Cómo hablar de cosas difíciles con niños pequeños

A continuación, vamos a explicarte cómo puedes hablar de cosas difíciles con niños pequeños de 2 a 6 años.
Cómo hablar de cosas difíciles con niños pequeños
María José Roldán

Escrito y verificado por la psicopedagoga María José Roldán.

Última actualización: 20 junio, 2020

Uno de los trabajos más complicados en la crianza de los hijos es hablar de cosas difíciles con niños pequeños. Ya es bastante complicado de explicar cuando la lavadora se come un peluche favorito, o cuando un acosador actúa mal en la escuela. Pero puede parecer imposible poner en palabras algunos de los problemas realmente importantes, como la violencia, el racismo y otros temas importantes.

Comunicación hoy en día con niños pequeños

En la era de las notificaciones constantes, la transmisión de vídeos y la cobertura de noticias durante las 24 horas, cuando incluso los niños pequeños están expuestos a historias realmente serias, es importante enfrentar este desafío de frente.

Abordar las cosas difíciles hace que tus hijos se sientan más seguros, fortalece su vínculo y los enseña sobre el mundo. Cuando les muestras cómo recopilar e interpretar información, hacer preguntas y verificar las fuentes, se convierten en pensadores críticos.

Siempre es triste enfrentar los problemas que el mundo no ha podido resolver. Pero al educar a nuestros hijos con conocimiento, compasión y carácter fuerte, podemos darles todas las herramientas que necesitan para mejorar las cosas.

Padre hablando con de cosas difíciles con su hijo pequeño en el parque.

Siempre es una buena idea utilizar la edad y la etapa de desarrollo de tu hijo como guía para iniciar conversaciones, para que aborden la información de manera diferente a medida que crecen.

Comprender cómo los niños perciben el mundo

Comprender un poco sobre cómo los niños perciben el mundo en cada fase de su desarrollo te ayuda a entregar información sobre él de la manera más apropiada para su edad. Por supuesto, cada niño aporta sus propias sensibilidades, temperamento, experiencia y otros rasgos individuales a cualquier conversación.

Por lo tanto, usa tu mejor criterio en cuanto a cómo tu hijo tiende a tomar información para determinar qué tan profundo debes ir. Los consejos que proporcionamos a continuación son pautas generales para hablar cualquier tema difícil con niños de 2 años hasta los 6 años, siguiendo las pautas de desarrollo infantil.

Los niños pequeños no tienen suficiente experiencia de vida para comprender algunos de los elementos involucrados en temas complejos y difíciles. Tampoco tienen una comprensión firme de conceptos abstractos o de causa y efecto.

Debido a que ellos y sus relaciones principales (mamá, papá, hermanos, abuelos, incluso el perro de la familia) son el centro de su mundo, se concretan en cómo las cosas los afectan. Pero ¿cómo hablar de cosas difíciles con niños tan pequeños?

Hablar de cosas difíciles con niños de 2 a 6 años

Son muy sensibles a los estados emocionales de los padres y pueden preocuparse de que hayan hecho algo para molestarte. Todo esto hace que sea difícil explicar grandes problemas y hablar de cosas difíciles con niños pequeños. Por otro lado, puedes controlar mejor su exposición a los medios y, por lo general, pueden avanzar con bastante rapidez. Para ello, puedes seguir estos ejemplos:

  • Mantén las noticias a raya. Haz lo que puedas para limitar la exposición de los niños pequeños a sujetos inapropiados para su edad apagando o silenciando el televisor y eligiendo medios que estén dirigidos a su edad.
  • Tranquilizar con palabras y gestos. Puedes decir cosas como: “Estás a salvo. Mamá y papá están a salvo. Y nuestra familia está a salvo”. Los abrazos y acurrucarse también hacen maravillas.
  • Aborda los sentimientos, los tuyos y los de tu pequeño. Di algo como: “Está bien sentirse asustado, triste o confundido. Esos sentimientos son naturales y todos los sentimos alguna vez”. Intenta también decir cosas como: “Estoy molesto, pero no contigo”.
  • Descubre lo que saben. Es posible que tu hijo no entiendan el problema muy bien. Pregúntale qué cree que pasó antes de darle alguna imagen.
  • Descompón los problemas en los términos más simples. Para delitos violentos, puedes decir: “Alguien usó un arma para lastimar a las personas”. Para los crímenes de odio, intenta decir algo como: “Algunos grupos de personas todavía no reciben un trato igual o justo”.
  • Ten en cuenta tus propios prejuicios. Todos los tenemos. Di cosas como “hombre”, “mujer”, “niña” y “niño”, no “chico gordo”, “mujer sin hogar”, “niña bonita” o “niño blanco”. Evita describir el origen étnico, la identidad sexual, el peso, el estado financiero, etc., de una persona, a menos que sea relevante para el problema.
Familia charlando para mantener un buena comunicación.

Hablar de cosas difíciles con niños teniendo en cuenta su entendimiento

Usa vocabulario, ideas y relaciones con las que estén familiarizados. Recuerda una situación reciente y similar de sus vidas con la que puedan relacionarse. Puedes decir cosas como: “Un hombre robó algo. ¿Recuerdas cuando alguien cogió tu mochila en el cole por equivocación?”.

Usa términos básicos para los sentimientos, como “enfadado”, “triste”, “asustado”, “feliz” y “sorprendido”. Los niños pequeños entienden las emociones, pero no entienden totalmente las enfermedades mentales. Puedes decir que alguien estaba enfadado o muy confundido y necesitaba ayuda de un profesional.

Además, para hablar de cosas difíciles con niños pequeños, es necesario comunicarles que alguien les protege, para que se sientan bien con su entorno. Puedes decir algo como: “Mamá y papá se asegurarán de que nada malo le pase a nuestra familia”. O “la policía atrapará al malo”.

Hablar de temas complicados con los niños

Como has podido ver, son varios los recursos que puedes utilizar a la hora de hablar de cosas difíciles con los niños. Has de tener en cuenta, en todo momento, la edad y la madurez de tu pequeño y aplicar los métodos que mejor se adapten a tu hijo y a las circunstancia.


Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.