita la visión a larga distancia y reduce las posibilidades de miopía.

No uses aparatos como niñeras

Mantener a tus hijos ocupados con aparatos o la televisión puede permitirte hacer lo que quieras en paz, pero es una mala idea. En cambio, mantenerlos ocupados con alternativas más saludables, como juguetes creativos, libros para colorear o libros de cuentos es una idea mucho más acertada.

Asegúrate de que tu hijo duerma lo suficiente

Los niños deben dormir unas 10 horas al día. El sueño permite que los ojos se recuperen de la tensión. Pídeles que tomen descansos regulares y que parpadeen con frecuencia. Para evitar la resequedad de los ojos, pídele a tu hijo que parpadee dos o tres veces cada vez que le duelan los ojos.

Reduce la fatiga visual

La fatiga visual puede reducirse tomando pequeños descansos para mirar algo que no sea la pantalla. La mayoría de los ópticos abogan por la regla 20-20-20. Toma un descanso cada 20 minutos y concéntrate en algo a unos 20 metros de distancia durante 20 segundos. Esto ayudará a reducir la fatiga visual y evitar que los ojos se irriten.

Niña utilizando el móvil.

Asegúrate de que los niños mantengan la distancia correcta de las pantallas electrónicas

Mientras usa un ordenador u otro dispositivo personal, el ojo debe estar al menos a 30 centímetros de las pantallas electrónicas. No permitas que los niños se sienten demasiado cerca mientras ven la televisión. Si tu hijo prefiere sentarse cerca de la pantalla, haz que le examinen los ojos para descartar la miopía.

No dejes que usen aparatos en la oscuridad o bajo la luz solar. Los niños pueden no prestar atención a las condiciones de iluminación cuando están absortos en una actividad. No permitas el uso de aparatos en una habitación oscura o bajo la luz del sol.

El brillo de la pantalla no debe ser tres veces más oscuro o brillante que el entorno. Si el dispositivo tiene un modo de brillo automático, habilítalo. Esto ajusta automáticamente el brillo de la pantalla de acuerdo con la luz ambiental. Las pantallas digitales causan fatiga visual y otros síntomas relacionados, como dificultades de visión y dolor de cabeza.

Los niños son más vulnerables que los adultos y pasar demasiado tiempo con aparatos puede afectar su visión. Es difícil mantener a los niños alejados de los dispositivos, pero puedes tomar medidas para minimizar los efectos adversos siguiendo estos consejos.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.