Mi papá es también muy importante en mi crianza

Mi papá es también muy importante en mi crianza
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 10 abril, 2020

Por supuesto que mi papá es también muy importante en mi crianza. Pues estos héroes sin capa tan propios de la infancia, marcan nuestro norte para toda la vida, convirtiéndose así en otro modelo a seguir -además de mi amada madre- cuando crezca.

Mi papá es por lejos sinónimo diversión, fortaleza y dulzura. Es ese hombre robusto que comenzó sosteniéndome con temor de hacerme daño al verme tan pequeño e indefenso, tan frágil. Sin embargo, es un ser que se reinventó para cargarme con extremo cuidado de bebé y que, hoy en día, aún sostiene mi corazón.

Mi papá equivale a miles de negociaciones con resultados muy diversos, pero también, cientos de caprichos cumplidos. Mi papá es la calma y la frialdad ante cualquier problema o inconveniente. Mi brújula, mis narraciones nocturnas, mis tardes de fútbol o de pezca. No obstante, representa mucho más.

Mi papá es contención en su máxima potencia

Mi padre es un par de brazos fornidos dispuestos a dar los más sanadores y reconfortantes abrazos, sea para intentar modelarme como persona al expresar su profundo amor y hacerme sentir amado, o bien volver a armarme cuando me siento destruido ante alguna cachetada de la vida.

Mi papá siempre ha funcionado como una brújula en mi vida. Siempre que estoy confundido, recurro a él por sus sabios consejos al calor de las más certeras y pertinentes palabras. Él es quien funciona como el tutor de las plantas en tanto que marca nuestra dirección.

Mi papá juega conmigo

Incluso, él es esa palabra o muestra de amor justa, que llega en aquellos momentos en que más se lo necesita. Es también cómo quiero sentirme amada, cuidada, valorada y respetada por un hombre a futuro o incluso, con sus muestras de afecto, es ejemplo de cómo se debe tratar a una mujer y enamorarla todos los días.

Mi papá es es más fuerte y valiente que un luchador romano, mostrándose tan fuerte como un roble en aquellos momentos más difíciles de atravesar. Es un tiempo para sanar, una palabra para pensar, una caricia para finalmente sanar.

Este guerrero es quien me enseñó junto al amor de su vida a abrazar la vida con tenacidad y a dejar en cada oportunidad de vivir mucho esfuerzo y sacrificio por quien se ama, también poniéndose en segundo lugar, fijando como prioridad nada menos que la familia que con orgullo logró conformar.

Mi papá se caracterizó por desvivirse para hacerme feliz, apelando hasta los más pequeños e insignificantes capaces de poner los más estridentes colores a mi feliz e inocente mundo. Y por eso siempre estaré agradecido tanto a papá como a mamá por atendar toda necesidad.

Por todo esto y por aún muchísimo más, siempre sostendré que esta encantadora persona tan llena de magia es un envase cargado con amor puro e incondicional, aquel que puede demostrarse en los más dulces gestos, miradas o sonrisas, ese que trasciende las meras frases bonitas.

COVER-pAPÁ-520x272

Mi papá tiene el don de enseñarme jugando

Este héroe anónimo que se despierta a horas imposibles y después de una agotadora rutina de trabajo, vuelve a casa cansado y aun así dedica un buen tiempo simplemente a estar conmigo. Conversar sobre cómo estuvo el día, cómo me ha ido en el colegio o incluso compartir algún juego.

Por eso, papi no solo es diversión, sino que tiene el don de enseñarme jugando. Los colores, los números o letras, es más entretenido aprenderlas cantando o apelando a alguna actividad lúdica que solo él es capaz de vislumbrar antes que cualquiera.

Mi papá es el mejor portero, se ha convertido en mi mejor caballito de batalla estando en el parque, es el tiburón que más me aterra y hace reír cuando jugamos en el agua y, por qué no, un gran cuenta cuentas en aquellas noches en donde me da miedo que aparezcan fantasmas.

Por todos estos motivos y por muchos más, mi papá también es fundamental en mi crianza. Permítele tener el lugar que le corresponde a pesar de cualquier circunstancia, pues tener un hijo es cosa de dos, por lo que mi amor siempre será eterno e incondicional para ambos.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.


  • Bowlby, J. (1986). Vínculos afectivos: formación, desarrollo y pérdida. Madrid: Morata.
  • Bowlby, J. (1995). Teoría del apego. Lebovici, Weil-HalpernF.
  • Garrido-Rojas, L. (2006). Apego, emoción y regulación emocional. Implicaciones para la salud. Revista latinoamericana de psicología, 38(3), 493-507. https://www.redalyc.org/pdf/805/80538304.pdf
  • Marrone, M., Diamond, N., Juri, L., & Bleichmar, H. (2001). La teoría del apego: un enfoque actual. Madrid: Psimática.
  • Moneta, M. (2003). El Apego. Aspectos clínicos y psicobiológicos de la díada madre-hijo. Santiago: Cuatro Vientos

Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.