Ejercicios de cálculo mental para niños de Primaria

En nuestro día a día realizamos diversas acciones de las que no somos conscientes. Muchas de ellas requieren de un cálculo mental en el que está implicado un cálculo matemático, como, por ejemplo, hacer un bizcocho y calcular las cantidades, o controlar si nos han dado bien la vuelta del dinero cuando compramos.

Con todo ello, los ejercicios de cálculo mental para niños de primaria son importantes, ya que el cálculo mental es una competencia básica que debe ser aprendida y ejercitada, tanto en el ámbito escolar como cotidiano.

El cálculo mental

El cálculo mental consiste en la aplicación de estrategias basadas en las propiedades del sistema numérico y en las operaciones aritméticas. Así, de lo que se trata es de poder hacer cálculos matemáticos utilizando solo el cerebro, sin necesidad de recurrir a ningún otro instrumento como lápiz y papel o una calculadora.

Entonces, en la etapa escolar correspondiente, se debe comenzar a aprender a hacer cálculos matemáticos simples para ir avanzando progresivamente hacia otros más complejos. Para esto, es necesario empezar con la comprensión del número y entender cómo este puede componerse y descomponerse en partes distintas y de diversas maneras. Esto permite poder utilizar distintas estrategias de cálculo mental e ir desarrollando la agilidad mental.

Ejercicios de cálculo mental para niños de Primaria

Compartimos a continuación algunos ejemplos de ejercicios de cálculo mental para niños de Primaria. Se trata de ejercicios de cálculo matemático simples válidos para trabajarlos tanto en casa como en el colegio.

• ¿Qué número falta?

Los niños deben encontrar mentalmente el número que falta en ecuaciones en las que falta un término. Los números y el número de sumandos dependerán del nivel educativo; a medida que es mayor, irá aumentando progresivamente,

Ejemplo: 5 + ? = 13;  15 + ? = 25.

• Buscando más opciones

Se trata de que los niños busquen otras opciones de suma para un mismo resultado.

Ejemplo: Sumas que den como resultado 100 (70 +30 o 20 + 80).

• Encuentra al impostor

En series numéricas, el objetivo es que los niños encuentren dónde está el error. Es decir, el número que no es correcto y no sigue el patrón.

Ejemplo: 2, 4, 6, 8, 9, 12, 14, 16. O: 10, 9, 5, 7, 6, 5, 4, 3, 2, 1.

• Permuta los sumandos

Para realizar sumas mentales en las que el primer sumando es mayor que el segundo, es más sencillo enseñarles a los niños a que sumen el número menor al mayor.

Ejemplo: en lugar de sumar 8 +21, sumar 21 + 8. Así, es más sencillo llegar, mentalmente, al resultado final, que es 29.

Otros ejercicios de cálculo mental para niños de primaria…

¿A cuál de los dos se acerca más?

En un papel, se escriben pares de números distintos, es decir, grupos de dos números cada uno. Y, a continuación, en otro folio, números sueltos que deberán ser recortados y puestos en un vaso o pequeño recipiente. Así, cada niño deberá sacar un número del vaso, calcular mentalmente y decir a qué número del par de números anotado en la primera hoja se acerca más.

Este es un ejercicio para aprender matemáticas que puede hacerse en casa con la familia o en el colegio en pequeños grupos. Para ello, hacen falta dos dados para que, por turnos, los niños o adultos los lancen y efectúen la suma de los puntos obtenidos. El resto de las personas pueden controlar que la suma sea exacta e ir apuntando los aciertos de cada jugador en su turno.

Doblar para sumar
Este ejercicio ayuda a sumar mentalmente dos números vecinos (consecutivos). Es decir, que se siguen el uno con el otro en orden. Para ello, es más fácil enseñar a los peques a que piensen en el doble del número menor y luego sumen uno.

Ejemplo: para sumar 7 + 8, sumar 7 +7 y, luego, a ese resultado, que es 14, sumarle 1 para que nos dé el resultado final de 15. O, para sumar 8 +9, sumar 8 + 8 y, luego, a 16, sumarle 1.

Y ahora, algunos divertidos juegos de cálculo mental

El astronauta

Este es un divertido juego de cálculo mental para niños de primaria. Para jugarlo, es necesario crear un tablero y decorarlo con motivos de estrellas, planetas y universos. El tablero debe tener casillas del 1 al 100 y, además, han de elaborarse dos peonzas: una con los números del 1 al 9 y la otra con los signos de las operaciones aritméticas (suma, resta, multiplicación y división). Las instrucciones son las siguientes:

• Cada jugador tira la peonza de los números y coloca su ficha en la casilla correspondiente al número que le haya salido.
• El jugador que comienza debe lanzar ambas peonzas (la de números y la de operaciones) y realizar el cálculo partiendo de su casilla. Por ejemplo, si está en la casilla 3 y en las peonzas obtiene un “5” y un “+”, habrá de sumar 3 más 5 y colocarse en la casilla del resultado; es decir, en la 8.
• El resto de niños continúan con la misma dinámica por turnos.
• Gana quien antes llegue a la casilla 100.

Cartas para sumar

Para este juego han de crearse una serie de cartas tamaño naipe en las que se colocan los números del 1 al 20 (uno en cada carta). Los niños forman parejas y comienzan a jugar:

• Se coloca una carta sobre la mesa, con el número hacia abajo
• El niño que comienza da la vuelta a la carta y lanza una de las suyas. Rápidamente habrá de efectuar mentalmente la suma de ambas cantidades.
• Si el resultado es correcto, continúa el juego lanzándose nuevas cartas que se van sumando a la que queda sobre la mesa.
• Quien haga un cálculo incorrecto, se lleva todas las cartas.
• Pierde quien tenga más cartas al finalizar.

El tren de la suma

En esta ocasión los niños han de formar una fila colocándose uno detrás del otro. Así, al primero se le ofrece una suma que ha de resolver (por ejemplo: 9+8).

Este niño deberá dar el resulta e indicar qué número ha de sumársele al mismo. Por ejemplo, indicará que el resultado son 17 y que hay que sumarle 5. El niño de detrás indicará el resultado de esta suma (22) y el siguiente número a sumar. El juego continuará hasta que todos los niños hayan participado.

Como ves, existen multitud de ejercicios de cálculo mental para niños de primaria que pueden resultar estimulantes y divertidos para ellos. Recuerda que puedes variar la dificultad en función de los conocimientos de los niños (por ejemplo, probando con multiplicaciones y divisiones en lugar de solo sumas). Con la práctica, su agilidad mental se incrementará notablemente.