Cómo hacer un arcoíris líquido con niños
El arcoíris es un fenómeno tan hermoso como efímero. Por eso, si les dices a los peques que pueden fabricar uno en casa ¡estarán fascinados!
Aprende como hacer un arcoíris líquido en casa, una manualidad divertida que también es un experimento de ciencias para hacer en familia. ¡Toma nota!
Qué es un arcoíris líquido
Vamos a aprender algunos temas de las asignaturas escolares física y química, a través de la creación de un arcoíris de líquido de colores. ¿Pero, de qué se trata realmente? Es un experimento en el cual se puede observar cómo se comportan los líquidos cuyas densidades son diferentes.
“El secreto científico aquí es la densidad. La densidad es una medida de cuánta masa hay en una unidad de volumen determinada. Si la masa es una medida de la cantidad de cosas que hay en un objeto o líquido, la densidad es una medida de qué tan apretadas están esas cosas”.
-Steve Sprangler Sciense-
Otro concepto a tener en cuenta es la estructura de cada líquido, ya que como sus moléculas no se atraen entre sí, no se mezclan y se disponen en capas.
Cómo hacer el arcoíris líquido
Estas manualidades son geniales para hacer en casa o en la escuela, ya que se usan elementos muy sencillos y económicos. Además, ¡mira el tutorial y verás que es muy simple de realizar!
Materiales
- Frasco de cristal con capacidad de 500 ml.
- Cuchara.
- Medidor.
- Recipiente para mezclar.
- Colorantes: azul, amarillo, rojo y verde.
- Jabón para vajilla color azul.
- Aceite vegetal de cocina.
- Miel.
- Alcohol.
Paso a paso
- Dispone en el recipiente para mezclar 100 ml de miel y agrégale dos gotas de rojo y de azul. Mezcla bien para que te quede color púrpura.
- Vierte la miel coloreada en el frasco de cristal, pero cuida que no toque los bordes.
- Mide 100 ml de detergente color azul en el recipiente medidor y luego échalo sobre la miel con cuidado. Siempre disponlo en el centro y que se desparrame solito.
- Coloca 100 ml de agua en el medidor y mézclale dos gotas de colorante verde o de azul y amarillo. Revuelve bien y luego incorpóralo despacio sobre el detergente.
- Ahora viene el amarillo: pon en el medidor 100 ml de aceite vegetal y échalo encima del agua coloreada de verde.
- Para el color rojo, vierte 100 ml de alcohol en el recipiente medidor y añade dos gotas de colorante, mezcla bien y agrégalo sobre la última capa con mucho cuidado.
¡Ya tienes tu arco iris terminado!
Si los niños son más grandes, puedes agregar una actividad extra que es buscar la información de las densidades de cada líquido y que la escriban en el frasco. Así, podrán ver claramente cómo los valores de densidad cada capa cambian desde la base hasta arriba.
Para hacer este arcoíris utilizamos estos 5 elementos líquidos, cuyas densidades son las siguientes:
- Miel: 1.42 g/cm3.
- Jabón líquido: 1.06 g/cm3.
- Agua: 1 g/cm3.
- Aceite vegetal: 0.92 g/cm3.
- Alcohol: 0.79 g/cm3.
¡A jugar!
Uno de los beneficios de las manualidades es que con ellas los niños aprenden mientras juegan y, en este caso, también se sumergen en el mundo de la ciencia.
Sin darse cuenta, mientras se entretienen, disfrutan y ríen al mezclar materiales y colores, construyen conocimientos y desarrollan el pensamiento científico por medio de la curiosidad y la experimentación.
Deja que jueguen y que cada uno prepare un color, para después armar la torre con los líquidos y que se forme ¡este arcoíris mágico!
¿Y si tratamos de mezclar los colores? ¿Qué ocurre? ¿Se puede? ¡Juguemos en familia y encontremos las respuestas a estos interrogantes!
Hacer ciencias con experimentos divertidos
La ciencia se aprende al hacer, probar, ensayar, errar, acertar y por qué no, pasándola bien durante el proceso. ¡Si los niños son curiosos y les gusta investigar pueden utilizar otros líquidos y ver que pasa! ¿Qué te parece?
Ahora que ya tienes claro como hacer un arcoíris líquido, solo queda que tengas los materiales a mano para comenzar. Las manualidades son proyectos divertidos con los que tienes la oportunidad de compartir tiempo de calidad en familia, ensuciarte un poco sin culpas y jugar una tarde en casa. Además de hacer un experimento de ciencias. Un combo perfecto, ¿verdad?
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