¿Por qué regalar juguetes ecológicos?

Diversión, ecología, respeto, historias... ¡Cuánto nos puede enseñar un simple regalo! Te contamos todo lo que debes saber sobre los juguetes ecológicos.

Regalar juguetes ecológicos se perfila como una tendencia en crecimiento, ya que cada vez con más frecuencia se buscan este tipo de obsequios para los niños. ¿Cuál es la razón?

Una de las explicaciones es que en las últimas décadas la onda verde se ha multiplicado y los temas referidos al cuidado del planeta y la sustentabilidad se han vuelto protagonistas. Esto ha llevado a que muchas personas se interesen en el tema, se eduquen y modifiquen sus conductas de consumo a un estilo más respetuoso con la naturaleza. Por suerte, este cambio incluye elecciones más ecológicas a la hora de comprar juguetes.

Por otro lado, se ha advertido desde hace tiempo que parte de la industria (especialmente los asiáticos) fabrican los juguetes con materiales que contienen ingredientes tóxicos como el cloruro de polivinilo, ftalatos, bisfenol A y plomo. Esto pone en riesgo la salud de los niños y ubica a los juguetes ecológicos como la alternativa más segura y saludable, al no contener elementos tóxicos que puedan afectarlos.

Juguetes ecológicos para todas las edades

Los niños no distinguen de qué están hechos los juguetes, en especial si son muy pequeños. A ellos les interesa que les aporten diversión, que sean coloridos y que puedan manipularlos con libertad. Para estos casos, es tu responsabilidad buscar y regalar juguetes ecológicos que cuiden la salud de los pequeños y, a la vez los, entretengan.

Por otro lado, los niños más mayores aprenderán rápidamente el concepto. Seguro que van a preferir que siempre les regales juguetes ecológicos, especialmente a partir del momento en el que les expliques los beneficios de su uso, tanto para ellos, como para el planeta y la naturaleza.

Beneficios de los juguetes ecológicos

Regalar este tipo de juguetes beneficia de forma directa a la naturaleza en aspectos relevantes como los siguientes:

• Reducción de los residuos plásticos.
• Utilización de recursos renovales: lápices de cera de abeja, madera cultivada, telas de tejidos naturales, lápices de colores de aceite de soja, barnices a base de agua, plastilinas vegetales, colorantes y tintes de origen natural…
• Uso de embalajes biodregradables o reutilizables.
• Reciclado de materiales.

Esto es en lo que se refiere al producto, pero regalar juguetes ecofriendly tiene muchos más beneficios que está relacionados con lo que enseñan.

Los niños también se benefician

Todos los juguetes entretienen y educan al mismo tiempo y, en el proceso, estimulan la creatividad, la motricidad y activan la curiosidad. Además, contribuyen a fomentar conductas colaborativas, solidarias y participativas. Pero también los juguetes ecológicos aportan otros valores y aprendizajes:

• Enseñan a los niños a ser respetuosos con el medio ambiente: al tratarse de materiales naturales o reciclados, se reduce la generación de residuos que luego van a parar a basureros o al mar.
• Al tener mecanismos y formas sencillas, los pequeños imaginan todas las posibilidades de uso e inventan situaciones de juegos, alimentando su creatividad constantemente.
• Invitan al juego tranquilo, sin la sobreestimulación de sonidos estridentes o luces de colores.
• Son duraderos, lo que reduce el consumismo y el gasto de dinero en tu hogar.
• Sus diseños son tradicionales y nunca pasan de moda, por lo que las historias alrededor de ellos se transmiten por generaciones y fortalecen los vínculos afectivos.

  

El regalo perfecto

Si tienes una impronta “verde” y quieres que en tu casa los niños aprendan conductas ecológicas desde temprana edad, regalar juguetes ecológicos es un gran comienzo.

Ya sea que estén fabricados con material 100 % reciclado, como los famosos Greentoys, o que sean elaborados con elementos 100 % naturales como los increíbles modelos de Widobow, construídos con madera, imanes y cera, siempre estarás regalando juguetes ecológicos de calidad y con un alto valor añadido.

Por otro lado, si hay bebés en casa, tendrás la tranquilidad de que la manipulación de los juguetes es segura y que no hay problemas con que se los lleven a la boca y los saboreen como a ellos les gusta.