Ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio: 11 pasos

Ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio es fundamental para reducir el impacto que puede tener en ellos esta situación. Toma nota de las siguientes recomendaciones.
Ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio: 11 pasos
Ana Couñago

Revisado y aprobado por la psicóloga Ana Couñago.

Última actualización: 19 diciembre, 2022

Cuando decides que lo más sano para tu vida familiar es terminar con la relación de pareja, debes ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio, encarar las dificultades y asumir los grandes cambios que llegan después de esta situación.

Aunque el proceso no es nada sencillo, puedes ayudar a sobrellevar el divorcio de una forma sana. Si es tu caso, pon en práctica los siguientes pasos y lograrás disminuir el impacto negativo.

¿Cómo puedes ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio?

Lo primero sera cómo darles la noticia. No es fácil, pero es ineludible.

Lo recomendable es que estén ambos padres y que tras comunicar la decisión irrevocable de no seguir juntos como pareja, los niños entiendan y sientan que no son culpables de nada. Y que tú y tu ex pareja harán todo lo posible para llevar adelante con amor y dedicación tareas y responsabilidades compartidas.

1. Hazles saber que son amados por ti y tu ex pareja

Es bastante común que los niños empiecen a sentirse responsables por la separación y que asocien un mal comportamiento o un resultado poco satisfactorio en la escuela con la ruptura de sus padres. Para que esto no pase, hazles saber que las causas de la separación son ajenas a ellos y que el amor de padres sigue intacto.



2. Planea actividades alternas

Si tu ex pareja es una persona poco constante y ya ha fallado con respecto al tiempo que debe compartir con tus hijos, planea actividades especiales que puedas realizar con ellos, así no se sentirán abandonados si su padre o madre no puede llegar.

Evita hacer comentarios negativos que afecten la opinión de tus hijos sobre su padre o madre.

3. Dales la suficiente confianza para que comuniquen sus sentimientos

Cuando estimulas esta dimensión en tus hijos, evitarás que se sientan frustrados y que poco a poco creen resentimientos. Habla sincera y abiertamente con tus hijos en todo momento para que ellos aprendan que no está mal comunicar lo que sienten, si no quieren hablar, pídeles que escriban una carta o hagan un dibujo.

4. Prepárate para responder preguntas apremiantes

La incertidumbre estará a la orden del día, por eso hay que estar preparados para las preguntas, naturales, obvias y, en algunos casos, tácitas. Los hijos querrán saber con quiénes vivirán o cómo tendrán lugar los encuentros o las visitas.

Ir al colegio, al fútbol o a la danza, son actividades que no deben verse interrumpidas, no obstante, el divorcio determinará otras dinámicas. Aclara con suficiencia cómo serán de ahora en adelante.

Los amigos, las citas en casa con los compañeros del cole para hacer tareas, las vacaciones o las fechas típicas de encuentros familiares como cumpleaños o fiestas decembrinas, tendrán nuevas características.

Tus hijos tienen el derecho y la necesidad de conocerlas para asimilarlas y formar parte según la edad y el grado de madurez de algunas decisiones.

5. Estimula la cercanía con otros miembros de tu familia

Intenta incluir en tus rutinas familiares a otras personas confiables y cercanas a la familia. Si no tiene la figura de un padre o madre presente, un familiar puede darle una visión diferente de lo que es y lo que le gustaría ser en la adultez. Estrecha los lazos con personas que pueden aportar cosas positivas a sus vidas.

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6. Evita discutir en presencia de tus hijos

Una de las claves a la hora de ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio, es que nunca te vean discutiendo de manera acalorada con tu ex pareja. Encuentra los momentos adecuados para tratar temas conflictivos, los niños no tienen que ser partícipes de ello. Procura que la relación se lleve de una forma tan cordial como sea posible.

7. No los predispongas ni los presiones para que se identifiquen con uno de los dos

Es importante que una vez separados no busques que tus hijos tomen partido poniéndose del lado de uno de los dos. No expongas las razones de la separación si están presentes y sabes que podrían dañar o afectar la imagen de su padre o madre. Trata de referirte a tu expareja siempre con respeto. Si crees que no puedes hacerlo porque es muy reciente la separación y aún sientes enojo, simplemente no hables de eso.

En este caso, no son los hijos las personas indicadas para desahogarse porque se les estaría sumando una presión innecesaria a la situación que de por sí ya es embarazosa para todos. Tendrán tiempo para darles explicaciones cuando estén preparados.

8. Hazlos sentir cómodos en cualquier lugar en que se encuentren

Ya sea que vivan contigo o que vayan a verte solo los fines de semana o días autorizados, dales una calurosa bienvenida a casa y demuéstrales que han llegado a un lugar en el que son bienvenidos y amados. Busca que el poco o mucho tiempo que compartas con ellos sea agradable y de calidad.

9. No los sobrecargues con tus preocupaciones

No te quejes de las situaciones familiares cuando estás con tus hijos. La infancia debe estar aislada de los conflictos de los adultos, déjalos disfrutar de su niñez, cuando crezcan entenderán todo por sí mismos. Conserva la imagen positiva que tus hijos tienen de ti y tu pareja.

10. Cuida tu salud

Es sabido que el estrés baja las defensas del organismo y el divorcio es sin lugar a dudas una situación estresante.

Tanto es así, que expertos observaron que se debía «abordar el fenómeno del divorcio además de legalmente, a nivel sanitario, ya que influye negativamente en la vida de las personas pudiendo causar repercusiones a nivel de salud, produciendo estrés, pánico, problemas de organización, dificultades para la socialización, etcétera».

Asegúrate de comer sano y dormir las horas suficientes. Procura espacios para caminar y hazte rutinas de ejercicios cotidianos. Necesitas salud para hacerle frente a la adversidad y para llevar con entereza la transición junto a tus hijos.

11. Acompáñalos en la adaptación a un nuevo escenario

Mantén siempre una actitud empática y solidaria con tus hijos en todo el proceso. Aun sin decírtelo con palabras, pueden estar atravesando días de inseguridades, temores e incertidumbres que se verán reflejadas en su socialización o rendimiento escolar.

Se debe ser comprensivos y ofrecerles apoyo mientras avanzan en la etapa de aceptación y consiguen sentirse seguros en esta nueva forma de relacionarse.



Tips prácticos para los padres que afrontan una separación

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  • Evita tomar a tu hijo como una forma para descargar tu resentimiento hacia la otra persona. No canalices tus sentimientos negativos restringiendo el tiempo que permites que compartan con su padre o madre.
  • Comunícate con tu ex pareja para que a pesar del divorcio se mantenga la autoridad unánime. Eviten contradecirse para que la disciplina y las reglas funcionen de manera adecuada.
  • Ten una conversación familiar cuando la edad sea adecuada para sumir ciertos aspectos. Explícales lo que pasa en términos sencillos y tan positivos como sea posible.
  • Si ves cambios bruscos en la conducta de tu hijo, no dudes en buscar la ayuda de un profesional. La intervención del psicólogo puede orientarlos y decirles cuáles son los pasos a seguir. En muchos casos se requiere asesoría de una persona externa a la hora de ayudar a tus hijos a lidiar con el divorcio.
  • Mantente en calma para que puedas ser modelo para tus hijos. Antes de cualquier medida que tomes, debes encontrarte en buen estado de salud emocional, sencillamente no puedes darles el equilibrio que no tienes.

Objetivo número uno: evitar la violencia

Cada circunstancia es distinta, mas no podemos si no trabajar en la dirección de evitar a toda costa el desbordamiento de las disputas. Sensatez y gestión de las emociones, se tornan elementos imprescindibles para transitar un proceso no traumático de divorcio.

Acordar la tenencia compartida y llegar cuando sea necesario a mediación familiar; o bien, aceptar asesoría técnica puntual.

Si hay encuentros entre los progenitores, deben evitar escenas y procurar el diálogo. De no ser posible, quizá es el momento oportuno para buscar ayuda especializada.

Si el divorcio es algo común, no tiene por qué serlo el conflicto.


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