Guía para conservar la leche materna

¿Es compatible la vuelta al trabajo con la lactancia materna? La respuesta es sí. A continuación, te dejamos esta guía para que conozcas cómo se conserva la leche materna
Guía para conservar la leche materna
Angela Herrero Marin

Escrito y verificado por la farmacéutica Angela Herrero Marin.

Última actualización: 30 marzo, 2021

Cuando llega la hora de reincorporarse al trabajo, es normal que te asalten numerosas dudas sobre tu lactancia. Es importante conocer cómo conservar la leche materna, así como dónde almacenarla y cómo congelarla y descongelarla.

Si no sabes por dónde empezar, no te preocupes. Con esta guía sabrás perfectamente cómo almacenar y conservar tu leche extraída sin que pierda las propiedades para tu pequeño. ¡No pierdas detalle!

Antes de extraer o manipular leche materna

Lo primero de todo, debemos lavarnos bien las manos con agua y jabón, independientemente de que hagamos una extracción manual o con extractor. Asimismo, si usamos un extractor para sacar la leche, debemos comprobar que el extractor esta previamente bien limpio y seco.

En este sentido, algunos recipientes para almacenar la leche pueden ser los siguientes:

Leche materna en bolsas para conservarla.
  • Envases rígidos de plástico o cristal, libres de bisfenol A. Los recipientes aptos para la alimentación contienen un símbolo de una copa y un tenedor. Esto indica qué plástico es apto para recoger alimentos y conservarlos. Los recipientes siempre tienen que estar limpios y secos.
  • Bolsas específicas para el almacenamiento de leche materna. Hoy en día podemos encontrar infinidad de marcas que venden este tipo de bolsas. Son muy prácticas a la hora de congelar.
  • Los botes de recogida de orina no son aptos para alimentación.

¿Cómo conservar la leche materna?

Leche recién extraída:

  • A temperatura ambiente (entre 19 y 22 grados): 6 horas.
  • En bolsa térmica (15 grados): 24 horas.
  • A temperatura ambiente, pero leche descongelada: 1 hora.

Leche refrigerada:

  • Leche fresca en frigorífico: hasta 8 días, aunque lo ideal sería consumirla antes de 5 días.
  • Leche descongelada en frigorífico: 24 horas.

Leche congelada:

  • En congelador de los que están dentro del frigorífico: 2 semanas.
  • En congelador separado, pero que forma parte del frigorífico: entre 3 y 4 meses.
  • En congelador totalmente separado: hasta 12 meses, aunque lo ideal es que no supere los 6 meses.

Es importante aclarar que todos estos tiempos de conservación varían en el caso de los bebés prematuros.

Recomendaciones para conservar la leche materna

  • Se recomienda guardar la leche en pequeñas cantidades (50-60 mililitros) en la nevera o el congelador, ya que una vez descongelada se tendrá que desechar lo que sobre de la toma.
  • Usar la leche refrigerada antes que la congelada.
  • Etiquetar los recipientes con la fecha de extracción para consumir siempre la más antigua. También se debe anotar la cantidad de leche extraída, ya que una vez que la hayamos congelado no podremos comprobar cuánta leche hay en la bolsa.
  • Es recomendable dejar bastante cantidad del envase libre y no llenarlo de leche hasta arriba, ya que, al congelarse, la leche se expande y ocupa más volumen
  • No guardar la leche materna en la puerta del frigorífico, mejor cerca del fondo de este. Los cambios de temperatura al abrir y cerrar la puerta podría estropearla.
  • Si no se va a utilizarla leche recién extraída en un plazo de 4 días, hay que congelarla cuanto antes. Esto ayudará a proteger la calidad de la leche materna.

¿Cómo descongelar y calentar la leche?

  • Para descongelar la leche, se puede sacar a la nevera la noche previa, para que vaya descongelándose lentamente.
  • También se puede descongelar colocando bajo el grifo con agua templada o colocándolo en un recipiente con agua tibia (siempre que no esté en el fuego).
  • No se recomienda descongelar en el microondas, ya que no se calienta de forma homogénea y puede producir quemaduras. Tampoco calentarla directamente en el fuego.
  • Se debe consumir la leche que esté etiquetada con la fecha más antigua.
  • Tras descongelarla, es necesario removerla y mezclarla bien antes de dársela al bebé.

La leche tiene un aspecto diferente

Cuando dejamos la leche extraída en un recipiente, podemos ver cómo esta se separa en dos fases. Esto es debido a la grasa y al agua que tiene.

Antes de ofrecer la leche al bebé, debemos removerla para que se mezclen las fases y quede todo homogéneo. La movemos hasta que se mezclen bien ambas fases, pero no agitamos.

Bolsas para conservar la leche materna.

La leche tiene un olor diferente

En ocasiones, la leche materna refrigerada o descongelada adopta un olor diferente, como un olor a rancio, incluso podemos llegar a cuestionarnos si se ha puesto mala. Esto se debe a la lipasa, una enzima cuya función es descomponer las grasas y liberar los ácidos grasos de la leche. A algunos bebés no les importa este sabor, en cambio, otros pueden rechazarla. En este caso, debemos escaldar la leche.

Para el escaldado de la leche, se debe calentar al fuego hasta que empecemos a ver unas pequeñas burbujitas que salen alrededor de los bordes de la cacerola. Una vez que vemos esas burbujas, apartamos del fuego y lo enfriamos lo más rápido que podamos para congelarla.

¿Cómo conservar la leche materna si me la extraigo en el trabajo?

Si haces la extracción en el trabajo, a veces es posible almacenarla en alguna nevera que haya en la empresa durante el tiempo que estés trabajando. Después, para el trayecto de vuelta a casa, deberás mantener la leche fresca en una nevera portátil con placas de hielo para no romper la cadena de frío.

En caso de no disponer de una nevera en el trabajo, tendrás que guardar la leche en la neverita que lleves contigo junto a varias placas de hielo inmediatamente después de la extracción.

Para evitar que se derrame con el movimiento, es importante que utilices recipientes herméticos o bolsas de almacenamiento de leche.

Esperamos que estos consejos para conservar la leche materna te sean de ayuda. No obstante, si te surge cualquier tipo de duda, consulta con un profesional sanitario para que te oriente al respecto.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.