7 consejos para elegir una buena canguro
La canguro o la niñera es la persona a la que le dejarás cuidar a lo más preciado que tienes en tu vida: tu hijo. ¿Cuál es el primer consejo para elegir a una buena canguro?: Tómate tu tiempo para conocerla. Es importante que sea una decisión bien pensada y que tengas en cuenta algunos puntos.
No basta con que te caiga bien o que sea ordenada y responsable… aunque estas ya son buenas características. Para elegir una buena canguro, quien será la encargada de cuidar de tu hijo durante tu ausencia, debes tomarte el tiempo de conocerla para observar y corroborar que es una persona en la que puedas confiar plenamente.
1. Busca una persona cualificada
Una de las primeras cosas que tienes que hacer es buscar personal cualificado. Es preciso que la persona que vayas a contratar tenga estudios orientados al trabajo con niños y bebés, es decir, que le guste y sepa trabajar con niños. Si tiene experiencia será mucho mejor puesto que sabrá cómo manejarse en diferentes situaciones.
Si puede demostrarte sus estudios con sus títulos compulsados para verificar que realmente cursó todo lo que te haya comentado en la entrevista, podrás confiar más en su criterio. Para poder confiar en sus estudios tendrá que verificar que los ha cursado sin ponerte ningún problema.
2. Que tenga referencias
Esto se puede corroborar a través de sus trabajos previos o bien de su formación, si es que tiene en un área relacionada con la atención a los niños. La niñera deberá ser capaz de demostrarte que tiene conocimientos y experiencia, por ejemplo, a través de una carta de recomendación de trabajos anteriores.
También es buena idea hablar con quienes haya trabajado antes, pedirles referencias, preguntar cómo se comportó en situaciones de emergencia, por qué ocurrieron las emergencias y por qué la niñera ya no trabaja con quienes estás hablando.
3. Que al principio cuide a tus hijos mientras tú estás en casa
Otra manera de conocer un poco más su experiencia es que la entrevista sea en tu casa y la canguro atienda a tu hijo mientras tú haces otras cosas. De esta manera, conocerás un poco mejor su forma de trabajar con los niños y podrás valorar si hay aspectos que no te gustan o que piensas que debería mejorar.
4. Evalúa a la canguro
Es importante que puedas saber por qué tiene ese interés para el cuidado o educación con los niños. En este sentido, resulta primordial la vocación y no tanto el interés económico. Aunque se le debe pegar como corresponde por su labor, es importante que para esta persona los niños sean lo primero.
También es importante que le preguntes diferentes situaciones en las que se podría ver envuelta en tu ausencia y que te explique cómo podría desenvolverse en caso de que ocurriese. Así podrás saber y evaluar si sería capaz de adaptarse a las situaciones específicas de tu familia.
5. Conocimientos de primeros auxilios
Tener conocimientos de primeros auxilios es un punto a favor para la canguro porque le dará herramientas fundamentales en una situación crítica en la que deba resolver problemas con rapidez y serenidad. Esto sin duda es un conocimiento importante, pero si no lo sabe y te gusta su perfil, siempre puedes enseñarle lo más importante en caso de saberlo.
6. Evaluar los recursos emocionales
Evaluar los recursos emocionales de la canguro es más que importante ya que esto te dará un punto de vista de cómo es a nivel emocional y cómo podría reaccionar en momentos críticos con tus hijos, por ejemplo en el caso de rabietas.
No es recomendable que una mujer con pobres recursos emocionales o con inestabilidad emocional esté a cargo de niños y, mucho menos, de bebés. Una persona que no sea estable emocionalmente podría poner en serio peligro a tus hijos y esto debes evitarlo a toda costa. Si es necesario, puedes hacerle un test psicológico para asegurarte por parte de un profesional de la psicología.
Tampoco es recomendable que lo esté quien está atravesando un momento personal difícil como un duelo, por ejemplo.
“Lo más importante es la experiencia. Contar con un entrenamiento en primeros auxilios también es otro requisito fundamental. El tener estudios en desarrollo infantil temprano es definitivamente un beneficio adicional”.
-Mary O’Connor, expresidente de la Asociación Internacional de Niñeras-
7. Mantén una buena comunicación con la canguro
Es necesario que le preguntes sobre su vida, sus amigos, su familia, si tiene vínculos afectivos saludables con sus seres queridos, etc. Esto es importante para poder hacerte una idea sobre si cuida sus relaciones interpersonales o si no lo hace. También tendrás que asegurarte de que su horario disponible es compatible con las necesidades de tu familia.
En el caso que decidas contratar a alguien para el cuidado de tus hijos, es recomendable que le facilites instrucciones claras y específicas (mejor por escrito), sobre las rutinas que debe hacer con tus hijos y las tareas que deba realizar en cada caso. También deberás dejarle teléfonos de contacto (que deberán estar disponibles) por si te necesita ante una emergencia (dale también el de algún familiar por si no te localizan a ti).
Señales de que es una buena canguro
Una vez que hayas contratado a tu canguro y una vez que comience a trabajar en el cuidado de tus hijos, es importante que estés atento/a a algunas señales que te indicarán que verdaderamente has contratado una buena canguro. ¡No pierdas detalle!
- Tus hijos hablan mucho de tu niñera y de lo cariñosa que es.
- Encuentra soluciones creativas a los problemas.
- Sabe trabajar en equipo contigo para cuidar de la mejor forma posible a tus hijos. Te pedirá consejos y ayuda.
- Es responsable y puntual.
- Quiere mantener un buen contacto contigo y te informa todo el tiempo.
- Tus hijos aprenden nuevas cosas con ella.
- No ocurren accidentes frecuentes.
Si te da la sensación de que la canguro es buena para tus hijos, ¡fenomenal! Significa que tienes a una gran persona en tu hogar. Pero si por el contrario crees que la canguro contratada no es buena opción para tu familia, entonces tendrás que buscar a otra persona siguiendo los consejos que aquí te hemos dado.